Canarias. Límites
“España limita al Norte con el Mar Cantábrico y con los Montes Pirineos que la separan de Francia; al Este con el Mar Mediterráneo; al Sur con este mismo mar; y al Oeste con Portugal y Océano Atlántico”. Eso nos contaban y nos hacían cantar en las escuelas no hace tantos años. En esta estúpida explicación ya se ignoraba, entre otras colonias, a Ceuta, Melilla y, cómo no, a CANARIAS. Hablemos de límites:
CANARIAS limita al Norte con agua; al Este con agua; al Sur con agua y al Oeste con más agua.
España limita al Norte con pesca, agricultura, ganadería e industrias; al Este con más pesca, “Terras Míticas” e islas “Re-aleares”; al Sur con los bancos pesqueros marroquíes y saharianos y turismo macro-mafioso; al Oeste con caciques, terratenientes y planes de empleo rural.
CANARIAS limita al Norte con agricultura abandonada, con pesca casi inexistente y recalificaciones rurales; al Este y sureste con nula ganadería, diezmada agricultura, tomateras abandonadas y recalificadas y con “cayucos” repletos de carne morena y despreciada; al Sur con turismo selectivo y adinerado, mafias locales, empleo inmigrante esclavista, con urbanizaciones residenciales de “alto standing” y con miserable superpoblación aculturizada; al Oeste limita con pésimas infraestructuras viales, economía sumergida, bellos parajes “recalificables” y plátanos moribundos.
España limita al Norte con mayor tasa de empleo, mejores salarios y óptimos servicios públicos; al Este con un aceptable nivel de vida y desarrollo; al Sur con emergentes programas de viviendas sociales subvencionadas; al Oeste con suficientes fondos de la UE. e importantes apoyos en ganadería.
CANARIAS limita al Norte con una España indiferente a sus necesidades; al Este con el olvido y la prepotencia de esa España; al Sur con la descarada corrupción pro española y al Oeste con la especulación, desidia y destrucción del entorno.
Mientras todo esto que comentamos es tan real que produce vergüenza leerlo, en estas fechas a los canarios nos piden el voto aquellos que siempre nos “botaron”. Nos lanzan sonrisas sardónicas aquellos que siempre nos despreciaron. Nos prometen vida digna y sacarnos de la miseria aquellos que nos enfangaron de miseria, nos olvidaron, insultaron, humillaron y pisotearon.
Ahora nos ofrecen “motivos para creer” desde el PSOE (Partido Socialista Obrero Español). Creer en qué? ¿En seguir poniendo a Canarias como la última de la lista en cuanto a bienestar social y la primera en cuanto a paro, carestía de la vida, servicios sociales, etc.?
También nos piden el voto desde el culto a la personalidad, para un individuo gris cuyo único mérito ha sido torpedear a la verdadera izquierda: “Llamazar es + izquierda” en IU (Izquierda Unida). Es decir para aquellos que siempre mamaron del poder establecido, se aliaron con los gobiernos colonialistas y convirtieron el concepto “socialismo” en una palabra vacía de contenido (no sabemos si este lema de campaña se refiere a una página web o a que el tal Llamazares es una cruz para la izquierda).
“Para que cuentes en Madrid”, nos cantan desde CCN (Centro Canario Nacionalista). Qué debemos contar en Madrid? ¿Nuestras penas? ¿Pedimos que nos hagan caso en la metrópoli y nos den más sobras podridas en vez de conquistar nosotros nuestros derechos como pueblo histórico? ¿Debemos contar que han destruido nuestra pesca, agricultura y ganadería; que han robado nuestras aguas, que han eclipsado nuestra cultura, que han esquilmado nuestros bellos barrancos “alicatándolos hasta el techo” con apartamentos, chales y campos de golf dirigidos a un turismo adinerado que desprecia al pueblo canario?
Nos piden que “hablemos en canario” desde CC y PIL (Coalición Canaria y Partido Independiente de Lanzarote; si, ese PIL cuyo máximo dirigente ya conoció las mieles de la cárcel por… ¿defender a Canarias?). ¿Qué nos piden en concreto? ¿Qué digamos,“ños” que jodido está el trabajo; “chacho”, que no llego a fin de mes; que “arretranco” de gobierno regional; que “machangada” de partido hizo la U.D. Las Palmas… No piden que luche el pueblo canario, que se enfrente a la metrópoli y a los políticos godo-canarios que la sirven.
En el fondo, todo esto es así por culpa de esta clase política canaria “acanarizada”, vendida al doblón de oro de Madrid. Es así porque el pueblo canario de a pie ha preferido la migaja de pan, a luchar por la conquista de la semilla del trigo. Es así porque nos han maniatado al sillón del conformismo y la resignación arrancándonos una reverencia sumisa y servil.
Sufrimos más de 500 años de sometimiento y colonización y aún no somos capaces de morder la mano de quien nos golpea. Vuelvo a recordar al admirado Carlos Cano cuando cantaba: “… si en vez de ser pajaritos/ fuéramos tigres bengala/ a ver quien sería el guapito/ de meternos en una jaula…”
Mientras morimos en la desidia y escuchamos las gloriosas trompetas electorales prometiéndonos lo que a lo largo de esos 500 años siempre nos negaron, seguiremos conformándonos con la destrucción de nuestras riquezas naturales en pro del ladrillazo y la especulación, del robo a manos llenas por parte de empresarios y políticos acunados en los brazos de la RIC (Reserva de Inversiones en Canarias), por ejemplo. Mientras esas trompetas nos rompan los tímpanos, seguiremos consintiendo la marginación de nuestras raíces culturales (¿en qué Instituto, Escuela o Universidad se imparte cultura e historia canaria?) y de identidad como pueblo y nación.
Si, evidentemente existen límites; los geográficos, los políticos, los sociales, los culturales, los económicos. Los límites que nos imponen y a los que tan ilimitadamente nos resignamos.
Y aprovechando que los canarios miramos hacia otro lado para anestesiar la indiferencia por lo nuestro, viene a cuento decir, brevemente y como ejemplo, lo que tenemos o merecemos en materia de sanidad. Seguro que es un ejemplo tonto pero clarividente de la situación que vivimos:
El que esto firma, necesita urgentemente un “acelerador lineal” para tratar una dolencia de cáncer. La solución ofrecida es estar durante muchísimas semanas en la larga lista de espera de los hospitales que disponen de esa máquina o dejar tu tierra, tu gente, tu casa y “emigrar” a la metrópoli. Allí hay máquinas de sobra mientras que en Gran Canaria solo existen DOS para una población de 815. 379 habitantes censados en 2007. Vamos, que tocamos a máquina por cada cuatrocientos mil habitantes; vaya… que si, que tenemos “motivos para creer”.
Pregunta idiota que se me ocurre esta semana: “Motivos para creer”; “Por una Canarias libre y socialista”; “Para que cuentes en Madrid”; “Hablemos en canario”… ¿Nos han tomado por imbéciles o es que en verdad lo somos?