Iruñea: el arzobispo recibe carbón
Plataforma Ekimena. LQSomos. Diciembre 2017
Otro año más los Reyes Magos y Olentzero dejan carbón al Arzobispo por las inmatriculaciones
Al igual que en años anteriores, este año también los Reyes Magos y Olentzero se han acercado al palacio Arzobispal para dejarle carbón al Arzobispo monseñor Francisco Pérez.
Este viernes pasado día 29 a las 19,30 ha aparecido la comitiva detrás de una pancarta que se leía “Mientras hay apropiación os traeremos Carbón” / “Herriarena herriarentzat ikatza gaiztoentzat”. La misma iba acompañada por la música de la fanfarre Ziripot.
Una vez situados frente a la puerta de entrada del Palacio, el rey Melchor saludó a los presentes con: Pozik, bai ¡Oso pozik gaude¡ Ongi etorri guztioi… y siguió con “Qué alegría volver a encontraros de nuevo, amigos de Navarra. Gracias por vuestra acogida”.
De nuevo Oriente y Occidente juntos, en compañía del entrañable Olentzero. Juntos para exigir vuestro rico Patrimonio usurpado por los ocupantes de este Palacio. Al llegar ayer, ya Olentzero nos adelantó lo bueno, pero también lo malo de este año. Sí, entre abrazos nos disteis también una noticia triste: ya no estaba, como cada año, nuestro amigo Pedro Leoz, presidente de honor de vuestra Plataforma. Grande Pedro. Amigo Pedro. Pedro duro como roca contra el mal en Navarra, afilado como espada en rincones dolientes de la América maltratada. Fuimos muchos a despedirlo porque muchos lo quisimos. ¡¡¡Aúpa Pedro!!! Agur.
Nos disteis otra noticia sombría; abusos nuevos, codicias increíbles. A los obispos no les bastan cientos de templos usurpados. Los pueblos, todos, ofrecieron una casa para el cura. Ahora, con pocos curas, hay muchos pueblos sin sacerdote. Lo sensato sería usar esas casas para intereses locales, pues locales fueron el sudor y los dineros. Falsa ilusión: hace muchos años más de 600 casas son del Obispo. En los pueblos, ahora, ni cura ni casa. Milagro, Sr. Obispo?
Pero me contasteis cosas todavía peores. Otro pecado más negro, más sangrante, más sucio y más soez: los desahucios, palabra y suceso sombrío. Nos hablasteis de tres: hace once años en Arraitz (Ulzama). Un año después, en Mugiro, valle de Larraun… este año, en Lizoain.
Vaya historial triste, Obispo Francisco Pérez… tres mujeres, dos de ellas ancianas, la 3ª con hija y nieto pequeñín… como decimos cuando nos enfadamos mucho, “a la puta calle”. Y el dolor causado, monseñor? Y la ternura de un tejado amigo, monseñor? Y el derecho a una vivienda digna, monseñor…?
Pero, todavía, además, hay algo peor, Sr. Obispo: usted no quería esas casas para nada… Después de 10 años, ahí están cerradas, inútiles, no sirven de techo a nadie, vacías… Eran malas mujeres, Sr. Pérez? Eran escándalo para los pueblos, monseñor? Eran putas, acaso, endemoniadas quizás? Perseguían a la Iglesia? ¿Qué pecado cometieron, Sr. Pérez? Dígalo, responda, dé la cara, explique ese Evangelio nuevo que ustedes se han inventado. !!!Mentirosos¡¡¡
Además, también nos contasteis noticias buenas. Las llevamos escritas para que no se nos olviden al volver a Oriente:
Han nacido nuevas Plataformas en varias comunidades del País. Habéis llegado juntos a los despachos del Gobierno y os prometen la lista completa de lo inmatriculado desde 1998. Habéis conseguido que la Federación de Municipios y Concejos de Navarra se identifique con vosotros y no solo de palabra, sino designando un grupo de estudio, seguimiento y actividad junto a la Plataforma. Siguen apuntándose a la Plataforma que llamáis “Recuperando” nuevas gentes, regiones nuevas y más personas creyentes.
Otra vez con vosotros vamos a cantar nuevos villancicos. Nos dice Olentzero que este año ha encontrado carbón más negro que nunca. Bendito él…
A continuación Olentzero se dirigió en euskera a los congregados para saludarles y anunciar que efectivamente traía el carbón más negro que nunca para dejárselo al Arzobispo Francisco Pérez y lo seguirá haciendo hasta que no devuelvan lo usurpado. Dicho esto vació su saco delante de la puerta de entrada al Palacio Arzobispal, acto que fue muy aplaudido por los asistentes.
A continuación se sucedieron los villancicos, las jotas y el cuchichí-cuchichí… con estribillos adaptados a las inmatriculaciones realizadas por la Jerarquía católica y la desaparición de la propiedad pública a manos de la Iglesia Católica. Así se entonaron el “Roban y roban y vuelven a robar, los del Arzobispado nos vuelven a robar…” y bastantes más.
El acto terminó con la música del la fanfarre Ziripot que por primer año se ha querido sumar al programa.
ni carbón
para ese cabrón: mierda