Elecciones 2011: datos y voces más representativas
El conservador Partido Popular y su líder, Mariano Rajoy, han ganado las elecciones generales en el Estado español con una mayoría absoluta de 186 escaños y el 44,62% de los votos. El PSOE de Alfredo Pérez Rubalcaba se ha hundido hasta los 110 diputados con el 28,73% de los apoyos, su peor resultado desde las primeros comicios de la transición democrática.
El PP ha ganado 32 escaños (respecto a los 154 que ya tenía en la Cámara baja) en las elecciones de la crisis económica y los cinco millones de parados. Con 10,83 millones de votos (medio millón más que en las anteriores elecciones) ha conseguido superar la marca histórica de Aznar. El expresidente ’popular’ logró 183 escaños con 10,3 millones de votos en 2000, hasta ahora el récord del PP. El PSOE ha perdido 59 diputados respecto a los 169 que obtuvo en los anteriores comicios de 2008. Por el camino se ha dejado 4,3 millones de votantes al pasar de los 11,3 que logró Zapatero a menos de 7 millones.
El descalabro socialista se ha producido fundamentalmente en Andalucía y Cataluña. En ambas ha dejado de ser la fuerza más votada, y solo se mantiene como partido más respaldado en dos provincias: Sevilla y Barcelona.
Por su parte, el candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba comparecía solo, sin la presencia de otros cargos socialistas y sin la presencia del presidente Zapatero. Rubalcaba dijo que había pedido a Zapatero la realización de un Congreso socialista para decidir el futuro del partido. Este martes, el aún presidente del Gobierno y Secretario General socialista anunciaba ese congreso para la primera semana de febrero.
El nuevo Congreso de los diputados será más plural, ya que tendrá representación de 13 formaciones políticas distintas frente a las 10 que tenían escaños ahora.
CiU sigue siendo la tercera fuerza política en diputados con 16 escaños en un Congreso, en el que entra Amaiur con grupo parlamentario propio al obtener 7 diputados, lo que supone el regreso de la izquierda abertzale tras los buenos resultados de Bildu en las elecciones municipales y el anuncio de ETA de dejar la lucha armada.
Izquierda Unida, con 11 diputados, logra grupo parlamentario propio, y es la tercera fuerza en votos, con más de un millón trescientos mil apoyos. Su Coordinador General, Cayo Lara, no podía ocultar su alegría.
El partido Unión Progreso y Democracia consigue 5 escaños, pero no logra grupo parlamentario propio al no superar el 5% de los votos a nivel nacional. El PNV lo mantiene a pesar de perder un diputado y quedarse con 5 escaños. Esquerra Republicana de Catalunya, Bloque Nacionalista Galego y Coalición Canarias mantienen su representación con tres, dos y dos, respectivamente.
Y entran en el Congreso otras tres formaciones nuevas con un diputado cada una: Compromis-Equo, Foro de Ciudadanos y Geroa Bai, la nueva coalición por la que se presentaba esta vez la diputada de Nafarroa Bai, Uxue Barcos.
Un hecho importante, y que la clase política y el poder mediático suelen pasar por alto, es la importante subida del voto protesta, sobre todo el nulo. Entre votos blancos, nulos y los registrados por la iniciativa Escaños Vacíos se contabilizan 750.000 votos, lo que supondría la quinta opción “elegida” (2’2% respecto al censo). A esto hay que añadir el incremento de la abstención pasiva, es decir la gente que no fue a votar, que alcanzó las 9.710.000 personas (el 28’4% del censo electoral). Estos datos sitúan a las personas descontentas con la clase política y con el sistema muy cerca de los votos logrados por el vencedor de las elecciones, el Partido Popular.
