La cara de Jesucristo
Arturo del Villar*. LQS. Febrero 2018
Según informa Diario Jaén este 8 de febrero, el Juzgado de lo Penal número 1 de Jaén ha condenado a Daniel Serrano, joven de 24 años empleado eventualmente en la recogida de aceituna, a pagar una multa de 480 euros por haber colgado en la red, en abril de 2017, un fotomontaje con su cara, en lugar de la que tiene la imagen del conocido como Cristo Despojado, propiedad de la hermandad de la Amargura. Fue esta cofradía la denunciante, y el juez ha estimado, según dice en la sentencia, que Serrano “realizó una vergonzosa manipulación del rostro de la imagen, haciendo figurar en ella su propia cara y fotografía. La difusión fue un escarnio.” Amén.
Entrevistado por Diario Jaén a su salida del Juzgado, Serrano dijo que se declaró culpable por consejo de su abogado, para evitar una condena mayor, porque el fiscal pedía una multa de 2.160 euros. “No sé cómo la voy a pagar, confesó, porque 480 euros equivalen a 10 jornales en la aceituna, y estoy a punto de terminar el contrato.” Si los cofrades de esa hermandad fuesen unos buenos cristianos, abonaría la multa impuesta a consecuencia de su de-nuncia. Pero no lo harán, seguro. No en balde son de la Amargura, es decir, amargados.
Explica el juez que el aceitunero de Jaén, nada altivo, sino muy manso, en contra de la calificación dada por Miguel Hernández, “realizó una vergonzosa manipulación del rostro de la imagen”. ¿Y qué rostro tenía la imagen? Porque no existe ningún retrato oficial de Jesucristo, ya que en su época no se habían inventado las cámaras fotográficas. El imaginero que hizo la imagen imaginó cómo era Jesucristo. En consecuencia, el juez demuestra una incultura mayúscula, por la que es juez, naturalmente. Afirmó Felipe González el 8 de abril de 1997, en rueda de Prensa celebrada en el Congreso de los Diputados: “Hay algunos jueces que, como mínimo, son unos descerebrados, si no son algo más.” Cosa extraña, esa vez no mintió.
Autorretratos de Durero como Cristo
Ignora el juez que a lo largo de la historia del cristianismo ha habido artistas que se ha autorretratado como jesucristos, y sus obras figuran en los museos más importantes del mundo, porque a ningún juez ignaro se le ocurrió acusarlos de cometer una blasfemia. Baste con citar a Alberto Durero, por si acaso el juez supiera de su existencia, que no lo sabrá. Un autorretrato suyo de 1500, expuesto en la Alte Pinakothek de Munich, está presentado como una imagen frontal de Jesucristo, de mirada severa, con largos cabellos rubios, y la mano derecha sobre la túnica. Sigue la moda germánica del siglo XV, y todos los visitantes del museo quedan maravillados por su buena factura, sin que ninguna cofradía se haya sentido ofendida en todos estos siglos y ningún juez haya ordenado descolgar el óleo. Son de Munich.
Y existe otro autorretrato de Durero como “Varón de dolores”, según la expresión del profeta Isaías para designar a Jesucristo en su libro (53:3). Es un dibujo realizado en 1522 conservado en la Kunsthalle de Bremen, que mide 40,8 por 29 centímetros. El artista se autorretrató como la figura de Jesucristo en un momento de su pasión, despojado de sus vestidos, como la imagen del Jesús Despojado que veneran los amargados de Jaén. Se considera una de las principales obras debidas a la mano de Durero. Por suerte para la historia del arte, se encuentra en Bremen, en donde la gente no es fanática y no hay jueces que se asusten ante reproducciones de la supuesta figura de Jesucristo; en Jaén este dibujo hubiera sido quemado por la Inquisición en cuanto el artista se lo enseñase a algún vecino. Y lo peor es que la Inquisición se mantiene en estos jueces iletrados y disparatados existentes por todas las provincias españolas, no son exclusivos de Jaén.
