El error del ELN en el Catatumbo acaba con el proceso Paz Total

Por Javier Sáenz Munilla*
El ELN hace tiempo que tiene un problema de cohesión, muchos de sus frentes van por libre. Lo llaman autonomía, pero ya se han dado demasiados casos en los que las directrices del Comando Central, el COCE, son interpretadas de distinta manera por unos y por otros comandantes
El Catatumbo, en el Nororiente de Colombia, sufre estos días de nuevo los peores episodios de la guerra civil que vive el país desde 1948. La incursión criminal del ELN en esa región fronteriza con Venezuela, al modo que históricamente lo han hecho en esa misma zona los narco-paramilitares, no sólo ha provocado la ruptura de las negociaciones que iba a retomar el Gobierno con esa guerrilla, sino que pone en peligro todo el proceso de Paz Total, como denomina el Presidente Gustavo Petro, de forma ambiciosa, su propósito de poner fin a esta larga y cruenta guerra mediante negociaciones con todos los grupos en armas.
El ELN comenzó por desmentir la autoría de estos claros casos de violación del Derecho Internacional Humanitario en el conflicto y por intentar endorsárselos al Frente 33 de las FARC-EP, una disidencia fariana que sigue en armas. Y en un par de días, el ELN se desmintió a sí mismo y acepto ser la organización que perpetró los asesinatos y calificó a los muertos de ser, en realidad, paramilitares.
El ELN envío al Catatumbo a miembros de su Frente en Arauca, donde ya ha creado no hace tanto verdaderos problemas, casi con los mismos argumentos. Los elenos llegados a la región fueron buscando casa por casa en las poblaciones a sus objetivos, los sacaron y los ejecutaron. Guerrilleros desmovilizados de las FARC, acogidos a las medidas de reinserción del Gobierno, miembros de la Unión Patriótica, el movimiento comunista que ha ido siendo exterminado de los 80 para acá por el ejército y los paramilitares, con más de 3.000 asesinados y una población de cientos de personas que han tenido que huir y atravesar la frontera con Venezuela a buscar refugio. Lo mismo que hicieron en el pasado las AUC narco-paramilitares. Las víctimas a día de hoy, más de 80 muertos y miles de desplazados.
Así, casa por casa, buscó esta mañana el ELN a los firmantes de paz Albeiro Díaz Franco y Yurgen Martínez Delgado, en el corregimiento San Pablo, de Teorama, en el Catatumbo. Horas después, los dos hombres fueron hallados muertos en esta zona de Norte de Santander. Otros dos… pic.twitter.com/65rYb6hhuT
— Manolesco (@jhonjacome) January 17, 2025
La realidad que puede vislumbrarse, es simplemente una guerra por la hegemonía, por el control del territorio, que es lo que ha llevado al ELN, a punto de reiniciar los diálogos con el Gobierno, a intentar sacar del Catatumbo al Frente 33 de las FARC-EP. Por esto ha perpetrado esta masacre. No es la primera vez que las guerrillas de izquierdas y también los paramilitares, se enfrentan a tiros entre ellos por esta razón. El Putumayo es una tierra rica, dejada de la mano de los gobiernos y con una población muy pobre. El Putumayo tiene la mayor extensión de cocales del mundo, tiene muchísimo petróleo, tiene uranio… y tiene una situación geoestratégica envidiable, cerca de Venezuela y a un paso del Golfo Maracaibo, por donde sale una buena parte de la mercancía, drogas, armas, etc.
No es que los procesos de paz emprendidos por Petro vayan a las mil maravillas. Hay diálogos con grupos armados del narco-paramilitarismo, con puros delincuentes, con los ex-farianos de la Nueva Marquetalia y muchos problemas en El Chocó, en Arauca, en Cauca, en Nariño. Hasta ahora Petro ha tratado de lidiar sin aplicar medidas que, otrora, sufrió él mismo y su M-19 con los continuos Estados de Sitio. Pero ahora, el estallido brutal de la guerra en esta región que integra territorios de los departamentos de Norte de Santander y parte del Cesar, le acaba de llevar a decretar el Estado de Conmoción Interna.
La declaración del Estado de Conmoción Interior, que acaba de declarar Gustavo Petro, va a complicar de forma grave el manejo del orden público, porque esa medida implica acciones de envergadura de las Fuerzas militares y policiales. La situación puede agravarse en todo el país. Y eso, a dos años del inicio del proceso electoral para las Presidenciales, significaría, probablemente, la imposibilidad de un nuevo gobierno de izquierdas.
El ELN hace tiempo que tiene un problema de cohesión, muchos de sus frentes van por libre. Lo llaman autonomía, pero ya se han dado demasiados casos en los que las directrices del Comando Central, el COCE, son interpretadas de distinta manera por unos y por otros comandantes. El Frente de Arauca siempre ha tenido mucho poder y autonomía en la Organización guerrillera. Porque es un frente rico, por actuar en una zona en la que, la simple amenaza de volar oleoductos, genera resultados económicos. Y quizá en esta ocasión, ese Frente se ha salido de los deseos de paz manifestados claramente por la dirección política del ELN. Ojalá sea así y el ELN rectifique. Está en juego, una vez más, la necesaria paz a la que tiene derecho Colombia.
* Periodista, miembro del Colectivo editorial de LoQueSomos. @pepitorias
Más artículos del autor
Colombia – LoQueSomos
Comparte este artículo, tus amig@s lo agradecerán…
Mastodon: @LQSomos@nobigtech.es; Bluesky: LQSomos;
Telegram: LoQueSomosWeb; Twitter (X): @LQSomos;
Facebook: LoQueSomos; Instagram: LoQueSomos;