22 de julio de 1944: finaliza la conferencia de Bretton Woods en EEUU

22 de julio de 1944: finaliza la conferencia de Bretton Woods en EEUU

Por Daniel Alberto Chiarenza*

El 22 de julio de 1944 finalizó la histórica conferencia de Bretton Woods en Estados Unidos, un evento que definió el sistema financiero internacional de posguerra y consolidó la hegemonía económica de Estados Unidos. Este artículo de Daniel Alberto Chiarenza analiza las propuestas presentadas, el conflicto de intereses y las consecuencias a largo plazo de las decisiones tomadas en Bretton Woods.

¡Tenía razón Keynes, con la expansión del flujo comercial internacional!… pero se impuso el monetarismo de White y los intereses imperialistas estadounidenses

“… el proyecto original del nuevo orden económico liberal planetario lo incluía dentro del nuevo orden político internacional, también proyectado en los últimos años de guerra como las Naciones Unidas, y no fue hasta el hundimiento del modelo original de la ONU con la guerra fría cuando las dos únicas instituciones internacionales que habían entrado realmente en funcionamiento en virtud de los acuerdo de Bretton Woods de 1944, el Banco Mundial (Banco Internacional para la Reconstrucción y el Desarrollo) y el FMI, que todavía subsisten, quedaron subordinadas de hecho a la política de Estados Unidos”. Eric Hobsbawm, Historia del Siglo XX, Grijalbo Mondadori, 1998.

Hotel Mount Washington, en Bretton Woods

Son las resoluciones de la conferencia monetaria y financiera de las protohistóricas Naciones Unidas que se conciben casi al finalizar la Segunda Guerra Mundial, en junio de 1944 y después de la batalla de Stalingrado, finalizada el 2 de febrero de 1943, y del desembarco aliado en Normandía (6 de junio de 1944). Se reunieron en el complejo hotelero de la localidad de Bretton-Woods, Estado de Nueva Hampshire (Estados Unidos), cuarenta y cuatro representantes de países aliados, con la finalidad de adoptar un sistema común en materia de política monetaria y financiera que entraría en vigencia a partir de la aproximada finalización del conflicto bélico internacional. Se desarrollaron entre 1 y el 22 de julio 1944, aunque allí no se confirmaría su efectiva implementación.

Fue entonces cuando se establecieron las reglas para las relaciones comerciales y financieras entre los países más industrializados del mundo y sus dependencia económicas dentro de la División Internacional del Trabajo (en que algunos países se especializan en perder y otros en ganar en el concierto mundial). Bretton Woods trató de poner fin al proteccionismo del período 1914-1945, que se inicia –precisamente- en 1914 con la Primera Guerra Mundial. Se consideraba que para llegar a la paz tenía que existir una política librecambista, donde se establecerían las relaciones con el exterior.

En esta conferencia se presentaron dos propuestas fundamentales, las que fueron denominadas: Plan Keynes (debido al conocido y eficiente economista inglés, John Maynard Keynes que formaba parte de la delegación británica); y Plan de Harry White (que llevaba el nombre de un funcionario del Tesoro estadounidense que tuvo a su cargo la exposición del plan –para los argentinos, un ignorante cualquiera como el actual ministro de Hacienda argentino “Toto” Caputo-). Curiosa e irónicamente, White se convertiría más tarde en víctima de la “caza de brujas” en los Estados Unidos, por presuntas simpatías, mantenidas en secreto, con el partido comunista.

El proyecto de Keynes, que, obviamente por su progresismo, sería rechazado, consistía en la creación del Banco y del Clearing Union Mundial para construir un mecanismo de compensación y de crédito mundial. Esta propuesta implicaba la formación de un verdadero Banco Central Mundial de bancos centrales nacionales, con capacidad de emitir papel moneda utilizable en el comercio internacional (en el ámbito argentino, hay que leer a Mariano Fragueiro, candidato presidencial a la Confederación Nacional en 1954, derrotado por el federal-liberal Urquiza), con un valor fijado en oro con una definición modificable, flexible, para controlar la inflación. La cuota de cada país miembro sería fijada en función de su volumen de comercio exterior, por lo que la aplicación de este proyecto hubiera significado una mayor expansión en el flujo comercial internacional (La expansión comercial es un concepto fundamental en el mundo de los negocios, que implica el proceso de ampliar la presencia de una empresa en nuevos mercados, tanto a nivel nacional como internacional y, a su vez, recibir en igualdad de condiciones lo que produce el país del mercado más débil).

