25-N: de un acto de terrorismo de Estado a símbolo de la violencia contra la mujer
Tania Gálvez San José*. LQSomos. Noviembre 2017
“Se arriesga la vida sin pensar en posibles beneficios personales,
ya que el principal motivo por el cual luchamos
es la anulación completa de los privilegios“.
María Teresa Mirabal
1. Historia de un asesinato político con forma de “accidente”
El origen histórico del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer está marcado por el asesinato político de tres mujeres y un hombre en República Dominicana el 25 de noviembre de 1960. Ellas eran las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal y el hombre, olvidado por la Historia, se llamaba Rufino de la Cruz. Tanto ellas como él eran activistas políticos contra la dictadura de Trujillo y formaban parte del “Movimiento Revolucionario 14 de junio”. Ellas eran hijas de un rico hacendado y él era campesino y transportista. Tanto ellas como él tenían hijos pequeños en el momento de su muerte violenta. Las cuatro víctimas fueron torturadas y después lanzadas en el vehículo con el que viajaban por un precipicio para que pareciera un accidente.
El ideólogo y autor intelectual del cuádruple asesinato fue el tirano Rafael Leónidas Trujillo. Ellas, que en ningún momento hay constancia de que sufrieran violencia o agresiones por parte de sus parejas masculinas, volvían precisamente de visitarlos a la cárcel, donde estaban presos por delitos políticos contra el Régimen. Ir a visitarlos era a la vez un valiente acto de amor y de disidencia contra la dictadura, ya que sabían que estaban en el punto de mira de Trujillo.
El resto de autores operativos no fueron “hombres” en abstracto. Eran militares a las órdenes del dictador. Por orden jerárquico:
– General Pupo Román, Capitán de Corbeta de la Marina de Guerra Mayor
– Cándido Torres Tejada y Johnny Abbes
– Teniente Víctor Alicinio Peña Rivera.
Los autores materiales del crimen fueron cinco miembros del Servicio de Inteligencia Militar:
– El cabo de la Policía Nacional Ciriaco de La Rosa, asesino de Patria Mirabal.
– Ramón Emilio Rojas Lora, asesino de María Teresa Mirabal.
– Alfonso Cruz Valerio, asesino de Minerva.
– Emilio Estrada Malleta, asesino de Rufino de la Cruz.
– Néstor Antonio Pérez Terrero.
La crueldad y del sadismo de Abbes García eran legendarios. Por órdenes suyas fueron torturados y asesinados muchos de los disidentes que fueron encarcelados por los Servicios de Inteligencia dominicanos, principalmente los miembros del Movimiento Clandestino 14 de Junio, apresados en una redada nacional en enero de 1960. Durante los últimos tres años de la dictadura, Johnny Abbes era la persona que más influía sobre Trujillo y el que mejor armonizó con los perversos sentimientos del dictador.”
2. Sobre el sexo/género de los asesinos
En la República Dominicana se implantó el ultramachista código civil napoleónico (1804) en el año 1845. Los asesinos militares eran todos hombres al servicio de otro hombre poderoso. ¿Por qué todos hombres? ¿Por qué no había “asesinas” en el Servicio de Inteligencia Militar? ¿Por qué en lugar de un Rafael Trujillo no había una Rafaela Trujillo? Muy sencillo. El Ejército y el servicio militar obligatorio en República Dominicana no se componían de ninguna mujer en esa época. Las fuerzas armadas seleccionaban, admitían, secuestraban u obligaba a formar parte, como queramos verlo, a hombres. Siempre hombres. Solamente hombres. La primera mujer en ingresar en una institución militar dominicana fue María Isabel Mercedes, hoy capitán retirada, en 1985. El principal motivo de incorporar a las mujeres, según este artículo de la revista Nueva Sociedad, fue dar “una respuesta a la necesidad de ganar legitimidad”, ya que “los militares deben fortalecer su imagen tras una historia de gobiernos autoritarios”. De nuevo, se nos utiliza a las mujeres para legitimar lo ilegitimable. Esto es otra forma de cosificación, esta vez como mujer-objeto legitimador.
La Ley 1520 del año 1947, durante el segundo mandato de Trujillo, fue la que estableció una de las disposiciones más odiadas por la población, la del servicio militar obligatorio para los varones (recordemos que en España también son históricas las revueltas contra “las quintas” del s.XIX y todo el movimiento de insumisión a finales del s.XX). No ha sido hasta el año 2009 cuando por fin se explicita en sus leyes que es un deber, para hombres y mujeres, prestar los servicios militares que la Patria requiera. El servicio militar ahora es voluntario para hombres y mujeres pero ya hay candidatos presidenciales que lo quieren hacer obligatorio como con Trujillo:
“De acuerdo a lo estipulado en la ley 548 del artículo 13 que dice lo siguiente: Todo varón dominicano está obligado a definir situación militar a partir de la fecha en que cumpla su mayoría de edad, a excepción de los estudiantes de bachillerato, quienes definirán cuando obtengan su título de bachiller.”
