La Residencia de Estudiantes, caballo de Troya de la impunidad franquista y la transición

La Residencia de Estudiantes, caballo de Troya de la impunidad franquista y la transición

Acaban de “colarnos” vía BOE (1),  la impunidad franquista. O si quieren en otras palabras,  la legitimación del golpe franquista a  la  República del 18 de julio de 1936 y su posterior victoria.

En el BOE del 19 de noviembre  del 2011, del último Consejo de Ministros de esta legislatura, sale la Orden PRE/3147/2011 por la que se publica un Acuerdo del Consejo de Ministros,  para la “recuperación y preservación del patrimonio de la Residencia de Estudiantes” , firmado por el  Ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui.  Dicha Residencia,  esta presidida en su Patronato por  Felipe de Borbón (esto no lo ponen, es una aclaración mía)

En el Anexo donde se explica dicha orden,   quiero detenerme en  el tercer párrafo  donde pone textualmente:

“….El Decreto de 19 de mayo de 1938 disolvió a la Junta para Ampliación de Estudios y el 24 de noviembre de 1939 asignó sus bienes al recién creado Consejo Superior de Investigaciones Científica (CSIC)” (2)

Sabemos que la valerosa ciudad de Madrid, resistió tres años las embestidas de los fascistas por conquistarla (Es la famosa Defensa de Madrid desde 1936 a 1939), y eso a pesar de ser la ciudad donde se estrenaron los bombardeos fascistas  sistematizados contra  la población civil (por ejemplo a Hospitales, Maternidades, etc.)  que puede incluso llegarse a tipificar como un delito de genocidio.

Por ello aplicar una ley franquista como ese Decreto de mayo de 1938 firmado por Franco desde Burgos sobre un territorio todavía  republicano (3), que es en donde se mantenía la Junta para ampliación de Estudios (JAE)  como es Madrid, Valencia  y Barcelona, supondría  aceptar que el franquismo desde el día del golpe  militar es legítimo.

Una de las principales características de la Monarquía de Juan Carlos es su procedencia franquista, al tener la base de su legitimidad en el mismo acontecimiento histórico que la dictadura, es decir, el alzamiento del 18 de julio y la posterior victoria en la Guerra  Civil.

El nombramiento de Juan Carlos como sucesor de Franco a título de Rey por aprobación de las Cortes, el 22 de julio de 1969, fue uno de los principales acontecimientos que plasmaron en la historia de la instauración de la Monarquía del 18 de julio. El 17 de julio  de 1969 se publicó en el BOE (Boletín Oficial del Estado) el anuncio de la sesión extraordinaria de las Cortes para el día 22, en donde Franco se iba a dirigir sobre el mensaje “en relación al artículo 6º de la Ley de  Sucesión en la Jefatura del Estado”.

Dejo claro que la institución sería de nuevo cuño, no una restauración, quebrando el orden legítimo dinástico a la sucesión al trono, pues este debería recaer en Don Juan de Borbón y no en su hijo.

Por su parte, el Príncipe también afirmó en su discurso de aceptación:

“… Quiero expresar, en primer lugar, que recibo de Su Excelencia el Jefe de Estado y Generalísimo Franco la legitimidad política surgida del 18 de julio de 1936, en medio de tantos sacrificios, de tantos sufrimientos, tristes, pero necesarios, para  que nuestra Patria  encauzase su nuevo destino…”

La prensa  al principio, tras la muerte del dictador en 1975 y durante los primeros días de reinado, destacó la ligazón del nuevo Rey con el anterior Jefe de Estado y con la legitimidad franquista de la Monarquía instaurada. Pero esto se fue diluyendo al paso del tiempo (Transición) con la intención de marcar distancia entre Franco y su sucesor el Rey, a medida que la percepción social del franquismo iba siendo negativa. Juan Carlos era en cambio mostrado  como el representante y hacedor de la democracia. Se pretendía es que el Monarca, utilizando todo su poder  recibido por la legislación franquista condujera el cambio de régimen político de una dictadura a una democracia.  Por eso la prensa, hasta el día de hoy,  optara por no recordar el origen y la legitimidad franquista de la Monarquía, pues podía erosionar  su figura cara a los sectores antifranquistas.

Pero podemos observar que con esta Orden ministerial del 19 de noviembre de 2011, se vuelve a apuntalar   dicha legitimidad no reconociendo la impunidad del franquismo y su ilegitimidad.