El 1° de julio de 1944 se firmó el Acuerdo que se denominó de Bretton Woods, del que surgió el Fondo Monetario Internacional (FMI, raíz y fundamento de los males económicos en todos los países) y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) más conocido por Banco Mundial (Otro “excremento” de las finanzas más, pero en otro sentido al que lo dice el presidente Milei refiriéndose a la moneda nacional de “su” país, defendiendo así –como es su costumbre- a los poderosos). Estos acuerdos significaron el triunfo del Plan White y la constitución del FMI favoreció los intereses imperialistas estadounidenses, ya que el sistema monetario internacional se basaba en el oro, en el dólar y la libra esterlina como monedas convertibles, por lo que Estados Unidos, que tenía importantes reservas de ese metal, como consecuencia de la venta de armamentos a los aliados en la Segunda Guerra Mundial, quedaba en una posición hegemónica. Además, como la cuota de cada país se fijaba en función de su renta nacional, no por el volumen de su comercio exterior, como proponía Keynes, y la de Estados Unidos era considerablemente mayor que la de los demás países, pudo controlar el FMI del que se convirtió en miembro mayoritario, lo que virtualmente le otorgó el poder del veto.

Las organizaciones allí creadas empezaron a funcionar en 1946, siendo rechazadas y denegándole su ingreso e integración a ellas por el entonces presidente argentino Juan D. Perón (sólo después del golpe de Estado de 1955 de la derecha oligárquica y pro-imperialista argentina, las ilegítimas autoridades hacen su ingreso al Fondo Monetario Internacional en un gorila y fusilador gobierno de facto).

La quiebra del sistema acordado en Bretton Woods se produjo durante la Guerra de Vietnam, cuando Estados Unidos imprimía y enviaba al exterior miles de millones de dólares para financiar la guerra. Además, en 1971 el país “degenerado financiero” tuvo un déficit comercial por primera vez en el siglo XX.

El sistema monetario internacional adoptado fue de cambios fijos, el que en la práctica funcionó hasta agosto de 1971 cuando Estados Unidos declaró la inconvertibilidad del dólar en oro, medida que junto con las devaluaciones del dólar de diciembre de 1971 y de febrero de 1973, pusieron punto final al sistema de Bretton Woods. Finalmente, los acuerdos de Jamaica del 7 y 8 de enero de 1976, legalizaron la situación creada a partir de 1971 que estaba en contradicción con el espíritu de los Acuerdos de Bretton Woods. En virtud de estos Acuerdos, los países miembros del FMI tienen libertad para determinar su régimen de cambios y adoptar una flotación pura o sucia de sus monedas, aunque deben someterse a la supervisión de aquella institución.

“Como señala la economista Paula Bach “el nuevo orden mundial estaba construido de acuerdo a las necesidades de Estados Unidos de sostener su hegemonía en una situación en la que las bases económicas y financieras se habían trastocado.
“Hacia principios de los ’70 la nueva crisis económica internacional y los primeros síntomas de declinación de la hegemonía norteamericana, llevaron a Estados Unidos a poner fin a los acuerdos de Bretton Woods desvinculando definitivamente al dólar del oro”, explica la economista. La Izquierda Diario. PTS en el Frente de Izquierda, Nota especial de Mónica Arancibia, Martes 21 de julio de 2020.

* Desde Burzaco (Buenos Aires). Redactó unos 200 fascículos dirigidos por Don Pepe Rosa. Colaboró, desde la apertura democrática en 1983, con publicaciones como NotiLomas, Buenos Aires/17 y Volver a las fuentes. Comunicador de temas históricos en radios locales: FM Ciudades, FMB, AM 1580, FM Sueños. Relator de las Comisiones de Identidad Bonaerense, y otras en la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires. Redactor en los periódicos InfoRegión y La Unión. Docente jubilado, regente y director del Instituto Lomas y profesor de Adultos. Es autor de los libros Historia general de la provincia de Buenos Aires (1998); El olvidado de Belém: vida y obra de Ramón Carrillo (2005); Ramón Carrillo: vida y obra del ilustre santiagueño; Historia Popular de Burzaco T. 1 (2009); Santiago del Estero-Belém do Pará. Una vida, un destino: Ramón Carrillo (2010); El Jazz Nacional y Popular (2017).
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