De Banqueros, bancarios y… obreros

Ángel de la Cruz. LQSomos. Diciembre 2014

El Banco de España -en su informe anual- pedía que se trabajase por menos de lo establecido para el Salario Mínimo Interprofesional (s.m.i.: 645,30 euros al mes). No contento con ello, incitaba a que se hicieran contrataciones fuera de lo firmado en los convenios colectivos y que los sueldos no aumentaran en la misma proporción a los incrementos del Índice de Precios al Consumo (I.P.C.). Esta tendencia ha provocado -en los últimos diez años- la pérdida de casi un 15% del poder adquisitivo en relación con lo percibido por trabajar.

Item más, el Informe presentado por el Gobernador Luis Mª Linde aconsejaba acelerar el retraso de la edad de la jubilación (llegará a los 67 años en el 2027) y alargar el periodo del cómputo para calcular la pensión (que pasará de 15 años cotizados en el 2013 a 25 años en el 2022).

Pues bien, veamos ahora cuál es la situación actual de ciertos banqueros, bancarios y otros obreros… del montón:

Y aún quedan gentes como Rosell, “Capo di Capi” de la patronal, que defienden aumentos del 0,6% para ciertos convenios del 2015 y para los mini empleos cantidades inferiores a los míseros 400 euros o cifras muy por debajo del salario mínimo interprofesional.

Tanto una buena parte de la población activa, como en su mayoría el denominado ´precariado` desempeñan tareas eventuales -incluso por horas y hasta minutos- en actividades serviles: turismo, hostelería, bares, ocio, comercio, distribución, asistencia personal, teleoperadores, etc.
Y ¡ojo! más de 4,5 millones de parados subsisten inmersos en la indigencia o en las denominadas pobreza energética y /o sanitaria. Y para colmo, en el último lustro: 2008-13 más de 700 mil españoles han pasado a engrosar la categoría de “emigrantes por el mundo”.

¿Dónde la investigación? ¿Y el desarrollo? ¿Y la innovación? ¿Dónde las artes, la cultura, las T.I.C.s tecnologías de la información y comunicación? ¿España país de siervos o puerta de salida para emigrantes?

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* “La generosidad del Banco de España, la fé y el esfuerzo de sus empleados fueron creando a través de cien años un vínculo de unión perdurable mientras las vidas se suceden”. La caja de pensiones. Laus Deo”