Es decir, de haber una dictadura en el futuro en cualquier país en el que hay mujeres soldado habrá mujeres militares al servicio del dictador o dictadora de turno para cumplir los trabajos que encarguen sus superiores, como en el ejemplo del crimen que nos ocupa.
3. Cronología: del crimen político-militar al Día Internacional proclamado por la ONU
a) Año 1949, fiesta de la alta sociedad en el Hotel Montaña de Jarabacoa en 1949. Trujillo intenta ligar con Minerva Mirabal durante el baile. Minerva no le sigue el juego y además le dice que deje en paz al comunista Pericles Franco, lo que desata las iras de Trujillo contra ella, su familia y su entorno. Es decir, que una mujer mostrase solidaridad con un hombre disidente, fue el comienzo del acoso del dictador.
b) Entre 1959 y 1960 Minerva Mirabal y su marido Manuel Aurelio Tavárez Justo fundan el Movimiento Revolucionario 14 de Junio, “con el objetivo de liberar al pueblo dominicano de la dictadura, instaurada en el año de 1930 por Rafael Leónidas Trujillo Molina. Iniciada la lucha clandestina, el movimiento fue infiltrado y delatado. Manolo y cientos de hombres y mujeres que integraban el movimiento clandestino 14 de Junio fueron encarcelados, torturados y asesinados por la dictadura. Encontrándose en la cárcel, su esposa Minerva Mirabal fue asesinada, junto a sus hermanas Patria y María Teresa, por órdenes de Trujillo en noviembre de 1960.”
c) El 25 de noviembre de 1960 se produce el asesinato político de Patria, Minerva, María Teresa y Rufino en República Dominicana. Volvían de visitar a sus maridos en la cárcel:
d) El 21 de noviembre de 1963 es fusilado el marido de Minerva, Manolo Tavárez Justo, después de haberse levantado en armas junto a otros activistas.
e) En julio de 1981, en el marco del Primer Encuentro Feminista de Latinoamérica y el Caribe celebrado en Bogotá, nos cuenta la historiadora Marysa Navarro:
“El encuentro empezó con presentaciones de las distintas delegaciones (aparte de la colombiana, la más numerosa era la de República Dominicana, 16 personas) y con informes sobre el movimiento feminista en cada uno de los países representados.” (…) “Además, la propuesta de organizar actos en toda América Latina contra la violencia que sufre la mujer se concretó en la decisión de declarar el 25 de noviembre el Día Internacional de la NO Violencia contra la Mujer. Esa fecha fue adoptada en memoria de tres mujeres dominicanas, Minerva, Patria y María Teresa Mirabal, asesinadas en 1960 durante la dictadura de Rafael Trujillo.”
Según el artículo “El día de no más”:
El Día Internacional No Más Violencia Contra las Mujeres, que todos los años da origen a diversas acciones públicas, fue creado durante el Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe, realizado en julio de 1981 en Bogotá, Colombia. Sus promotoras recuerdan este hecho.
Ellas son las dominicanas Magali Pineda y Ángela Hernández que casi al finalizar la plenaria del Encuentro, pidieron declarar el 25 de noviembre, como el “Día Internacional de No Más Violencia Contra las Mujeres”, en memoria de tres valientes mujeres dominicanas, Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, asesinadas por la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, en 1960. De las dos, Magali era ya en aquellos años una conocida activista política que durante su etapa universitaria se unió al movimiento de resistencia contra la dictadura de Trujillo. En el decenio de 1970 representaba la avanzada de un incipiente discurso feminista, afincado en el Centro de Investigación para la Acción Femenina (CIPAF)* del que fue su creadora.
Al regreso del Encuentro, Magali propuso un espacio de coordinación nacional para realizar la primera actividad pública del 25 de noviembre en República Dominicana. “Fue muy interesante porque al llegar aquí, mucha gente no quería que se hablara sobre el tema de violencia contra la mujer. Había mucho temor. Entonces se hizo una semana de denuncia, pero incorporando también violencia en el trabajo, violencia social, y se dedicó un día a la violencia sexual y otro día a la violencia doméstica” Posteriormente, una diputada, Gladys Gutiérrez, presentó la propuesta de darle carácter oficial al 25 de noviembre. Su propuesta fue aprobada por la Cámara de Diputados.”
