Jim Morrison de The Doors, vivía frente a The Canyon Store, el equivalente en Laurel Canyon del Carrefour local. Fue allí donde nació la canción “Love Street”: “Veo que vives en Love Street, hay una tienda donde todas las criaturas nos encontramos”. Y así fue como este Boxset de 3 CD del que hoy nos ocupamos obtuvo su título…
Laurel Canyon, la memoria del paraíso rock en un fascinante disco recopilatorio
Decía con gran acierto Jesús Ordovás en su libro publicado en los años 70 en la editorial Júcar acerca del “rollo” californiano y que se tituló “El rock ácido de California”, lo siguiente: “Mucho antes de que se descubriera oro en California en 1848, la larga franja de valles, montañas y playas que se extiende de Oregón a México se convirtió en sinónimo de paraíso, creándose toda una leyenda sobre la belleza de sus paisajes, la fertilidad de sus tierras y la benignidad de su clima”. Indudablemente ello creó todo un mito, no falso aunque tal vez en ocasiones exagerado sobre California como aquella tierra prometida que se glosaba en el antiguo testamento de la religión judeo-cristiana. Mito que por tan solo recordar en algunos ejemplos, recrearon Led Zeppelin en canciones como “Going To California” o Guns N’Roses en “Paradise City”, más concretamente sobre la ciudad de Los Angeles.
Existe una zona en ese ámbito que posee un significado especial en la historia del rock: El Laurel Canyon Boulevard de Los Ángeles, que serpentea entre las colinas desde Hollywood y luego desciende hacia el Valle de San Fernando (como en “Valley Girls”), con pequeñas avenidas que se bifurcan a izquierda y derecha, como afluentes que desembocan en un arroyo.
A mediados de los años 60 del siglo XX la propiedad era barata en Laurel Canyon. El lugar perfecto para que los músicos sin un centavo lo pudieran considerar, como John Mayall, una suerte de hogar. Creó una interconexión de artistas, compositores, músicos, productores y sellos que se establecieron en sus inmediaciones a mediados de los años 60, donde todos parecían vivir al lado de los demás, como en el Haight Ashbury hippie de San Francisco.
Y de pronto en 1964, cuando los Beatles tocaron en el Ed Sullivan Show, todos los artistas allí instalados, la mayor parte de cuya inspiración tenía sus raíces en la música folk, se volvieron eléctricos, como hizo Bob Dylan en el Festival de Newport.
A finales de los años 60, el centro del mundo de la música internacional se había desplazado de puntos de acceso anteriores como Liverpool, Londres y San Francisco a Laurel Canyon, un oasis rural en medio del bullicio de Los Ángeles. A solo unos pocos minutos de Hollywood, Sunset Strip y las compañías y estudios discográficos de Los Ángeles, Laurel Canyon se convirtió en el hogar de un híbrido de folk, country, rock y pop que abarcaba a todos, desde los primeros músicos The Byrds y Buffalo Springfield hasta The Doors o Frank Zappa.
Los encantos rústicos del cañón y la proximidad del importante club folk The Troubadour -el que años más tarde fue la lanzadera al mundo de Guns N’Roses y del hard rock californiano que dominó la escena del heavy metal- atrajeron a todo un movimiento de cantantes y compositores que al mismo tiempo dieron origen al movimiento country-rock, iniciado por varios derivados de Byrds/Springfield (Dillard & Clark, The Flying Burrito Brothers, Poco) o el ex ídolo adolescente Ricky Nelson.
Pinceladas históricas significativas: Jim Morrison de The Doors, vivía frente a The Canyon Store, el equivalente en Laurel Canyon del Carrefour local. Fue allí donde nació la canción “Love Street”: “Veo que vives en Love Street, hay una tienda donde todas las criaturas nos encotramos”. Y así fue como este Boxset de 3 CD del que hoy nos ocupamos obtuvo su título. Una historia sonora del rock americano de los 60 que formó parte de todo aquel cambio social, cultural y generacional que cambió el mundo, quizá no tanto como se proponían, pero sí en gran parte.
74 temas, 4 horas de música sublime, con toda seguridad lo mejor que los años sesenta y setenta del siglo pasado podían ofrecer. Un disco que es todo un documento histórico acerca de una época, una música y una revolución tristemente convertida en mera mercancía por la industria del disco años más tarde y en moda “fashion” por determinadas firmas. Por ello, para poner en valor la calidad, la fuerza, la energía vital y el mensaje de su música, este Boxset entiendo que debe ser especialmente recomendado desde estas páginas.
Vale la pena detenerse en el contenido del recopilatorio no solo en el orden de su tracklisting, sino destacando a sus artistas más sobresalientes para poner en contexto su aportación a lo que fue aquel periodo. Empezando por el primer CD, arrancamos con The Association, una de las mejores bandas de pop-rock melódico de los años sesenta y su magnífico “Come On In”; ‘Tighter’ de Paul Revere y The Raiders, una de las bandas pop de guitarra y teclados más exitosas de la década y ‘The Good Humor Man…’, una joya olvidada del álbum clásico de Love, “Forever Changes” conforman lo mejor de ese primer disco del recopilatorio. Sin lugar a duda hay música de una de las bandas que más importancia tuvo en todo ese fenómeno, The Byrds, y como no podía ser de otra manera, su “You Don’t Miss Your Water” de su álbum “Sweetheart Rodeo” de 1968 con Gram Parsons a la voz es una de las piezas imprescindibles de este lanzamiento.
El CD2 se abre con “Love The One You’re With”, el primer sencillo de Stephen Stills de su primer álbum en solitario posterior a Buffalo Springfield con Graham Nash, David Crosby y John Sebastian como invitados haciendo coros -¡¡una joya!!- al que siguen “Pickin´Up The Pieces” de Poco y “Buzzin Fly” de Tim Buckley. Y en el tercer disco, ya en una clara evolución hacia los 70, encontramos a JD Souther, Little Feat y Linda Ronstadt como ejemplos más destacados de la segunda generación de artistas que llegó a la tierra prometida de Laurel Canyon.
Dada la extensión de la que disponemos en esta página, no nos es posible extendernos mucho más sobre el contenido de este triple CD, pero en modo alguno podemos pasar por alto la participación de Carly Simon, Fleetwood Mac, Crazy Horse, Rita Coolidge, Ned Doheny, Harry Nilsson o Kenny Logins, amén de Canned Heat, Dave (Traffic) Mason, Cass Elliott, The Mamas And The Papas, Barry McGuire y Scott McKenzie, los protagonistas fundamentales del “Verano del amor” de 1967, al lado tanto de productos musicales fabricados por la industria como The Monkees o de transvangurdistas y rompedores absolutos como Captain Beefheart.
Incluido en una caja plegable que incluye un folleto de 48 páginas ilustrado y con muchas anotaciones de prensa de la época y testimonios de músicos que vivieron ese periodo, “I See You Live On Love Street” presenta a muchos de los nombres más importantes de la mítica comunidad del cañón junto con actos que no lograron encontrar el éxito en ese momento pero a los que el tiempo ha otorgado el estatus de artistas de culto.
Un maravilloso viaje al tiempo en el que una vez más citando a David Dalton, el rock pudo haber heredado la tierra.
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