¿Qué hay detrás de la nueva base militar de Obama en Chile?

¿Qué hay detrás de la nueva base militar de Obama en Chile?

La construcción de la nueva base militar norteamericana en Chile produce algunas preocupaciones locales que se preguntan para qué es.

New York, NY. A menos que la campaña de Obama 2012 busque elevarse mediante operaciones para posicionarse en la carrera presidencial con base liberal, la Casa Blanca se ha convertido en una firme impulsora de una red mundial de bases militares estadounidenses. En efecto, si la comunidad progresista estaba prestando atención, Obama ha resultado mucho más militarista que su predecesor George Bush. En particular, Obama ha construido silenciosamente bases norteamericanas en los remotos confines del cono Sur. Es una intriga, dado que los medios norteamericanos no han dado demasiada atención al hecho, mucho menos los medios denominados “progresistas”.

En una reciente columna, discutí la nueva historia de las nuevas bases militares de Obama ubicadas en la región del Chaco –norte de Argentina. Oficialmente las bases en Resistencia son parte de una política de cooperación argentino-norteamericana, una iniciativa que proveerá de servicios de emergencia y eventualmente tropas para ayuda “humanitaria”. Las autoridades locales enfatizaron que las instalaciones corresponden a bases civiles solamente y que están bajo el control de autoridades provinciales.

Sin embargo, hay reclamos argentinos de que Resistencia equivale a una operación encubierta de inteligencia de EE.UU. tenuemente disfrazadas de ayuda humanitaria. Un legislador argentino llegó a pedir una investigación sobre la “base yanqui en el Chaco” y se produjeron también manifestaciones contra esta instalación.

Lo cierto es que la administración Obama empuja por nuevas bases, ahora una localizada en la frontera de Chile. La instalación se financia con los impuestos, cerca de medio millón de dólares, situada en el puerto y ciudad de Condón, provincia de Valparaíso. En Chile, el debate acerca de esta base refleja la misma lucha que la que se produjo contra la instalación de Resistencia: mientras las autoridades locales y los militares norteamericanos reclaman que Condón será utilizada para misiones de paz, la izquierda chilena cree que la base tiene como propósito controlar y reprimir a la población civil local.

El impacto local de las bases norteamericanas

Para la población civil chilena, que tiene larga experiencia con las intervenciones norteamericanas, es volver atrás a días oscuros del dictador Augusto Pinochet. Grupos defensores de derechos humanos denuncian que la base, que simula una zona urbana con 8 edificios, calles y paseos, sugiere que los militares chilenos están interesados en reprimir cualquier protesta. De acuerdo a Unites Press Internacional, Concón “está creciendo dentro de un mayor destino regional de entrenamiento militar y defensa industrial”.

Todo está respaldado por el Comando Sur, con base en Miami. Los EEUU que en los últimos años perdieron regionalmente puntos de hegemonía política y económica, está interesado en seguir manteniendo operaciones militares. Además, desde que el régimen nacionalista-populista de Rafael Correa echó a Washington de la base de Manta (Ecuador) los EEUU han estado buscando sitios alternativos de Sud América.

Por suerte, la bases en el cono Sur no recrean la experiencia de Manta la cual, de muchas formas, era socialmente indeseable para los residentes locales. Mientras buscaba un segundo libro en Quito, hace un par de años, pregunté a Gualdemar Jiménez, un activista político organizándose contra la base de Manta, a fin de que me instruyera sobre este particular. Me explicó que la instalación, localizada sobre la costa del Pacífico y utilizada para vuelos de drogas del espacio aéreo colombiano, había creado mucha fricción. “Manta solía ser un pueblo de pescadores”, explicó. “Ahora los pescadores no tienen acceso a ciertas partes del océano, que son cerradas por razones de seguridad” si bien los guardacostas eran marines –aclaró, indignado- la base se expandió gradualmente sobre tierras de los campesinos provocando daño ambiental.

La base contribuía con 7 millones de dólares a la economía local pero los activistas fueron críticos con la suerte real del desarrollo económico del área, cuestión desmentida por Jiménez que explicó que a lo único que contribuyó fue al incremento de la prostitución.