Como vemos, es la primera vez que se borra de la Historia el hecho importante y clave de que hubo un hombre militante también asesinado, Rufino de la Cruz, un compañero de lucha de las hermanas Mirabal. Esta omisión es fundamental. Además se transforma un acto de terrorismo de Estado en símbolo de violencia contra la mujer por el mero hecho de serlo. Esta tergiversación también es muy significativa.
f) En 1993 la ONU asume en la “Declaración sobre la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer” que no contempla de ningún modo la violencia mujer-mujer (de la mujer-hombre ya ni hablamos…) como algo posible o dañino para las mujeres pero sí contempla sorprendentemente la violencia ejercida por el Estado, que puede estar dirigido, como sabemos, por personas de ambos sexos. Estas son otras dos grandes contradicciones y omisiones, como paso a analizar a continuación:
“Reconociendo que la violencia contra la mujer constituye una manifestación de relaciones de poder históricamente desiguales entre el hombre y la mujer, que han conducido a la dominación de la mujer y a la discriminación en su contra por parte del hombre e impedido el adelanto pleno de la mujer, y que la violencia contra la mujer es uno de los mecanismos sociales fundamentales por los que se fuerza a la mujer a una situación de subordinación respecto del hombre”.
A este respecto podríamos preguntarnos: ¿Si me maltrata o mutila una mujer ginecóloga o comadrona en mi parto o posparto es porque estoy en una situación de subordinación respecto del hombre y estoy dominada por él? No. Estoy en una situación de subordinación respecto a esa mujer con poder institucional y autoridad médica sobre mí en un momento vulnerable, debido a todos los adoctrinamientos institucionales y familiares que cargo en mi mochila biográfica. Cada persona tiene que hacerse responsable de SUS propias acciones a pesar de las “estructuras” o los “sistemas”. ¿Alguien se imagina que esto se usara como argumento para la defensa de una acusada de violencia obstétrica contra una mujer? La definición de “violencia contra la mujer” es parcial y está mal planteada. Es imposible luchar contra algo que está mal definido.
Por ejemplo, quizás lo entendamos mejor si comprendemos que la violencia obstétrico-pediátrica hacia mujeres y bebés de ambos sexos tiene su origen concreto en nuestro país en los planes de estudios universitarios y en los hospitales tecnólatras creados por Franco. Estos hospitales se inspiraron en el futurismo fascista italiano y sus protocolos eran dirigidos en última instancia por militares. Las modas obstétrico-pediátricas como la de los “nidos”, la separación madre-bebé, el excesivo intervencionismo eran modas importadas desde los centros de poder, donde se creaban las investigaciones más “punteras”. Su diseminación por el mundo sigue el rumbo del imperialismo y tiene como objeto el control absoluto de la Vida en el sentido más amplio posible. Este tema está más desarrollado en este post. Pensar que el Estado, que por Naturaleza es maquiavélico y solamente vela por los intereses de las oligarquías, ya sean de izquierdas o de derechas, nos va a salvar de sí mismo es todo un acto de fe.
La definición de “violencia contra la mujer” del Artículo 1 afirma, teniendo en cuenta el sexo de la víctima pero no el del posible agresor o agresora, que es:
“Todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga, o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para las mujeres, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se produce en la vida pública o privada”.
Como bien explica después el Artículo 2, estas violencias incluyen ámbitos en los que pueden ser ejercidas por mujeres agresoras, como la familia, la realización de la ablación u otras prácticas, la vida pública, el trabajo, las instituciones escolares u otros lugares (podríamos meter aquí la violencia obstétrica realizada por matronas o ginecólogas, por ejemplo) y, por último la perpetrada por el Estado. Como en todos estos ámbitos hay mujeres profesoras, matronas, madres, abuelas, jefas, empresarias, políticas, que pueden ser agresivas o violentas contra las mujeres sería lógico que se entendiera que la violencia que sufren las mujeres puede venir tanto de hombres como de mujeres, como de hecho sucede en la vida real. Es más, la mutilación genital femenina es realizada de forma abrumadora por mujeres. Sin embargo, esto se omite de forma deliberada. Quien oculta y tergiversa es cómplice de la violencia.
g) En diciembre de 1999, a propuesta del Estado de República Dominicana y con el apoyo de 60 países se aprueba en la Asamblea General de las Naciones Unidas que se conmemore cada año el Día Internacional de la No Violencia Contra la Mujer, “En honor a estas tres valientes hermanas asesinadas a garrotazos, que se habían convertido en auténticas heroínas de la lucha clandestina anti trujillista”. Gladys Gutiérrez, fundadora de la Secretaría de la Mujer del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y Secretaria de Estado de la Mujer fue también la promotora de que se aprobara en Naciones Unidas este Día.
