Ezpana fascisnante
Daniel de Cullá. LQSomos. Noviembre 2017
El chico es un tartaja, que se quedó sin habla por haberle dado tres navajazos en la lengua unos calvorotas que llevaban en la coronilla una cruz gamada, porque él y su hermano vestían distintos.
Fue justo al ladito de un bar de juventud musical cerca de la plaza de España, en Madrid, a las doce y media de la noche en punto.
También, en el Hospital Clínico, en Urgencias, tuvieron que darle puntos en el cráneo porque le abrieron la cabeza con una cadena de esas de tirar del tractor cuando está desquiciado en el campo.
-¿Quién ha sido el asesino, quién ha sido el criminal? Le preguntó su madre en el quicio de la puerta, al subir él las escaleras, viendo la venda de la cabeza ensangrentada.
-Made, le dijo el hijo con los ojos llorosos. Mi emano y yo no isimos ma aguno. A salí el ba musica, xusto antes dempesa anda la Gan Vía, nos cecaron unos cabesas rapas con una cuz gamada en la oronilla, y uno dellos me empesó a da con una adena de trasto en la sabesa. Al cae a suelo, con una navasa marañó a lengua.
-Hijo mío, le dijo su madre, abrazándole como una rosa abraza a una avispa. Hay que dar parte a la autoridad.
-Ya lo hemos hecho, madre, le dijo su hijo Antonio. Pero no servirá de nada, pues estos criminales desaparecieron del lugar, y cuando llegaron los guardias, la gente decía que no había visto nada.
Hoy es el día que Antonio se ha hecho bombero de Madrid, en la Ciudad, y ha visto como compañero al que abrió la cabeza a su hermano y arañó su lengua con una navaja toledana; y, él, sin poder hacer nada, esperando que le destinen a Móstoles o Fuenlabrada, pues le dan ascos en el vientre con tan solo verle.
El chico, Baldomero se llama, que es muy buenecín y muy rebonito ha tenido suerte, pues ha conseguido un empleo de recaudador de máquinas tragaperras, y sobresale en la Empresa para la que trabaja por encima de los demás trabajadores; aunque el golpe en la cabeza le ha dejado un poco tocado del ala.
Cuando le pregunta algún amigo que viene de fuera:
-¿Cómo lo lleva, Baldomero? ¿No le has dado pálpelo a quien te abriera la cabeza?, él le contesta:
-.No, no merece la pena. Ezpana es fascisnante, aun viendo la muerte de cerca.