El secretario de Defensa EE.UU. León Paneta, mantuvo conversaciones con el conservador presidente Sebastián Piñera, rememorando los tiempos de la horrible represión y violación a los derechos humanos de Piñochet. Panetta remarcó que Condón no es una base militar sino un campo de entrenamiento operado enteramente por Chile para preparar las fuerzas armadas para las nuevas operaciones de mantenimiento de la paz.

Por su parte el ministro chileno de defensa declaró que Chile estaba monitoreando la ayuda militar venezolana a Bolivia y con Brasil.

El ministro Goñi y la Escuela de las Américas

Hace un año Goñi viajó a Washington y declaró que EE.UU. era el compañero más importante en materia de defensa y seguridad, además de la voluntad chilena de unir esfuerzos con las fuerzas especiales norteamericanas. Durante su viaje Goñi visitó el actual WHINSEC (antes Escuela de las Américas (SOA), originalmente establecidas en la zona del Canal de Panamá, pero en 1946 reubicado en Fort Benning, Georgia –el autor de la nota brevemente se refiere a las actividades de SOA) Goñi se refirió a los militantes de organizaciones que solicitan el cierre de la SOA como una minoría. Goñi refirió que la embajada norteamericana en Santiago invitó a algunos congresistas chilenos para visitar WHINSEC.

Wikileaks y los mapuches

Por años perseguidos por el estado chileno con leyes antiterroristas desde la era Pinochet, los mapuches reclaman territorios, en tanto ven destruida su cultura. El conflicto se centra en la explotación de los recursos –entre ellos minería, bosques, pesca- que se encuentran en territorios mapuches. En tanto el estado chileno otoorga a las compañías permisos para operar en dichas tierras. Los mapuches sospechan acerca de la instalación de la base y sus fines hacia ellos.

Recientemente escribí una nota sobre cómo el FBI colaboró con el ministro chileno del Interior para investigar a los mapuches. Las revelaciones están contenidas en un cable datado en 2008 relacionado al encuentro entre Bush y el embajador en Santiago, Paul Simons, y el ministro.del Interior, Edmundo Pérez Yoma. De acuerdo al documento el ministro del Interior estaba preocupado acerca de “la potencial radicalización de la población indígena chilena”. Hablando con oficiales norteamericanos, Pérez dijo que los mapuches habían estado recibiendo ayuda financiera (Venezuela, FARC, hasta ETA). Remarcó que el FBI recibió ayuda de los carabineros para identificar y perseguir potenciales actores problemáticos. En otra parte del cable se hace referencia a que la información de los oficiales norteamericanos de inteligencia refirieron que no sólo de FARC o ETA los radicales mapuche reciben ayuda sino que “podría haber potenciales enlaces” con otros grupos extranjeros.

¿Qué hay detrás de la base chilena?

En la próxima campaña presidencial, Obama desea demostrar cómo EE.UU. se desprendió de una impopular guerra en el Medio Oriente y persigue la protección de otros lugares remotos del mundo. Los documentos de Wikileaks revelan un modelo de colaboración entre fuerzas de seguridad de EE.UU. y Santiago, en tanto la población civil local que tiene muy fresca en la memoria los tiempos de la dictadura pinochetista y que exige conocer qué ocurre con la presencia de Washington en el cono Sur.

Traducción de Mónica Oporto para LQSomos

* Enlace original:

http://www.aljazeera.com/indepth/opinion/2012/05/2012526163512636123.html

Nikolas Kozloff is the author of Revolution! South America and the Rise of the New Left.

LQSRemix

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Nos obligan a molestarte con las "galletitas informáticas". Si continuas utilizando este sitio aceptas el uso de cookies. más información

Los ajustes de cookies de esta web están configurados para "permitir cookies" y así ofrecerte la mejor experiencia de navegación posible. Si sigues utilizando esta web sin cambiar tus ajustes de cookies o haces clic en "Aceptar" estarás dando tu consentimiento a esto.

Cerrar