De nuevo se olvida (y el olvido es un segundo asesinato) al hombre que fue asesinado con ellas, Rufino de la Cruz. Como explica la web de la ONU:
Es en 1999 cuando la ONU une dos caminos que confluyen de forma bastante forzada. Por un lado, su definición parcial de la violencia contra la mujer y la separación de las violencias que sufren las mujeres de las que sufren los hombres (quedan separadas para que no comprendamos todo lo que las conecta e interrelaciona y evitar la mutua solidaridad). Por otro lado, une el asesinato político de las hermanas Mirabal y Rufino de la Cruz con la idea de “la violencia contra la mujer” por el mero hecho de ser mujer. Y, para ello, había que hacer desaparecer a nivel histórico y mitológico, a su compañero de lucha Rufino de la Cruz y todo lo que simbolizaba.
h) 29 de diciembre de 2004: se publica en el BOE la Ley Orgánica 1/2004 de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género que tiene como objeto (olvidando el resto de violencias):
“1. La presente Ley tiene por objeto actuar contra la violencia que, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia.”
i) 7 de noviembre de 2015 en Madrid se convoca una manifestación en la que se pide, en su manifiesto, que se amplíe esta Ley al resto de violencias de hombres contra mujeres que se producen fuera de la pareja: “Que se desarrolle e implemente el Convenio de Estambul y el cumplimiento de las recomendaciones de la CEDAW, y se reforme la ley 1/2004 para que estén reflejadas todas las formas de violencia contra las mujeres.” Esta normativa, recordemos, es sexista y contraria a la igualdad entre hombres y mujeres ante la ley. Plantea privilegios legales para las mujeres y por este motivo debería ser rechazada como machista. Y, lo más importante, no funciona para solucionar el objetivo planteado.
Ante estas tergiversaciones de la Historia, ante la segregación que se impone entre los mundos de las mujeres y los hombres desde las instituciones y la ONU (los Estados del mundo), ante el concepto parcial de violencia que se propone podemos afirmar que:
– La violencia de ciertas mujeres hacia otras mujeres es una realidad, tan real como que existe la violencia de ciertos hombres hacia ciertas mujeres. Si una es estructural la otra también lo es. Si una no es estructural tampoco lo será la otra. Cualquier sistema es sostenido por hombres y por mujeres. El funcionamiento del patriarcado no puede ser comprendido sin analizar el papel de las mujeres y madres patriarcales.
– Las hermanas Mirabal (y Rufino de la Cruz) no fueron asesinadas por el mero hecho de ser mujeres sino por oponerse al Estado dirigido por Trujillo. Lo hicieron por sí mismas y junto a muchos hombres, también asesinados y torturados. Afirmar que las mataron por ser mujeres es deslegitimar su lucha política y su activismo. ¿Será eso lo que en última instancia pretenden los estados que conforman la ONU y el feminismo institucional? ¿Que las mujeres pensemos que no somos nada más que nuestro sexo? ¿Que no podemos pensar por nosotras mismas y luchar por lo que creemos porque siempre seguiremos siendo simples “mujeres” y todo lo que nos pase será por esa única condición?
– No es el dinero del Estado ni sus instituciones los que acabarán con la discriminación de la mujer creada por años de legislaciones patriarcales y adoctrinamientos educativos, como la educación para niñas fomentada por Carlos III y las precursoras del feminismo de la “Junta de Damas” cuyo único propósito era el de crear seres humanos que sirvieran mejor al Estado y sus incipientes empresas capitalistas. No es, por tanto, al Estado al que tenemos que pedir que se haga cargo de las violencias contra las mujeres. Tan sólo podemos pedirle que deje de fomentarla desde la injusticia y la desigualdad jurídica.
– Lo más grave del asunto es presentar una lucha conjunta de hombres y mujeres unidos contra un dictador patriarcal como un símbolo de la violencia de género, como pasamos a analizar a continuación.
4. De violencia de Estado a violencia de los hombres contra las mujeres
Minerva Mirabal se enfrentó a Trujillo por defender a un hombre (Pericles Franco), se casó con un hombre con el que cofundó el movimiento “14 de junio” (Manolo) y fue asesinada junto a otro hombre cuando volvía de visitar a su marido a la cárcel (Rufino).
¿Dónde está la conexión entre unos asesinatos políticos de Estado y la “cultura de discriminación e inequidad histórica” del hombre contra la mujer? A ellas las mataron porque no hicieron discriminación por ser mujeres, como si tuvieron el “detalle” de no matarlas el día que iban sus hijos en el coche, por ejemplo. Ellas eran luchadoras anti trujillistas que contaban en el momento de su muerte con cerca de una década de activismo político. Al silenciar su actividad de resistencia a Trujillo las estamos victimizando y ocultando su valentía. No fueron víctimas de género, es más, pudieron estudiar una carrera universitaria dada su pertenencia a la alta sociedad, lo que Rufino de la Cruz no pudo hacer ni remotamente.
