Nuestr@s hij@s no son delincuentes
Isabel Cervera. LQSomos. Junio 2015
Nosotras, madres de esa generación de los 80, mujeres, hijas de represaliados políticos que se la jugaron en las luchas obreras contra el franquismo y que como un malogrado aborto culminaron en la “Transición”, la “democracia”, los pactos de la Moncloa, los golpes de Estado, “la OTAN de entrada no”, “la mili da asco cágate en el casco”, la insumisión y su consecuente cárcel, ¡¡aborto libre y gratuito ya!!, nosotras parimos nosotras decidimos, el plan de empleo juvenil, la patada en la puerta, la huelga general del 92, todos ellos frentes en los que luchamos y sin embargo como sórdido e inesperado final terminaron durmiendo el “sueño de los justos”.
Ese periodo de anestesia social con contribuyentes imprescindibles al efecto que se hicieron llamar “sindicatos”, “partidos”, ese momento definitivo en que seguramente sin darnos cuenta estábamos hipotecando nuestras vidas, la de nuestros hijos e hijas, nuestros derechos civiles, la libertad, la identidad como pueblo y clase y de nuevo enterrando la memoria colectiva.
Hoy nos sacude otra vez la bestia, enseñándonos sus desgarradoras y apestosas fauces, nos recuerda que el “poder” sigue en sus manos, en la de los y las jueces: los de los juicios sumarísimos, la policía (la misma que torturó a la generación de nuestros padres en aquellas siniestras comisarias teñidas de sangre obrera) y con la detención de Alfon nos vuelve a advertir con el mismo dedo artrítico del cartel del tío Sam que llamaba al reclutamiento militar que esta “medida” es ejemplarizante.
Hoy la sacudida nos da en el pecho al ver a la madre de Alfon mantener el puño en alto hasta el instante final y definitivo en que se queda sin su hijo, hoy no dormirá, pensará en los mínimos detalles, temerá lo peor, es el hijo que parió, una parte de ella que le arrancan sin miramiento. Los pelos se ponen de punta al oír: “nuestros hijos nos son delincuentes” y todas somos Alfon… y nos damos cuenta de que hemos pasado de hijas de represaliad@s a madres de ellos, los y las potenciales paradas/os, emigrantes y precarias/os… son nuestras hijas e hijos y no son delincuentes, son luchadoras/es por su libertad y su futuro, el de todos.
Posiblemente en breve tengamos que reunirnos como lo hicieron en Argentina aquellas mujeres que se levantaron para exigir la libertad de los detenidos/as y la aparición de los desaparecidos/as… mientras tanto, emociona poder ver cómo la solidaridad se hace un solo ser en forma de muralla en la iglesia de San Carlos Borromeo, la simbología de este acto tiene mucho más poder sobre las conciencias que el miedo que sus “dispositivos” policiales y rancios jueces fascistas pretenden sembrar. Mientras tanto, una vez más, tomaremos las calles.
One thought on “Nuestr@s hij@s no son delincuentes”