Es solo humor negro y cruel
Gabalaui*. LQSomos. Junio 2015
Zapata renuncia a ser concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Madrid
“¿Cómo meterías a cinco millones de judíos en un seiscientos? En el cenicero”. Este es el tuit que Guillermo Zapata, recién elegido concejal en el Ayuntamiento de Madrid por Ahora Madrid, escribió a principios del 2011. Un tuit de hace cuatro años surge ahora unos días después de constituirse el nuevo gobierno madrileño. El objetivo de sacarlo a la luz es evidente. Busca el descrédito del partido que ha conseguido jubilar al Partido Popular después de más de 20 años de gobierno. La estrategia de los populares no es nueva. El juego sucio, las injurias, las acusaciones, fundadas o infundadas, forman parte de la estrategia de la oposición de la derecha. Cuando Mariano Rajoy perdió por primera vez con Zapatero, su partido diseñó una campaña basada en la instrumentalización del atentado del 11M, que no solo consistía en culpar a ETA sino también en deslegitimar la victoria de los socialdemócratas. El control de los medios de comunicación ayudó a difundir las mentiras, las injurias, los insultos, las sospechas prefabricadas y cualquier teoría por muy rocambolesca y absurda que fuera. En Madrid, Esperanza Aguirre adjudicó las licencias televisivas a grupos cercanos al Partido Popular que destacaron por su virulencia y fueron un elemento imprescindible para emponzoñar la vida política. Esta es la actitud que la derecha madrileña adoptará en los próximos meses. Ahora bien, reconocer que detrás del tuit de Zapata existe una intencionalidad política ¿permite obviar la crítica sobre el contenido del mismo?
Lo que han hecho con Zapata es muy habitual en twitter. Se descubre un tuit polémico y se difunde con el objetivo de desprestigiar al autor. Políticos del PP y sus declaraciones xenófobas, racistas o despectivas contra determinados colectivos, políticos del PSOE y sus donde dije digo, digo Diego, los cachorros de Nuevas Generaciones con sus banderas con el pollo, Toni Cantó, que tanto juego ha dado, futbolistas famosos y sus deslices linguísticos, etcétera. Muchos de ellos reales, otros directamente inventados. Pero Zapata lo ha puesto muy fácil. Los buceadores de la basura tuitera, que hay mucha y variada, han encontrado el tuit adecuado. Un chiste antisemita. En twitter, como es habitual, han aparecido sus detractores y sus defensores. Pero sobre todo ha aparecido el argumento estrella que sirve para justificar lo que escribió: el contexto. El chiste hay que contextualizarlo porque formaba parte de un debate sobre los límites del humor negro y que estuviera entrecomillado es una prueba de que se trataba de una “cita”. Parece convincente. El tuit no es producto de un bocazas sino de una discusión intelectual sobre el humor negro a raíz de la polémica generada por un comentario sobre el holocausto del cineasta Vigalondo. Los amigos periodistas del nuevo concejal no han tardado en escribir artículos explicando el contexto para que todos entendamos mejor que no es un chiste que haga gracia a Zapata sino que era un ejemplo de humor negro en un debate intelectualizado. El problema es que el propio Zapata, en sus tuits de disculpa, no hizo mención en ningún momento a la existencia de este contexto pero sí dejó muy claro que le gusta el humor negro y cruel. Es lo que tiene escribir las disculpas antes de decidir la estrategia de defensa.
Muchos de los detractores derechistas se han ocultado detrás del hashtag #ZapataDimisión. Una vez que han mordido la presa no la van a soltar fácilmente. Los populares se indignan hiperbólicamente aunque ellos sean autores de frases, pensamientos y políticas tan o más desafortunadas y vergonzantes. Esperanza Aguirre, rodeada de corrupción, no se iba a quedar atrás y lidera la cacería. Lo esperable. Los defensores un tanto de lo mismo. Fundamentalmente se caracterizan por la ausencia de crítica y la defensa del humor negro. El argumento del contexto ha tenido un éxito considerable. Claro, es que todo tiene un contexto. Solo hay que encontrar uno creíble que difumine las sospechas de que realmente el concejal Zapata se ha partido el pecho con la gracia de los judíos y el cenicero. ¡Qué fácil ha sido reírse, burlarse y vilipendiar a los judíos en la Europa de los últimos siglos! así que un chiste más no hace daño a nadie. Cuántos chistes hacen referencia a los gitanos y sus fragonetas y las risas que provocan. No importa que los estereotipos sean tan fuertes como hace décadas. Es humor negro. Podríamos reírnos de las violadas y de las maltratadas. Es solo humor negro. De los desahuciados, de los discapacitados, de los homosexuales. Humor, solo humor negro y cruel. Qué sería de nuestra vida sin una sonrisa, sin poder reírnos de la estupidez de los negros con nuestros amigos mientras nos bebemos una cerveza. No nos mires mal. Solo es humor negro, insensible y cruel.
¡Qué disyuntiva! Callarse para no seguir el juego sucio de la derecha cavernaria o criticar una frase desafortunada y estúpida. Mirar hacia otro lado o meter el dedo en la llaga. Parece que no hay término medio. Parece que no se puede denunciar y visibilizar la estrategia de la derecha y criticar al concejal. ¡Cuidado! no sigas el juego a la derecha. Además tenemos un argumento irresistible. Difunde y comparte y, sobre todo ¡viva el humor!
Notas:
– Zapata renuncia a ser concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Madrid
– Viva Zapata
* El Kaleidoskopio
Investigadas exhaustivamente ya las chorradas que tod@s decimos en la cuenta twitter, ¿se van a investigar las cuentas de Suiza? O esas “cuentas” nos son interesantes
La renuncia de Guillermo Zapata a la Concejalía de Cultura, además de honrarle por sus explicaciones, disculpas y rápida decisión, ha aumentado la credibilidad de Manuela Carmena quien, de paso, ha dado una gran lección a Esperanza Aguirre y demás dirigentes del PP, conspiranoicos y negacionistas de los atentados islamistas del 11-M. Un negacionismo y conspiracionismo que causó y sigue causando dolor y sufrimiento a víctimas del terrorismo yihadista del 11-M, sin que por ello Esperanza Aguirre haya pedido la menor de las disculpas ni presentado la dimisión de sus cargos. La autoridad moral ejercida por Manuela Carmena obligará a Esperanza Aguirre y demás dirigentes del PP a pronunciarse cada vez que desde las filas de su Partido Popular se denigre a víctimas del terrorismo islamista del 11-M. Esperanza Aguirre y demás dirigentes del Partido Popular seguramente hubiesen preferido que Zapata hubiese seguido en la Concejalía de Cultura para así poder bombardear día y noche el proyecto de cambio de Manuela Carmena, pero con la acertada decisión de Carmela, Zapata ya no servirá de excusa a Esperanza Aguirre y demás dirigentes del PP para continuar su negacionismo conspiranoico de los atentados islamistas del 11-M ni para que desde sus filas viertan tratos vejatorios contra víctimas del terrorismo del 11-M ni otras barbaridades de diferente índole como las que hasta ahora han venido difundiendo. Para terminar les recuerdo mi escrito La conspiranoica Esperanza Aguirre se postula para la Alcaldía de Madrid de diciembre del año pasado.
Un saludo,