El propio régimen de Trujillo concedió el voto a la mujer en 1942:
Además, las hermanas Mirabal, por su clase social, no se veían afectadas por la legislación machista y patriarcal napoleónica:
5. Implicaciones políticas
El presidente de República Dominicana en 1999, cuando se presenta a la ONU la propuesta de celebrar el Día Internacional de la No Violencia Contra la Mujer en honor a las hermanas Mirabal, era Leonel Fernández. La etiqueta ideológica oficial de su partido, el PLD, es la de “progresista” o de “centroizquierda” y tiene simpatías mutuas con el PSOE.
Es decir, por si alguien se había perdido, la propuesta de fecha a la ONU, que tiene su origen en el encuentro feminista de 1981 es llevada a la ONU para su internacionalización en 1999 por un gobierno de “centro-izquierda” que, ahora sabemos, lleva años endeudando al país e hipotecando su futuro al FMI:
“Ciertamente ha resultado muy difícil dar a conocer la verdad. Se ha necesitado de un intenso y prolongado proceso de denuncias y de hechos que han permitido apreciar su certeza, para que en el exterior se capte la esencia neoliberal y corrupta del Gobierno de Leonel Fernández.
Esta dificultad tiene su razón en la gran capacidad de simulación y habilidad de del presidente Fernández para convertir sus maniobras en recursos mediáticos impactantes, desplegando y reciclando constantemente sus dotes de comunicador y simulador experimentado.”
El feminismo convierte a nivel simbólico la resistencia política de las hermanas Mirabal en una exclusiva cuestión “de género” (y los medios de comunicación lo siguen haciendo hasta ahora, como en este ejemplo) y el PLD hace que la tergiversación se haga mundial a través de Naciones Unidas y de arriba hacia abajo, en una estructura jerárquica de adoctrinamiento estatal. Además de crear en 2010 el “Ministerio de la Mujer” dirigido por Alejandrina Germán, una mujer acusada por una periodista de construirse una lujosa mansión en Jarabacoa y tener unos gastos que sobrepasan su salario como funcionaria del Estado.
Y hasta aquí esta parte del análisis de lo que fue vendido por Trujillo como un “trágico accidente” y lo que es vendido ahora por el feminismo (si existe algún grupo feminista que esté denunciando esto que hable o calle para siempre) y los Estados del mundo como un emblema de la victimización por el mero hecho de ser mujer. Y no es que las mujeres no suframos violencia por parte de algunos o muchos hombres, que la sufrimos y muchísimas mujeres han sido y siguen siendo asesinadas. Es que a lo largo de nuestra vida la violencia viene de múltiples lugares y formas, muchas veces interconectadas. La violencia que sufrimos tiene que ser importante para los hombres, así como las violencias que sufren los hombres también deberían ser importantes para nosotras, sin entrar en guerras de cifras cuantitativas.
6. Vamos a hablar de patriarcado, machismo y feminismo
Trujillo era un “buen” militar criado en un país regido por el código civil napoleónico y machista. Por eso, en una de esas fiestas que celebraba la alta sociedad, invitó a bailar a Minerva para “galantearla” y, según cuentan los biógrafos, se encontró con una chica rica rebelde que se negaba a someterse tanto al Trujillo hombre como al Trujillo dictador. Él intentó ligar con ella (como ya lo había intentado en otras fiestas y a través de “celestinos”) y ella le dijo que él era un hombre casado y ella “esperaba al príncipe azul con que toda joven sueña”, tratándole como a un hombre normal y no como a un “Dios en la Tierra”, aunque utilizando el mito del amor romántico como excusa. Como cuenta William Galván en “Minerva Mirabal: Historia de una heroína”. Trujillo le contestó: “Pues te mandaré jóvenes para que te conquisten”. Y ella le respondió a Trujillo “Y si yo los conquisto a ellos”.
Después la conversación entró de lleno en el campo político y ahí sí que el dictador se puso furioso. Minerva le dijo que dejara en paz al joven comunista Pericles Franco: “También Trujillo le dijo a ella que las únicas personas que no lo querían a él eran los comunistas, que si acaso ella era comunista. Entonces Minerva le contestó: “¿qué comunista? ¡Tan comunista como usted!”
Dice el biógrafo de Minerva que desde ese momento puso a toda la familia en su punto de mira y, como buen hombre patriarcal, en lugar de encarcelarla a ella encarceló primero al padre, un rico y explotador hacendado.
La película “En el tiempo de las mariposas” protagonizada por Salma Hayek, está inspirada no en la realidad histórica sino en una novela de ficción de la escritora dominicana Julia Álvarez sobre la vida de las tres hermanas. Repito, es una novela, no tiene por qué ajustarse a la realidad (recordemos este post sobre la visión de “la Roldana” que difundía la feminista Alicia Murillo…). En ella se dice, por ejemplo, que durante ese baile, Minerva le dice que quiere estudiar en la Universidad y Trujillo le dice que a las mujeres no se les permite estudiar en la Escuela de Derecho (min.31.32). Esto es falso, ya que esta institución elitista lo que no permitía era su acceso a la gente sin los ingresos suficientes.
