La verdad de un país destrozado

La verdad de un país destrozado

Maryssa Ruiz. LQS. Abril 2018

Frio, lluvia, nieve y heladas han sido las protagonistas de un invierno español en el que a medida que iban bajando las temperaturas iba subiendo de forma desorbitada el precio de la luz. Mientras hay personas que no pueden hacer frente al incremento en más de un 10% que ha supuesto la factura de la luz este año, las eléctricas han disfrutado y disfrutan del dinero que reciben acrecentando el valor de algo que debería de ser un derecho público y no consecuencia de las nefastas decisiones de políticos sinvergüenzas que una vez privatizaron haciendo uso de su cargo para después ponerse al frente como asesores, asesores para idear la forma de seguir robándonos de una forma legalizada.

En este país se está ocultando una realidad que nadie cuenta, que los medios de comunicación esconden y que a mucha gente de a pie no le importa, en este país además de que personas han muerto congeladas a diario en las calles por vivir a la intemperie sin ser ayudadas por el gobierno que debe de velar por las necesidades de cada ciudadano, hay muchas familias que en sus casas pasan verdaderos horrores debido a no poder disfrutar de unas necesidades mínimas porque les es imposible afrontar el pago de la luz, un pago que en la actualidad casi se puede considerar un `artículo de lujo´ en una sociedad destinada a la miseria y la ignominia en la que se acentúa cada vez más las desigualdades sociales.

Esta es la realidad en un país en el que nos gobierna un partido con más de mil imputados por corrupción, en un país en el que el presidente del gobierno fue citado a declarar por verse implicado en tramas de corruptela , en un país en el que los partidos de la oposición no son más que meros chantajistas y embusteros que siguen la misma línea sistemática y absurda de la vieja escuela del franquismo, en un país en el que los mismos que nos representan han comprado una justicia para nada justa con la ley que protege al pueblo defendiendo a delincuentes y analfabetos mentales que solo saben apoderarse de lo que no es suyo, en un país en el que los ciudadanos debemos rescatar con nuestro dinero a los bancos usureros y mezquinos que se han encargado de echar a familias enteras de sus casas después de haberles ¿robado? de una forma muy aguda y sutil, en un país en el que es más importante solventar al presidente de un equipo de fútbol que alimentar a más del 40% de niños que pasan hambre y que sitúan a España como el tercer país europeo con más pobreza infantil, en un país en el que pedófilos y pederastas que recitan la misma oración cada domingo en misa no son juzgados por abusar de menores a la misma vez que son premiados con ingresos económicos que salen del bolsillo de todos nosotros, en un país en el que hay personas que no tienen ni para una barra de pan mientras una reina gasta miles de euros que son nuestros al mes en ropa y zapatos.

Esto es España, un nido de corrupción, robo de derechos, masacre a la clase obrera, hambre, paro, sufrimiento, privatización de sanidad, destrozo de educación y desolación infinita.

Seguid votando a chusma vestida de Armani, a verdaderas ratas que solo saben esbozar una estúpida sonrisa ante las cámaras, seguid sacando las banderas en señal de orgullo de la desdicha y la pobreza porque quizás os vengan bien para taparos cuando acabemos todos en la calle, seguid criticando e insultando a los que pedimos igualdad y democracia, a los que vemos una verdad que supone la muerte lenta y dolorosa de un país cuya condena comenzó en las manos del franquismo, las mismas manos que nos siguen liderando pero con las siglas de los partidos políticos que hoy nos representan; seguid, seguid ciegos, sordos y mudos ante la cruel e injusta sentencia de toda una nación, ante la ausencia de libertad de la clase obrera, ante la inexistencia de igualdad de derechos de los ciudadanos, ante la negación de la justicia que debe salvaguardar nuestras necesidades, ante el destrozo paulatino de nuestras vidas, seguid volviendo la cara pero cuando ya no exista esperanza alguna entonces no lloréis ni pretendáis poner solución porque será muy tarde para recuperar lo que nos están robando con la complicidad de todos.

Más artículos de la autora

Síguenos en Facebook: LoQueSomos Twitter@LQSomos Telegram: LoQueSomosWeb

LQSomos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Nos obligan a molestarte con las "galletitas informáticas". Si continuas utilizando este sitio aceptas el uso de cookies. más información

Los ajustes de cookies de esta web están configurados para "permitir cookies" y así ofrecerte la mejor experiencia de navegación posible. Si sigues utilizando esta web sin cambiar tus ajustes de cookies o haces clic en "Aceptar" estarás dando tu consentimiento a esto.

Cerrar