Alfonso Sastre con Gabriel Celaya
El genial dramaturgo y escritor Alfonso Sastre envío estas palabras de homenaje a Celaya, para la fiesta del PCE 2011. Carta que fue leída por el coordinador de Atrapasueños , Joaquín Recio.
Celaya, recuerdo y homenaje
En pocas palabras se puede decir lo mucho que fue Gabriel Celaya. Él fue un gran poeta, sí; y definitivamente un escritor que supo sufrir y oponerse con mucha dignidad y valor a la opresión, desde el campo del comunismo, en la clandestinidad y bajo la amenaza constante de la Policía; de oponerse, digo, a la Dictadura de Franco y sus secuaces. Como escritor literario, es notable en él, entre otras cosas, que no se limitó a escribir sus poemas sino que, escribiéndolos, exploró la poesía en sus raíces teóricas, y que así pudo hacer también una obra teórica importante, como fue su libro Exploración de la poesía, que es una buena muestra de esta faceta de su trabajo.
Con su compañera Amparitxu (Coser y cantar) supo desafiar el franquismo y lo hizo, lo hicieron, tal para cual, sin miedo y sin tacha, a pesar de todos los pesares y de una censura que afortunadamente desdeñaba la lírica por su pequeña circulación, lo que permitía que los poetas pudieran “colar” al público algunas de sus obras que no hubieran sido permitidas en la novela, el teatro o el ensayo. Así pudo, con entera claridad “maldecir la poesía” de quienes no se implicaban en la lucha social y política durante aquellos años malditos.
Nunca se olvide, en fin, a quienes, como Gabriel, se mantuvieron a pie firme en la lucha revolucionaria.
Yo tuve el honor de acompañarlo -de acompañarlos a ella y a él- muchas veces en su vida y lo tengo hoy de recordar aquí y rendir homenaje a este poeta efusivo, lírico y épico, que escribía sus obras por la noche, con todas las luces de su casa y de su alma encendidas.