Sí es cierto que su padre no quería separarse de ella por sobreprotección y porque tenía miedo a que estudiara en la capital por el posible daño que podía hacerle el Dictador, dada la trayectoria que llevaba la familia. La realidad es que no tuvo ningún problema por ser mujer y matricularse para estudiar, sí los tuvo durante su segundo año de carrera porque Trujillo la boicoteó por su disidencia política y trató de impedir que pudiera matricularse si no escribía una carta de desagravio al tirano. Él buscaba su sumisión.
Minerva en ningún momento se destacó como activista de la causa feminista. Es más, la propia dictadura fue quien incorporó la demanda del voto femenino a su legislación (como aquí lo hizo la dictadura de Primo de Rivera antes que la República) y había varias mujeres en el mundo de la política dentro del régimen, como Isabel Mayer, la primera senadora de la República. Pero, como bien aclara el biógrafo de Minerva Mirabal, las feministas de Estado dominicanas en ese momento “actuaron favorecidas por la protección y los privilegios que otorgaba la causa trujillista” (el texto se amplía haciendo click sobre él):
Este punto es especialmente importante. ¿Cuál fue el papel de las feministas y las sufragistas respecto al Régimen de Trujillo? ¿No debiera el primer encuentro feminista de Latinoamérica y el Caribe haber reivindicado su figura en lugar de utilizar como símbolo a una mujer que no era feminista, que no fue asesinada por el hecho de ser mujer y que lo hizo junto a sus hermanas y Rufino de la Cruz? ¿O reniegan de la propia historia del feminismo dominicano y su apoyo a Trujillo?
Ejemplos de feministas colaboracionistas con Trujillo:
– Minerva Bernardino: representante internacional en las conferencias feministas internacionales, también en la firma de la Carta de las Naciones Unidas en 1945.
– Isabel Mayer: miembro del Partido Trujillista, primera senadora del país, por la provincia de Montecristi.
– Milady Félix de L’official: abogada constitucionalista, miembro del Partido Trujillista, sucesora de Minerva Bernardino en las conferencias feministas internacionales y primera diputada.
“La vacuidad ideológica de votar sin elección parecía irrelevante o al menos secundaria a los roles que las mujeres asumían en la “Patria Nueva”. Avances, como aquellos conseguidos por la hermana de Bernardino (aclaro: había sido nombrada profesora de Ginecología en la Universidad) abrían camino para mayores involucraciones en política incluso aunque fueran encumbradas por la dictadura. No todo el mundo lo sentía así, pero sus voces fueron calladas tanto por parte de la dictadura como por las alabanzas clamorosas de mujeres como Bernardino y Landestoy.” Tomado del libro “Poner un grano de arena”.
“La reavivación del discurso racista y anti haitiano tras la subida de Rafael Leónidas Trujillo al poder—derivado del periodo de dominación haitiana en el siglo XIX y la notable presencia de trabajadores del país vecino en la industria de la caña-llevaría a algunas de las feministas a aceptar la política racial del régimen. La conformidad con el gobierno de Trujillo probaría a ser nefasta para el movimiento feminista”. Ortiz-Loyola, Brenda. (2013). En busca de la solidaridad: feminismo y nación en el Caribe hispano, 1880-1940. UCLA: Hispanic Languages and Literatures 0426.
En noviembre de 1940 María Cristina Roque de Despradel, (2.ª de derecha a izquierda-Madre de Fidelio Despradel), entregó al entonces presidente del Senado, Porfirio Herrera, el proyecto de ley que enviara a RLTM para conceder a la mujer dominicana los Derechos Civiles. Este Proyecto de Ley estuvo basado en las propuestas que en el año de 1932 iniciara Abigail Mejía, enriquecida, posteriormente, por las juristas Milady Félix Miranda y Margarita Peynado como parte de las estrategias desde la Acción Feminista Dominicana para eliminar la desigualdad entre el hombre y la mujer.
El 14 de diciembre de 1940, se promulga la Ley Número 390 que dotó de Cédula Personal de Identidad a las mujeres mayores de 18 años. Mediante esta ley, la mujer dominicana adquirió plena capacidad ciudadana. Se modificaron 28 artículos del Código Civil, donde las mujeres aparecían con incapacidades totales o parciales. Desde entonces, la mujer puede ejercer libremente un oficio o profesión, sin necesidad de autorización de su marido, otorgar testamento y ser tutora.
