tReS pErSonAjEs en busca de peluquero

tReS pErSonAjEs en busca de peluquero

Por Joan Martí

Cierta evidencia anecdótica que lleva de cabeza a psicólogos, sociólogos e historiadores, avisa que puede haber algunos vínculos entre el estilo del corte de pelo, la personalidad del individuo y su capacidad de liarla parda

Hay factores como la textura, el color y la longitud del cabello que pueden influir en las percepciones de la personalidad. Por ejemplo, rizado puede asociarse con la creatividad y la pasión de cama, sobre todo si es rubio y con tirabuzones, mientras que el liso puede verse conservador y profesional, como de juez, inspector de hacienda o funcionario de la Seguridad Social cuando, estando ya en el mostrador, te echa el aliento de su almuerzo y el carajillo mientras te exige que pidas cita previa y vuelvas otro día.

Los cortes de pelo corto, a menudo se asocian con personas seguras, independientes y prácticas que intentan ahorrar en peluquería y en champú, y se echan un “0” para ir menos a la hair-cut y gastárselo en otros vicios más placenteros.

Los cortes de pelo con flequillo suelen indicar timidez, misterio o un deseo de ocultar algo de matute, que les produce una inseguridad culpable, tambaleante como el propio flequillo que suelen retocarse con la mano una y otra vez sin descanso.

Los cortes de pelo teñidos, pueden ser una forma de expresión personal, creatividad o un deseo de llamar la atención, como si sus amigos y familiares no les quisieran lo suficiente, lo cual no siempre es cierto, aunque la convivencia cotidiana a veces aburre y produce esa impresión. Normalmente no es así, pero el afectado/a no lo sabe y se exibe por ahí con la cabeza como si fuera un frutero. (Tranqui, que todos te queremos)

Los cortes de pelo largos pueden indicar creatividad, sensibilidad y espíritu libre, o bien que el propietario de la cabeza anda mal de efectivo y se resiste a que le claven 20 o 30 euros.

Los cortes de pelo asimétricos, sugieren un signo de rebelión, individualismo y un deseo de destacarse que, superado el nivel del sentido del ridículo en un 150/100, llevan al tipo o a la tipa a la idiotez y, eventualmente, a poco que la democracia lo permita, a coger el gobierno de algún país, cuya población magnetizada en la idiotez del personaje sigue al tipo del tupé como si fuera la misma vara de Moisés…

Afortunadamente la historia política, generosa como siempre, nos ofrece ejemplos de estos últimos.

– Personajes caricaturizados:
Boris Johnson. Urdidor del Brexit y de la guerra de Ucrania con sus 450/500 mil muertos.
Javier Milei. Telepredicador creador del teatro argentino “Pan y Circo ” y célebre autor del copia y pega, ¡¡Carajo!!.
Donald Trump. Látigo de inmigrantes y “sobador” de scorts, secretarias y del viejo Biden.

Más artículos del autor

Comparte este artículo, tus amig@s lo leerán gratis…
Mastodon: @LQSomos@nobigtech.es Telegram: LoQueSomosWeb
Twitter: @LQSomos Facebook: LoQueSomos Instagram: LoQueSomos

LQSomos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Nos obligan a molestarte con las "galletitas informáticas". Si continuas utilizando este sitio aceptas el uso de cookies. más información

Los ajustes de cookies de esta web están configurados para "permitir cookies" y así ofrecerte la mejor experiencia de navegación posible. Si sigues utilizando esta web sin cambiar tus ajustes de cookies o haces clic en "Aceptar" estarás dando tu consentimiento a esto.

Cerrar