Las imágenes son sacrílegas
También ignoran los amargados de la cofradía que las imágenes de personajes sagrados son sacrílegas, y está prohibido hacerlas y adorarlas por el mismo Dios. Si los amargados fueran verdaderamente cristianos, destruirían todas las imágenes que veneran. El Antiguo testamento de la Biblia, libro inspirado por Dios en opinión de judíos y cristianos, reproduce en dos pasajes diferentes, para que no quepa ninguna duda, el decálogo entregado por el mismo Dios a Moisés en el monte Sinaí: se encuentra en el Éxodo, 20:3 a 17, y en el Deuteronomio, 5:7 a 21.
En los dos lugares el segundo mandamiento dice con escasas diferencias: “No te harás esculturas ni imagen alguna de lo que hay en lo alto de los cielos, ni de lo que hay abajo sobe la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra. No te postrarás ante ellas y no las servirás, porque yo soy Yahvé tu Dios”. Cito por la traducción catolicorromana más recomendada, la de Eloíno Nácar y Alberto Colunga, O. P., editada por la Biblioteca de Autores Cristianos, premiada por varios papas.
La Iglesia catolicorromana no se ha atrevido a alterar sus traducciones de la Biblia, pero en los catecismos con los que adoctrina a los niños y los catecúmenos tiene la desvergüenza de enmendar a su Dios, y ha eliminado canallescamente ese segundo mandamiento, corriendo los demás, de forma que no coincide su número con el bíblico. Para evitar que el decálogo se le quedara corto, divide el décimo original en dos separados.
De esta manera los templos catolicorromanos están llenos de imágenes de cristos, vírgenes y santos, cada una con su correspondiente cepillo para recibir los óbolos de los fanáticos que solicitan un milagro a esos trozos de madera o de piedra o de cualquier otro material. La Iglesia romana consigue mantenerse gracias a las limosnas de los crédulos y a la venta de indulgen-cias y chucherías bendecidas para los mismos. Dado que los catolicorromanos tenían prohibido leer la Biblia, bajo pena de muerte si eran condenados por el tribunal sacrílego de la Inquisición, ignoraban esa discrepancia entre el decálogo dado por Dios y el de los catecismos.
Mejor harían los amargados en enterarse de la voluntad del Dios a quien dicen adorar, en vez de presentar denuncias estúpidas.
* Presidente del Colectivo Republicano Tercer Milenio.
Más artículos del autor
Estimados lectores:
Pueden enviar sus correos de apoyo a la Hermandad “Ku-Kus-Klan de la Amargura” en el email: amarguradejaen@outlook.es , dirigidos a su Inquisidor Mayor, Ángel Contreras, felicitándolo por la ejemplar condena que han conseguido (multa de 480 euros contra Daniel Serrano, joven empleado eventualmente en la recogida de aceituna, por haber colgado en la red un fotomontaje con su cara, en lugar de la del Cristo Despojado).
Así mismo, pueden también felicitar a la Ilustrísima, reverendísima y corruptísima jueza que la dictó, Valle Elena GOMEZ HERRERA, según consta titular del juzgado Penal 2 de Jaén, a la que pueden dirigirse en el email: JPenal.1.Jaen.jus@juntadeandalucia.es
O si prefieren felicitarla personalmente, está disponible en los teléfonos: 953 96 42 6 ó 953 96 21 8.
Congratulaciones a todos los jueces y fiscales que han trabajado en este sacrílego caso. Gracias a su pútrida raigambre inquisitorial y a sus apestosos autos de fe, en España todo sigue atado y bien atado (los primeros cien emails o llamadas para felicitar a la jueza o a la Hermandad de la Amargura, serán recompensadas con una “estampita” policromada de la “Queen of Bitterness”, Jaen, the deepest Spain)
PD.- Para pedir la estampita, diríjanse por favor al email: fruiztom@gmail.com
Vamos terminar todos presos, aunque solo sea por mirar mal, es increíble el aborregamiento en el que vivimos. VERGÜENZA!!!!!