Hace tiempo que llevo intentando  recuperar  la figura de mi abuelo, el eminente Doctor Luis Calandre Ibáñez, que fue el director del Hospital de Carabineros situado en la Residencia de  Estudiantes durante la guerra (1937-39) y por ello nombrado Subdelegado de la JAE en  Madrid desde  octubre de 1938 a marzo de 1939,  con la caída de la República.

Para ello he publicado numerosos artículos en la Universidad Autónoma de Barcelona, la Universidad de Cádiz,  la Comunidad de Madrid (Dirección General de Universidades)  un libro, ayudado en una Tesis doctoral (Universidad  de Murcia ),  participado en un libro del CSIC. Incluso hemos conseguido  que se modificara la fecha de una placa en el propio CSIC que ponía la fecha de la JAE: 1907-1938  a que pusiera 1907-1939 (en aplicación de la Ley de la memoria histórica del diciembre del 2007), y la propia página Web del CSIC reconociéndolo (claro que solo a medias ).Todo esto se puede comprobar en mi página Web (4)

Así que ahora nos encontramos con esta contradicción:

Por un lado esa Orden en el BOE, que  da por legal la disolución de la JAE en 1938

Y todo lo anteriormente expuesto  de  todo lo  publicado en instituciones también “oficiales” y la propia placa colocada  recientemente  en el edificio  del Instituto de Física –Química Rocasolano del CSIC en Madrid., con la fecha de 1939.

Finalmente, aunque habría mucho que comentar de dicha Orden, solo diré que va contra la verdadera historia de la Residencia, de la JAE y contra el honor de mi abuelo Luís Calandre Ibáñez.

Y que van a tener muy complicado revalidar el galardón “Sello Patrimonio Europeo” que ellos mismos crearon y se otorgaron en el 2007, manipulando a la propia Comisión de la Unión  Europea, para que se lo dieran ocultando toda la historia auténtica del lugar, lo que era un centro sobre todo dedicado a la ciencia y medicina, formando en los Laboratorios  de los Doctores Calandre, Negrín,  Pío de Rio Hortega, etc. a miles de médicos desde que  se  fundara (la JAE)  por Don  Ramón y Cajal  en el 1907,  hasta su final en marzo de 1939 finalizada con uno de sus discípulos predilectos, a la cabeza, el Dr. Calandre, mi abuelo. La gran obra de la Junta para Ampliación de Estudios, la mayor institución científica que tuvo España, podemos asegurar estuvo desde el principio hasta su final cuidada por  dos auténticos científicos  institucionistas y republicanos: Cajal y Calandre ¡en que mejor manos  sabias y buenas podía haber nacido y muerto nuestra  admirada JAE!

Espero que en la “revalidación” que tiene que pasar con el nuevo procedimiento para este galardón europeo  que acaba de ser aprobado por el Parlamento Europeo, le sea retirado, no solo por  haber ocultado al Hospital de Carabineros, su exitosa lucha contra una epidemia de malaria, sino haber rehabilitado ilegalmente sus edificios destruyendo  parcialmente un refugio antiaéreo que se encuentra debajo  construido por la II República en 1937, para proteger a los enfermos. Por dirigir dicho Hospital de Carabineros, mi abuelo fue condenado a la cárcel por un consejo de guerra sumarísimo   a pagar multa por el Tribunal de Responsabilidades Políticas y pérdida de su puesto como médico, por el Colegio de médicos.

Le costó muy caro ser fiel a la República, como a tantos otros republicanos represaliados.

Y también espero y deseo le sea retirado a la Residencia  dicho galardón europeo, por legitimar  el golpe militar del 18 de julio, como queda de manifiesto en este BOE, pues fue el propio Parlamento Europeo,  en que con un 60% de  mayoría (436 diputados) entre ellos los socialistas (los mismos que han firmado esta Orden ministerial), condenaron el régimen de Franco, y si lo aprobaran ahora,  sería otra contradicción más. Por ello ayer mismo envié una carta de protesta a la Eurodiputada  socialista griega  Chrysoula Paliadeli,  encargada de la Ponencia sobre el  nuevo Sello Patrimonio Europeo, avisándola de dicha Orden Ministerial, contraria a la Historia  al Patrimonio Europeo y  a Derecho, claro el de la Constitución republicana de 1931, la única válida.

Notas:

1. – BOE 19/11/2011

2.- Ley de 24 de noviembre de 1939, creando el CSIC

3.- BOE 20/5/1938

4.- www.luiscalandre.com

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