Alternativa

Alternativa

diana224Gabalaui*. LQSomos. Agosto 2015

Vivimos una ficción como aquella que nos decía que la Transición fue una época de consenso responsable que permitió el paso de una dictadura a una democracia. La ficción actual no es nueva sino renovada. La difunden partidos como Podemos o la propia Izquierda Unida y las iniciativas municipalistas. Es la que nos dice que el cambio se consigue ganando elecciones y estando en las instituciones. Es la que nos dice que el cambio se consigue desde dentro y para ello hay que participar en el juego cuyas reglas ya están escritas de antemano o se cambian al antojo de quienes controlan el tablero. Es la que nos habla de inteligencia colectiva, participación, transparencia y otros conceptos absolutamente atractivos e ilusionantes. Pero cuando se mira a nuestro alrededor lo que se ve es un erial, sin visos de que se vaya a construir nada nuevo. No existe un sistema alternativo más allá de ideas sueltas. No hay una oposición realista y creíble al capitalismo y por ello, más allá, de la retórica, no hay nadie que tenga una idea clara de qué hay más allá de este horror.

Somos especialistas en identificar sus errores. Sabemos diagnosticar pero no construir otra cosa. La ausencia de un antagonista al sistema, que se produjo con la caída del muro de Berlín y sus efectos, ha permitido que el capitalismo campe a sus anchas y elimine cada uno de los derechos adquiridos en los países occidentales a la sombra del comunismo. Derechos que sin alternativa no son necesarios para fidelizar al pueblo. Sin alternativa los capitalistas pueden hacer lo que quieran porque ese mismo pueblo no tiene opción. La sociedad sufre lo que los psicólogos llaman indefensión aprendida. Piensan que da igual lo que hagan porque no hay nada que hacer. El capitalismo no solo es destructivo económica y socialmente sino también psicológicamente. No solo nos convierte en desempleados o nos arrebata el techo bajo el que nos cobijamos sino que nos dice a gritos que no tenemos nada que hacer o que no hay otro camino que el que nos obligan a caminar.

Ninguna de las nuevas y viejas organizaciones políticas nos hablan de qué alternativa existe al capitalismo porque la desconocen o porque realmente creen que no existe. Sólo ideas sueltas o gestos inofensivos que sirven para ilusionar, para hacer creer que se puede reformar lo que la historia en estos dos últimos siglos ha demostrado que es irreformable. No somos los primeros que hemos creído que un cambio real es posible. Aún así algunos siguen pensando y defendiendo que el miedo ha cambiado de lado. Es duro asumir que la opción que tenemos es limar -aparentemente- las aristas del sistema. Nuestra opción se limita a elegir entre partidos que nos venden un producto que, según su atractivo, nos induce a introducir una papeleta en una urna que devora cada uno de nuestros deseos de cambio. Sin alternativa real, los partidos venden humo. Venden cosas atractivas con nombres ilusionantes. Nos las cuentan y nos las explican y nos hacen soñar pero solo es nada.

Algunos de los vendedores son honestos y creen, realmente, que lo que explican es el principio de algo nuevo, pero su producto es solo uno más. Vivimos en el mundo de las marcas, de los logos, de los productos y de la venta. Y no, no hay alternativa que nos libere de estas ataduras. Si hay un objetivo imprescindible es el de crear una que permita confrontar al sistema que más daño ha provocado a las personas, a las comunidades, a los pueblos y al mundo. Por ahora apuntamos más bajo. El reto nacional ya lo hemos afrontado en otras ocasiones: sacar al Partido Popular del gobierno del Estado.

Después seguiremos igual de esclavos.

* El Kaleidoskopio

LQSomos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Nos obligan a molestarte con las "galletitas informáticas". Si continuas utilizando este sitio aceptas el uso de cookies. más información

Los ajustes de cookies de esta web están configurados para "permitir cookies" y así ofrecerte la mejor experiencia de navegación posible. Si sigues utilizando esta web sin cambiar tus ajustes de cookies o haces clic en "Aceptar" estarás dando tu consentimiento a esto.

Cerrar