Pulmons, de Duncan Macmillan

De que va…

"Podría volar a Nueva York y volver todos los días durante siete años y, aún así, no estaría dejando una huella de carbono tan grande como si tuviera un hijo. Diez mil toneladas de CO2. Este es el peso de la Torre Eiffel. Estaría dando a luz a la Torre Eiffel. "

En un momento de ansiedad global, terrorismo, cambio climático e inestabilidad política, una joven pareja contempla tener un hijo. Si lo piensan demasiado, no lo harán nunca. Pero si no lo piensan bien, podría ser un desastre. Quieren tener un hijo basándose en las razones correctas pero … ¿cuáles son las razones correctas? Y ¿Qué será lo primero que se destruirá, el planeta o la relación?

La obra de Duncan Macmillan da voz, a través de dos personajes imperfectos pero profundamente humanos, a una generación para la que la incertidumbre es una forma de vida.

Una presentación…

Tener un hijo. Una simple y escueta frase que todo el mundo teme enunciar porque,

una vez hecho, ya no hay vuelta atrás posible, la tormenta se ha desatado.

Pulmons nos muestra a una pareja joven en el epicentro de esa duda crucial, desbordados por una marea de preguntas que no encuentran una fácil respuesta: ¿Es el momento adecuado?

¿Estamos preparados para ser padres? ¿Cómo afectará a nuestras vidas? El debate ya se ha instalado sobre el mundo de la pareja, poniendo sobre el tapiz las diferentes miradas de ambos sobre sus deseos y sus necesidades, tal que, por momentos, se convierte en un verdadero combate.

La cuestión sobre la conveniencia o no de la paternidad acaba conduciéndonos hacia una profunda reflexión sobre nuestros valores, las relaciones, las expectativas de futuro y el compromiso con el mundo y con nosotros mismos. Vemos a los personajes naufragar en sus propios miedos, detenidos en el fragmento de vida eterno y agotador en el que se impone tomar una decisión. Él desea un hijo, a veces con una claridad ciega. Ella está aterrada. Y así transcurren sus días, pero ellos siguen estancados en su abrumador dilema, tanto que el tiempo parece que no avanza; atrapados en su propia burbuja, en la que apenas ya consiguen respirar.

El público se convierte en rehén de esta situación, se hace partícipe de la intimidad de los

personajes, comparte con ellos sus dudas y sus angustias, espectador cercano de cada exhalación, de cada lágrima, decada gota de sudor, de cada gesto, de cada pensamiento de estos personajes, inmersos en su pequeña lucha. Porque cuando algo nos es realmente importante, por mínimo que sea, acaba por ocupar la totalidad de nuestro espacio. Nos roba la cabeza, las entrañas, nos roba el aire. Parece que jamás lograremos salir de ahí. Nos consume media vida. Y, cuando la lucha llega a su fin, el resto de la vida pasa, veloz, efímera, ignorantes de cuánto de nosotros nos dejamos en aquél momento.

Pulmons es la lupa que nos acerca a cada detalle, a cada respiración de ese momento.

Marilia Samper

Ficha técnica y artística