Cantabria: Memoria de los muertos de Mauthausen
Patxi Ibarrondo*. LQSomos. Febrero 2017
Ha costado un rato largo y mucha insistencia, pero al fin las instituciones de Cantabria, al fin se han percatado de la memoria histórica de esta tierra y, (con motivo del Día Internacional de las Victimas del Holocausto), han cumplido un homenaje al centenar de cántabros republicanos que murieron ignominiosamente en Mauthausen Gusen, unos de los campos más duros del exterminio nazi.
Sus nombres están grabados en un modesto monumento erigido en Camargo.
Mi tío abuelo, Luis Albo Camus, fue uno de esos combatientes que murieron luchando contra el nazi-fascismo después de cruzar los Pirineos ante el inexorable avance de las tropas nacionalistas españolas.
El hecho de que fueran condenados a trabajos forzados hasta morir, se debió a la insistente intervención personal de Franco y de su cuñado Ramón Serrano Suñer, quienes le comunicaron a Hitler su carácter apátrida. Desposeídos de nacionalidad, estos combatientes de la República no eran nada., ni figuraban oficialmente en ninguna parte. Aunque, finalmente, unos pocos supervivientes quedaron para contar cómo era la vida y la muerte el infierno de Mauthausen Gusen.
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