Para julio del 1941, las nuevas líderes del feminismo oficialista eran: Isabel Mayer, Carmita Landestoy, Carmen Lara Fernández, Silveria Rodríguez de Demorizi, las abogadas constitucionalistas Margarita Peynado y Milady Félix de L’ Oficial. Celeste Woss y Gil y Delia Weber pasaron a un segundo plano.
Estas mujeres, llamadas “representantes del feminismo de la República Dominicana”, fueron homenajeadas con una recepción en las Cámaras Legislativas, donde reiteraron sus sentimientos de gratitud a Trujillo, por el mensaje que él dirigió a los congresistas para que reformaran la Constitución y se les reconocieran sus derechos como ciudadanas.” Tomado de Facebook de Imágenes de Nuestra Historia R.D.
Hay feministas de Estado dominicanas como Ylonka Nacidit Perdomo (poeta y ex directora del Centro de Documentación y Género de la Secretaría de Estado de la Mujer), que piensan algo así como que había un feminismo que se vendió a Trujillo y otro que se rebeló ante él. Después de leer su artículo “La vanguardia feminista y la conquista del derecho al voto” en la Revista Global nº39 prologada por el ex presidente Leonel Fernández (que es también el director de la revista) sigo sin encontrar el feminismo combativo contra Trujillo. ¿Dónde estaban?
Sí me parece rescatable de su artículo esto, que aunque ella lo aplica a Trujillo bien podría aplicarse a la realidad actual (obviamente ella trabaja y dirige las políticas estatales actuales hacia la mujer y no puede acusarse a sí misma):
“El ejercicio del derecho al voto de la mujer, en 1942, significó a nuestro modo de ver, la gestación y aceptación de una “ciudadanía” femenina basada en la responsabilidad histórica de obedecer el orden del Estado capitalista, lo cual entonces significaba abandonarse al Estado por medio de la obligatoriedad de respetar la política de coerción y de retribuir al tirano con el “cumplimiento” de las leyes y de la Constitución, por parte de la mujer elevada a la categoría de ciudadana.”
7. Clase social.
Como bien explica William Galván, biógrafo de Minerva Mirabal, ésta no era una activista revolucionaria por los derechos de los trabajadores y campesinos. Era una “luchadora política liberal, democrática moderada”, que tampoco se veía discriminada como mujer, ya que era la principal socia comercial del hacendado “Don Enrique”, su padre. El conflicto que tenía la familia Mirabal con Trujillo era un conflicto intraclase:
“Esta participación de Don Enrique y Minerva en el sistema de producción y comercialización de productos le permitieron amasar una fortuna que para entonces era estimada en unos RD$400,000.00 (Cuatrocientos mil pesos).” (…) “Tenían algunos bienes tan importantes como eran una factoría de café, otra de arroz, almacenes de productos agrícolas, crianzas de cerdo, fincas agropecuarias los cuales eran administrados por más de veinte empleados. Estos trabajaban también en las actividades comerciales relacionadas con la comercialización de los más importantes productos agropecuarios de la región; así como con productos importados y procedentes de otros lugares del país.” Tomado de “Minerva Mirabal: Historia de una heroína”.
8. Algunas conclusiones posibles:
El origen actual del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer está marcado por el feminismo y su reinterpretación del crimen político de las hermanas Mirabal y Rufino de la Cruz. También está marcado por la internacionalización que le otorga el gobierno de Leonel Fernández a través de la ONU y la previa resignificación y parcialidad del concepto de “violencia contra la mujer” (escindiendo de forma irreconciliable el mundo de las mujeres del de los hombres y viceversa).
Con el símbolo de las hermanas Mirabal y el olvido de Rufino de la Cruz el feminismo manipula un asesinato político y divide la resistencia a las tiranías en las que luchan hombres y mujeres juntos. Es más, en muchas ocasiones eran más los hombres los que se jugaron la vida contra estos tiranos y murieron en mayor número que nosotras. También esto es patriarcado. Peor aún, muchas de las personas que decían luchar por los derechos igualitarios de las mujeres colaboraron con las tiranías o se hicieron tiranas ellas mismas, como en el caso del feminismo dominicano. ¿Qué responsabilidad tiene las feministas en el poder junto a Trujillo en el asesinato de las hermanas Mirabal y Rufino de la Cruz?
Con la intervención de los Estados de la ONU y la política de los días internacionales temáticos (hay también un día de la televisión y otro para el retrete) se consigue dividir a la población y adoctrinar de forma machacona en todos los medios de comunicación, haciendo que el pensamiento libre sea imposible. El feminismo actual, en convocatorias como la del 7-N sigue en esa misma dirección, manifestando como objetivo prioritario el aumento de los recursos económicos destinados a, en teoría, acabar con la violencia que sufren las mujeres y la ampliación de la Ley de Violencia de Género. ¿Cómo es posible que hayamos llegado a un punto en el que el debate sobre la violencia contra las mujeres haya sido reducido a un mero asunto de dinero (presupuestos generales del Estado, subvenciones…) y represión estatal (más policía, más juzgados especializados, más asignaturas, más adoctrinamiento para los funcionarios, más tecnología “liberadora”, más brazaletes electrónicos, más aplicaciones de Telefónica “Libres”…)?
