Mascotas
Miro a mis mascotas y veo un mundo. Ya lo dije: mi gato es todo un político. Mi loro, por su parte, es un ejemplo de corrección ciudadana: repite y repite lo que alguna vez oyó, y por nada del mundo renunciaría a sus pipas o a su jaula.
Miro a mis mascotas y veo un mundo. Ya lo dije: mi gato es todo un político. Mi loro, por su parte, es un ejemplo de corrección ciudadana: repite y repite lo que alguna vez oyó, y por nada del mundo renunciaría a sus pipas o a su jaula.
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