Buenos Aires, 19 de abril: movilización en apoyo a la expropiación del Hotel Bauen
Comunicado de prensa ante nueva audiencia judicial:
Los trabajadores del Hotel Bauen fueron citados a una audiencia a realizarse el jueves 19 de abril a las 11 hs., en el Juzgado Comercial Nº 9, secretaría 18, a cargo de la jueza Paula Hualde, donde deberán argumentar, una vez más, la legitimidad del reclamo por la expropiación del inmueble, en contra de un nuevo avance judicial por parte de los ex dueños, la familia Iurcovich. Por esta razón, el mismo día, la Federación Argentina de Cooperativas de Trabajo (FACTA) convoca a una movilización de apoyo, desde las puertas del hotel, sito en Callao 360, a las 10 de la mañana, rumbo a los Tribunales de Marcelo T. de Alvear. Esta actividad cuenta además con la adhesión de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT).
Por otra parte, los trabajadores del hotel fueron citados a concurrir el jueves 12 a la Comisión de Cooperativas, Mutuales y ONG’s de la Cámara de Diputados, ya que el proyecto de expropiación será tratado ese día.
Para Federico Tonarelli, presidente del hotel, “el proceso judicial ha dejado mucho que desear, ya que no fueron cuestionados los antiguos dueños, a pesar de su probada vinculación económica con la dictadura militar. Esta citación nos llega justo cuando estamos por rebautizar el Auditorio del hotel con el nombre de Abuelas de Plaza de Mayo, en homenaje a las personas que todavía hoy siguen luchando por los derechos humanos, lucha de la que nos sentimos parte los trabajadores del hotel”.
Los Iurcovich: una familia que se hizo millonaria gracias a la dictadura militar
Para la justicia, el inmueble todavía pertenece a la firma Mercoteles, vinculada a la familia Iurcovich, que hizo su fortuna ayudada por la dictadura militar, y que pudo multiplicarla posteriormente durante la intendencia de Grosso y en el presente de la mano del macrismo. Para ello se valió de nuevas firmas a cargo de familiares y allegados, para seguir haciendo negocios turbios en Brasil y hasta en la Triple Frontera.
El mentor de la empresa, Marcelo Iurcovich, hoy fallecido, tenía contactos con el contraalmirante Carlos Alberto Lacoste y con el brigadier Osvaldo Cacciatore, quienes le permitieron acceder a un crédito del banco Banade para la construcción del Bauen. Según los abogados del Banco Nación, que absorbió la cartera tras el cierre del Banade, Iurcovich nunca pagó ese crédito. Pero éste se las ingenió para exigirle al Banco por incumplimientos, y en 2005 la Corte Suprema le dio la razón. Esa impunidad le permitió a su hijo Hugo continuar haciendo negocios inmobiliarios, esta vez en Puerto Madero.
El empresario chileno Félix Solari (empresario gastronómico proveniente de la familia dueña de las tiendas Falabella) compró el hotel en 1997. Pagó cuatro millones de dólares como primera cuota de una compra de entre 14 y 20. Pero tras la recesión, Marcelo Iurcovich se negó a modificar el contrato, y el hotel entró en convocatoria de acreedores en 2001.
En 2002, unos 20 empleados ocuparon el Bauen, lo arreglaron y empezaron a operarlo. Con el tiempo se sumaron trabajadores desocupados hasta conformar una planta de más de 150 puestos.
Y en 2005, la familia Iurcovich vendió el hotel a Mercoteles S.A., una firma creada en el 2002 que nunca presentó balances a la Inspección General de Justicia (IGJ) con vínculos claros con la familia Iurcovich. A pesar del justo reclamo de sus trabajadores, la justicia le otorgó la propiedad del inmueble, ya recuperado y acondicionado, a la firma Mercoteles, frenando el pedido de expropiación legítima.
Nuestra lucha
Para los trabajadores del hotel, la defensa de sus puestos de trabajo no es sólo un reclamo laboral, sino también una lucha contra lo más oscuro de nuestro país, personificado hoy en un grupo económico que fue capaz de realizar las maniobras financieras más sombrías, montados en una red de relaciones que comienzan en los años 70, con la estrecha relación que los une a la dictadura militar más sangrienta de la historia de nuestro país.
(Festival por la Expropiación en Plaza Congreso, el año pasado, con la presencia solidaria de Attaque 77, Bersuit Vergarabat y otros)
* Prensa FACTA