Genocidio en Palestina… a los de dimes y diretes
Por Marta Haserrea.
Apaguen la televisión y activen la persona que queda dentro de cada uno, si es que les queda algo de humanidad dentro de este sistema perverso de expolio eurocéntrico
Los de “Israel tiene derecho a defenderse”… Mira, que no, que Israel es una potencia ocupante, es el agresor, al agresor no le asiste el derecho de defensa.
Los de los “terroristas palestinos”… Mira, que tampoco, que los pueblos ocupados tienen derecho legítimo a la defensa en todas sus formas, incluida la lucha armada, reconocido en múltiples resoluciones de Naciones Unidas.
Los de “la población civil israelí”… Ese es el argumento más perverso de todos. Israel ocupó por la fuerza, y sigue haciéndolo, la mayoría de la Palestina histórica. El sionismo es un movimiento de colonización, son colonos que ocupan ilegalmente un territorio expulsando a la población nativa del mismo. La población israelí hace servicio militar obligatorio, 3 años los hombres, 2 años las mujeres, todos son reservistas del ejército. ¿Civiles de qué?
Los de “ha empezado Hamás”… Esta guerra empezó hace más de 80 años, cuando Inglaterra, antes de la segunda guerra mundial, le regaló al movimiento nacional judío un territorio sobre el que no tenía autoridad y desde entonces continúa el traslado de sionistas de todo el mundo a Palestina a costa de la expulsión del pueblo indígena. Hamás como movimiento islámico fue financiado por Israel, como EEUU hizo en su día con Al Qaeda, para desplazar a la OLP de su influencia en la sociedad palestina. Desde entonces ha evolucionado a ser un movimiento nacionalista islámico y se ha vuelto en contra de Israel. Todas las facciones políticas palestinas luchan contra la ocupación. Hamás ganó las elecciones en Gaza y desde entonces son la autoridad en esa zona.
Los de “hay que acabar con Hamás”… Lejos de importarles un comino las condiciones de vida que Hamás impone en Gaza, con muchos detractores en su contra, “acabar con Hamás” se ha convertido en la excusa para profundizar la limpieza étnica de Palestina y derruir Gaza, generando tantos muertos como sea posible, en especial, niños, jóvenes y mujeres, y trasladar a más de un millón de personas para ocupar nuevamente más territorio y exportar una nueva ola de refugiados.
Los que están mirando, en sus casas, contemplando esta brutal limpieza étnica, retransmitida en directo, sin inmutarse… Son los mismos que hasta 1945 seguían su vida ignorando el humo negro de las chimeneas crematorias fingiendo que no sabían lo que ocurría y que no iba con ellos, que nada puede hacerse para cambiar el rumbo de historia diseñada por los psicópatas por los que somos dirigidos.
Pues yo os digo que no repitamos la historia, que no permitáis que os utilicen, que vuestro silencio es cómplice y vuestra inacción, un crimen.
Que hay que forzar desde la sociedad para que los gobiernos occidentales dejen de apoyar a Israel, cesen en sus intereses coloniales y no participen de la militarización del estado ocupante, para que los gobiernos árabes rompan sus alianzas con Israel y aíslen a ese estado terrorista, que, por otro lado, es un estado muy débil, como ya hemos visto, y no podría aguantar un asedio y menos un enfrentamiento militar permanente por varios frentes.
Esa llamada comunidad internacional está activamente dando carta blanca a Israel para destruir, invadir y ocupar Gaza, mientras cacarean que se haga de acuerdo al “derecho internacional”, como si una limpieza étnica y un régimen de apartheid pudieran de alguna manera ser compatibles con el “derecho internacional”. No es ya que se nieguen a imponer sanciones o embargos, que sería lo obligado, hay un salto cualitativo en lo que estamos viendo estos días: hay una colaboración directa política y mediática con el genocidio del pueblo palestino mediante una narrativa distorsionada de la historia y una interpretación retorcida de los hechos. Somos, porque En Nuestro Nombre lo hacen, culpables de genocidio.
Si Palestina muere, se acaba el mundo, al menos la esperanza de que este mundo tenga algún futuro para la gente de a pie.
¿Somos conscientes de la importancia de lo que ocurre?
El régimen supremacista, racista, excluyente y asesino tiene que terminar. Cualquiera que viva en Palestina ha de hacerlo en igualdad de condiciones entre iguales, porque una Democracia, señores, trata de eso, de igualdad y derechos humanos, no de vender modernidad de surferos en la playa frente al hiyab, ni de tachar de “animales humanos” al 53% de su población para favorecer todo tipo de atrocidades contra ellos.
Israel ni es una democracia ni es un país normal, es una colonia en mitad de oriente próximo. “Los países del mundo tienen ejércitos, pero Israel es un ejército que tiene un país”.
Apaguen la televisión y activen la persona que queda dentro de cada uno, si es que les queda algo de humanidad dentro de este sistema perverso de expolio eurocéntrico.
Cuando a mediados del siglo XX dijimos Nunca Más, significaba Nunca Más para Nadie.
#FreePalestine #ApartheidIsrael #PalestinaLibre #GazaUnderAttack
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Es un campo de exterminio al aire libre. Los ant8guos nazis alemanes escondían esos campos, los nuevos nazis lo aprendieron tan bien que han renovado los métodos de muerte. Es una pena que al ideología de Hitler Rosenberg no le hubieran explicado estos métodos.