Se levanta la censura a la implicación jurídica de España en el Holocausto
Cristina Calandre Hoenigsfeld. LQSomos. Febrero 2015
Hace años que estoy acostumbrada a lidiar contra la censura, ya que muchos de los temas que he ido investigando han sido sistemáticamente vetados por los grandes medios de comunicación (con pequeñas excepciones).
Ha sido Internet y las web republicanas, básicamente, quienes me han ayudado a divulgar las investigaciones que he llevado a cabo, y también Universidades, como la de Murcia, Autónoma de Barcelona y la de Cádiz, además del I Congreso de Víctimas del Franquismo .
Primero fue la censura en el año 2007 -con motivo de su Centenario-, la contraria a reconocer que la gran institución científica, la Junta para ampliación de Estudios (JAE), estuvo activa toda la Guerra Civil Española, siendo subdelegado en Madrid mi abuelo, el Dr. Luis Calandre Ibáñez.
Luego fue el Hospital de Carabineros, dedicado a curar a cientos de milicianos de una epidemia de malaria y situado en la Residencia de Estudiantes durante la Guerra Civil y su refugio antiaéreo (ahora medio destruido), a pesar de tener aquel lugar la máxima protección, como Bien de Interés Cultural desde 1978.
El resultado, después de siete años de lucha, es desalentador:
Por un lado, a la Residencia se le ha otorgado por parte de la Comunidad Europea, el galardón “Sello Patrimonio Europeo” en el año 2015 y, por otro lado, el decreto ilegal franquista que supuestamente disolvió a la JAE, el 19 de mayo de 1938, no ha sido derogado todavía, manteniéndose -a día de hoy- que el Instituto de España (institución franquista que reúne a las ocho Reales Academias, y a la que fue a parar la JAE según ese decreto ilegal del 19 de mayo de 1938) sigue siendo reconocido como una gran institución cultural y lo constatamos con el reciente discurso del rey Felipe VI el día 27 de enero del 2015 con motivo de su audiencia a Juan Velarde Fuertes, su nuevo presidente:
“…La Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, forma parte del Instituto de España, una corporación de derecho público que reúne a las Reales Academias. Sus objetivos son fomentar la relación y colaboración con las Reales Academias… que representan la excelencia en los diversos campos de las ciencias, las artes y las humanidades. Por un lado su valores esenciales son las categorías de sus miembros, y por otro su estabilidad e independencia frente a intereses económicos y políticos…”
El otro tema en el que he tenido una férrea censura, ha sido el de las dos normativas antisemitas españolas, la de 11 de mayo de 1939 de Paso de Fronteras y la de 6 de octubre de 1939 de Depuración del Colegio de Médicos.
En el año 2012 abrí mi página web Hoenigsfeld.com (1) y, tras 3 años sin ser reconocida su existencia (salvo en Radio Sefarad y una carta al director del Mundo), últimamente se ha dado algo de importancia a este tema, a través de la Memorial Democràtic de la Generalitat de Catalunya y de la Asociación Judío-Catalana Mosaico.
Ahora, acaba de salir el libro del historiador catalán, Josep Calvet, editado por Milenio (2), con prólogo de Jacobo Israel Garzón (3) donde, en las páginas 44-45, se citan las dos normativas antisemitas españolas, poniendo a pie de página, mi nombre y la fuente, la web Hoenigsfeld.com (1).
Pero, hace ya unos días, hice una petición al Parlamento Europeo, denunciando que tres proyectos españoles, dedicados a estudiar España y el Holocausto, ocultaban dichas normativas. Por ello amplié en Internet la aportación de documentos, con esas dos páginas, para que sirvan de apoyo.
Lo que pretendo es que se reconozcan dichas normativas, en donde participó, entre otros, el ministro franquista y antisemita, Ramón Serrano Súñer, para que se anulen y se le revoquen los reconocimientos que tiene como académico histórico en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. Y exigir, además, que se investigue este tema, totalmente marginado de las actuales corrientes de investigación de España y el Holocausto, dotadas de abundantes subvenciones.
Si nos fijamos en los temas de estas censuras, se trata de leyes franquistas que todavía no han sido expulsadas del ordenamiento jurídico, pues aunque la Constitución de 1978 las derogara, no las anuló. Y en el caso de la de 19 de mayo de 1938 sobre la disolución del JAE, es aún más flagrante el delito, pues sigue totalmente vigente, ya que pasó a través del Instituto de España al actual Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
La negativa del actual Régimen a desmontar todo ese entramado jurídico franquista, tiene mucho que ver con su procedencia, ya que la actual monarquía es heredera del franquismo y cuestionar a éste último es cuestionar a dicha monarquía y su Constitución de 1978. De ahí, la férrea censura a todo lo que pueda ir contra su legitimidad y legalidad.
Notas:
1.- Familia Hoenigsfeld
2.- Huyendo del Holocausto. Judíos evadidos del nazismo a través del Pirineo de Lleida. Josep Calvet Vellera
3.- Jacobo Israel Garzón
