Madre de Plaza de Mayo y luchadora incansable de los Derechos Humanos ¡Nora Eterna!

Norita jamás logró encontrar a su hijo, pero, como tantas otras mujeres que se agruparon en las Madres y en las Abuelas de Plaza de Mayo, transformó su duelo en resistencia y solidaridad y, sin quererlo, se convirtió en un ícono de la defensa de los derechos humanos