Las plantaciones de árboles no son bosques
Desde el 10.10.2011 1454 personas han participado en la protesta
Los bosques de la Tierra están amenazados y desaparecen a un ritmo desorbitado. La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la responsable de los bosques para las Naciones Unidas, investiga cada año su estado actual y la deforestación en el planeta. Actualmente cifra la pérdida de bosques en 13 millones de hectáreas por año. Cada minuto cae una superficie de bosques del tamaño de 35 campos de fútbol, por traducirlo a una típica medida que cualquiera puede imaginar.
Este hecho dramático disminuye según la FAO con la reforestación: „Además, los ambiciosos programas de plantaciones forestales en países como China, India, Estados Unidos y Viet Nam – combinados con la expansión natural de los bosques en algunas regiones – han añadido más de siete millones de hectáreas de nuevos bosques cada año", escribe la FAO en su actual informe de bosques.
La FAO define el significado de bosque para las Naciones Unidas: "Tierras que se extienden por más de 0,5 hectáreas dotadas de árboles de una altura superior a 5 m y una cubierta de dosel superior al 10 por ciento, o de árboles capaces de alcanzar esta altura in situ". (FAO, Evaluación de los recursos forestales mundiales 2010).
Con esta descripción, para la FAO cuentan también los monocultivos industriales de árboles como bosques. Cada año, tales plantaciones se expanden sobre millones de hectáreas de plantaciones, para satisfacer nuestra insaciable hambre de materias primas baratas para la industria del papel y la celulosa, y últimamente también para la fabricación de biomasa para la producción de electricidad y calor. Frecuentemente se talan bosques naturales para implementar estas plantaciones. En las áreas deforestadas se plantan con eucaliptos, pinos o acacias, casi siempre clonados (significa genéticamente idénticos) y en fila. Una catástrofe para el medio ambiente, el clima y los seres humanos.
Más informaciones sobre las plantaciones de árboles
La definición de bosque de la FAO la utilizan todas las instituciones de las Naciones Unidas, entre ellas la Convención Marco sobre el Cambio Climático CMNUCC y otras muchas, así como muchos gobiernos de todo el mundo.
Las organizaciones ambientales y sociales agrupadas en el Movimiento Mundial por los Bosques (World Rainforest Movement – WRM) exigen a la FAO y a las Naciones Unidas, que cambien urgentemente esa definición falsa de bosque. En septiembre, más de 600 científicos y expertos de todo el mundo se dirigieron a la FAO con una carta abierta. A finales de noviembre tandrá lugar en Sudáfrica la próxima ronda de las negociaciones del clima de la ONU (COP 17/CMP 7).
Por favor, apoye la acción con su firma. Haremos llegar la carta a los responsables de la definición, y usaremos el argumento para continuar haciendo campaña por una correcta definición de bosques en todas las instituciones, pues la FAO no es la única que comete estos despropósitos.
CARTA DE PROTESTA
Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación FAO
Estimados Sres.:
la FAO define “bosques” como "Tierras que se extienden por más de 0,5 hectáreas dotadas de árboles de una altura superior a 5 m y una cubierta de dosel superior al 10 por ciento, o de árboles capaces de alcanzar esta altura in situ"(*).
Según esta definición ha sido posible sustituir bosques primarios por plantaciones monoclonales de árboles de especies exóticas genéticamente manipuladas, sin que ello se considere deforestación. Esta definición también ha permitido llamar “bosques” a monocultivos industriales de árboles que se expanden a expensas de la destrucción de otros ecosistemas.
El problema se agrava en tanto otras organizaciones e iniciativas de la ONU, como la Convención Marco sobre el Cambio Climático, así como numerosos gobiernos nacionales, aplican esta definición en sus negociaciones, programas y políticas. Más aun, muchos análisis y acciones se implementan a partir de esta definición.
Consideramos que la definición actualmente utilizada por la FAO debe ser cambiada. Dista mucho de contemplar la complejidad estructural de los ecosistemas boscosos, diversos, multiestratificados y complejos funcionalmente. Tampoco refleja su capacidad de proveer servicios ecosistémicos fundamentales para la humanidad, como el mantenimiento de la biodiversidad o el almacenamiento de carbono, ni contempla el rol fundamental que juegan en la vida de las poblaciones locales. Agrupar bajo una misma definición a las plantaciones de árboles y a los bosques naturales diversos conduce a tomar decisiones erróneas. La actual definición de bosque tiene consecuencias negativas a escala local y global, en tanto legitima la expansión de los monocultivos industriales de árboles, cuyos impactos sociales, económicos, ambientales y culturales han sido ampliamente documentados y denunciados.
Los bosques tienen un importante papel en las convenciones del clima. A fines de noviembre tendrá lugar en Sudáfrica la próxima Ronda de la Conferencia del Clima de las Naciones Unidas (COP 17/CMP 7).
Por estos motivos, rechazo la actual definición de bosques de la FAO y exijo que la FAO inicie un proceso internacional de consultas que permita reelaborar completamente esta definición. La ONU y la FAO necesitan urgentemente una correcta definición de bosques.
Atentamente,
(*) FAO, Evaluación de los recursos forestales mundiales 2010, Anexo 2. Términos y definiciones utilizados en FRA 2010.
* Firma la carta de protesta. Salvar la Selva