Washington baraja las cartas: El Cairo teme un error de cálculo
Por Islam Farag*. LQSomos.
Parece que la decisión de la OPEP+ de reducir la producción de petróleo en 2 millones de barriles por día provocó reacciones confusas en Estados Unidos
La decisión de Estados Unidos de retener $75 millones en ayuda militar asignada a Egipto, aproximadamente un mes después de retener $130 millones de la misma ayuda, es una manifestación de esta confusión.
Barajar las cartas
La retención de la ayuda se produjo después de un comunicado emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Egipto apoyando la posición de Arabia Saudita, que juega un papel de liderazgo en la OPEP, especialmente en lo que respecta a las consideraciones técnicas de la decisión de reducir la producción de petróleo.
Castigar a Egipto inmediatamente después de esta declaración de apoyo, con el pretexto de supuestas violaciones de los derechos humanos en Egipto, fue un barajo de cartas, un juego al que Washington se ha acostumbrado. Sin embargo, es posible que la administración estadounidense no se dé cuenta de que esta política tendrá repercusiones negativas tangibles.
Según una fuente egipcia bien informada, El Cairo está acostumbrado a tales barajas de cartas por parte de Estados Unidos.
“La administración estadounidense cree que este tipo de sanciones podría lograr resultados a la luz de las difíciles presiones económicas que está experimentando Egipto. Por el contrario, este tipo de prácticas motiva a El Cairo a avanzar en la oposición a la política estadounidense y a ser más estricto en su negativa a interferir en sus asuntos internos”, dijo la fuente.
“Egipto puede confundir las políticas estadounidenses en Libia, Irak, el Mediterráneo oriental y la seguridad del Mar Rojo”, agregó.
Creo que la crisis económica en Egipto, que surgió claramente tras la invasión rusa a Ucrania, puso al presidente Abdel Fattah al-Sisi en un dilema que lo convenció de la necesidad de lograr un avance tangible en temas de derechos humanos y la liberación de los presos políticos.
La crisis también lo llevó a anunciar el lanzamiento de un diálogo nacional entre las fuerzas políticas ya anunciar una conferencia económica para discutir las mejores salidas a la crisis.
Paso lento
Los pasos del régimen hacia la apertura política pueden haber sido lentos, pero en un momento en que El Cairo está en conversaciones serias para obtener un préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) y se prepara para albergar la cumbre climática de las Naciones Unidas COP27, su aliento a seguir Los pasos nunca son con sanciones y recortes de ayudas.
Según una fuente política, el sistema de seguridad de Egipto se prepara de puntillas para cualquier intento de frustrar la COP27 mediante manifestaciones que pretenden repetir lo ocurrido a principios de la década pasada.
“La crisis económica en Egipto es real y afecta a todos. Hay temores de un aumento adicional en el costo de vida luego de tomar decisiones económicas difíciles luego de obtener el préstamo del FMI. Intentar explotar el estado de ira reprimida para rebelar a los ciudadanos es extremadamente peligroso para la estabilidad y las condiciones económicas del país”, agregó la fuente.
Resentimiento egipcio
“El Cairo está muy molesto con la decisión y el momento de retener la ayuda. Pero el régimen egipcio prefiere tratar estos temas a puerta cerrada”, dijo.
La ayuda estadounidense a Egipto ha estado en una gran tensión desde la llegada del presidente Joe Biden a la Casa Blanca. Hay muchas razones para esto, la primera de las cuales es la relación amistosa entre el expresidente estadounidense Donald Trump y Sisi.
Desde la entrada de Biden en la Casa Blanca, los informes de derechos humanos de EE. UU., que confirman que continúa la represión de las libertades en Egipto, han aumentado. Parte de la ayuda también se congeló por primera vez en 2021. Recientemente se llevó a cabo una segunda congelación, a pesar del acercamiento egipcio-estadounidense desde la mediación de El Cairo para calmar las cosas en la Franja de Gaza el año pasado.
Muchos esperaban que el acercamiento entre Biden y Sisi condujera a la devolución total de la ayuda estadounidense a El Cairo, pero la deducción de gran parte de la ayuda, que asciende a más de dos mil quinientos millones de libras egipcias, se produjo bajo el pretexto de la deterioro de la situación de los derechos humanos en Egipto.
Según los medios estadounidenses, altos miembros del Congreso de los EE.UU están pidiendo que se retenga el monto total de la ayuda hasta que Egipto mejore su historial de derechos humanos, especialmente con respecto a los presos políticos.
Sin embargo, según una tercera fuente, la influencia estadounidense en Egipto ha disminuido considerablemente en los últimos años, específicamente desde la revolución del 30 de junio de 2013 que derrocó al presidente Mohamed Morsi, en contra de la voluntad de muchos partidos internacionales, incluido Washington.
Relaciones entrelazadas
En los últimos años, Egipto ha establecido relaciones políticas, económicas y militares entrelazadas con los países del Golfo, China, Rusia y el Mediterráneo, asegurándose amplios márgenes de maniobra, especialmente frente a los arrogantes dictados estadounidenses que descuidan los principios de la soberanía interna de los países.
Aunque muchas críticas de derechos humanos al régimen de Sisi tienen mérito y consideración, este régimen es consciente de que es importante para los intereses de muchas partes internacionales.
El régimen ha logrado garantizar una estabilidad real después de un problema de seguridad en deterioro, en el que los países vecinos temían el colapso de la situación de seguridad para toda la región.
También ha tenido éxito en lograr asociaciones económicas y estratégicas con los Estados del Golfo, concluyendo importantes acuerdos de armas que estaban reactivando las economías europeas. El régimen ahora representa una de las soluciones importantes al problema del suministro de gas a Europa en el invierno después de que Rusia reduzca sus suministros. También logró fortalecer sus relaciones económicas y políticas con Rusia y China.
Según la tercera fuente, retener la ayuda no perjudica a El Cairo tanto como perjudica la influencia y los intereses estadounidenses dentro de Egipto.
Miedo a un error de cálculo
A pesar de las muchas dificultades económicas a las que se ha enfrentado Egipto en los últimos años, ha logrado obtener importantes subvenciones y ayudas de los países del Golfo. También pudo obtener un préstamo del FMI 3 veces, y se está preparando para obtener un cuarto préstamo a pesar de la dificultad de hacerlo bajo las regulaciones de la Institución Financiera Internacional.
Esto no hubiera sido posible sin la red de múltiples intereses que el régimen ha tejido en los últimos años.
De hecho, el desafío económico actual es uno de los más difíciles que enfrenta el régimen. Es consciente de ello y teme cualquier error en los cálculos del avance político necesario, para que los sentimientos de ira reprimidos no se conviertan en protestas que no puedan ser controladas por las fuerzas de seguridad. Esto es algo que temen tanto los opositores como los aliados del régimen.
* Islam Farag es periodista, analista e investigador egipcio. Es experto en asuntos de Medio Oriente. Artículo publicado por United World International, editado por el equipo de PIA Global
Síguenos en redes sociales… Mastodon: @LQSomos@nobigtech.es Diaspora*: lqsomos@wk3.org Telegram: LoQueSomosWeb Twitter: @LQSomos Facebook: LoQueSomos Instagram: LoQueSomos