Yo no considero que deba existir un día de la “Eliminación de la Violencia contra la Mujer” ni un “Día del niño” o un “Día del Hombre” sino un gran debate social sobre las causas profundas y últimas de esas violencias, de todas y cada una de ellas, de las ejercidas por hombres y por mujeres, de las sufridas por hombres y por mujeres de toda condición. Esa investigación y esas preguntas deben ser planteadas y tratar de ser respondidas por la gente común. Es posible que estemos de acuerdo en parte del diagnóstico pero no lo estemos en las soluciones o las causas. Seamos radicales y vayamos al origen. Desenmascaremos estas mentiras oficiales.
El origen del “25 de noviembre” es una tergiversación, una manipulación. Es el “divide et impera” del que habla Prado Esteban Diezma. Es un olvido que mata doblemente. Es el ocultamiento de las vergüenzas del feminismo durante el régimen de Trujillo. Es la legitimidad de un gobierno como el de Leonel Fernández y su deuda. Es el adoctrinamiento de la ONU. Es ingenuidad. Es impedir que los problemas de los hombres sean los problemas de las mujeres y viceversa. Es el control y vigilancia total de la vida. Es el triunfo del patriarcado. La eterna lucha del bien contra el mal, la verdad frente a la mentira, la justicia contra la injusticia no tiene género, color ni edad.
9. Algunos ejemplos de cómo se ha incorporado el 25-N como símbolo al discurso:
Sin embargo, el verdadero motivo del acoso inicial a Minerva fue su defensa de un comunista, como bien explica su biógrafo y por esta razón encerró a su padre, a su madre, a ella misma e incluso a algunas amigas con el pretexto de investigar sobre la relación de Minerva con miembros del Partido Socialista Popular y Pericles Franco. El motivo de su asesinato en 1960 no fue que 11 años antes no quisiera tener relaciones sexuales con él sino su insumisión política, su atrevimiento al hablarle de igual a igual, defender a un disidente político y su posterior militancia anti trujillista.
– “25 de noviembre, solemnidad, la clase política durante cinco minutos sale a la calle. Las instituciones realizan un llamamiento a la sociedad para conmemorar el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres. Promueven la imagen de una sociedad cohesionada, unida bajo un objetivo común e instan a la comunidad a que, durante cinco minutos, muestre su rechazo a la violencia machista. Cinco minutos simbólicos. Para nosotras cinco minutos de hipocresía, que dicen mucho”. (…) “No quieren destinar recursos económicos, los presupuestos para la igualdad son irrisorios (en 2012 representaban el 0,090% de los presupuestos de Ayuntamiento de Gasteiz), en comparación con el porcentaje de población sobre el que deberían incidir (mínimo el 50%) y la gravedad de las consecuencias que padecemos. En cambio continúan transfiriendo cifras desorbitadas a las entidades bancarias y grandes intereses”.
– Los hijos de los días. Eduardo Galeano: “O sea: contra la violencia de los trujillitos que ejercen la dictadura dentro de cada casa”.
Relacionadas (fuentes externas):
– Asesinos de las hermanas Mirabal nunca cumplieron condena
– Documental sobre las feministas y sufragistas dominicanas.
– Poner Un Grano de Arena: Gender and Women’s Political Participation Under Authoritarian Rule in the Dominican Republic, 1928–1978
– En busca de la solidaridad: feminismo y nación en el Caribe hispano, 1880-1940
– El día de no más
– Entrevista a Cris Suaza, una feminista colombiana de 69 años, organizadora del Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe (EFLAC). “Los socialistas y también los otros hablaban de una expresión que es “la recuperación”. Es que tú tienes una actitud frente a tus derechos y ¿qué hace el sistema? Absorbe tu queja y tu ganancia y la coge como propia. Por ejemplo, el día de la no violencia contra las mujeres, que salió del primer encuentro (feminista), ahora es de Naciones Unidas, entonces ya perdió el carácter revolucionario, subversivo de lo que fue inicialmente; se vuelve una cosa que está en la cultura, peso sin mayor profundidad y la juventud muchas veces no sabe esto”.(…) “Le está sobrando institucionalidad, en muchos países encuentras la oficina de la mujer, la consejería, la secretaría, la no sé qué. Tal vez podría decir cosas que no deberíamos hacer como aceptar que el Estado nos absorba, nos chupe y que de ahí salgan cosas que deberían ser asumidas no solo por mujeres, porque en ese caso para mí, no son (acciones) necesariamente feministas”