Brasil. Acquario, polémico proyecto en la orilla del mar de Fortaleza
Plebiscito popular podría decidir sobre construcción de polémico proyecto en la orilla del mar de Fortaleza.
En Fortaleza, en el Estado de Ceará, la posibilidad de construcción de un megaproyecto arquitectónico en el litoral de la ciudad viene generando polémica y mucha movilización. Propuesto por el Gobierno del Estado, el Acquario Ceará enfrenta el rechazo de movimientos sociales, habitantes de la región y ambientalistas.
Entre los principales motivos están la no realización de licitación para elegir a la empresa responsable del emprendimiento, la ausencia de un plan de negocio mostrando cómo el Estado va a saldar la deuda y la elección sin criterios de la empresa para proyectar la obra. Además, la población cearense fue tomada de sorpresa con una mega-obra que no había sido divulgada como plan político del gobernador Cid Gomes (PSB/CE).
A partir de esta colección de problemas surgió la iniciativa del concejal João Alfredo (PSOL/CE) de solicitar un plebiscito vinculante, que escuche la voz de la población sobre la concreción o no de este emprendimiento. La intención del concejal es que, junto con las elecciones municipales, que se realizarán el siete de octubre de este año, los electores y electoras puedan decidir si quieren o no el proyecto instalado en la Playa de Iracema.
"El objetivo es aprovechar la logística creada para las elecciones municipales y realizar el plebiscito. Para ello, basta incluir en la urna electrónica una tercera pregunta sobre el acuario. La intención es que el plebiscito sea vinculante y que las obras del Acuario queden suspendidas mientras el resultado con la decisión de la población no salga”, esclarece João Alfredo.
Julio Lira, sociólogo, activista cultural e integrante de ‘Quien diera ser un pez', movimiento suprapartidario que surgió para cuestionar la obra del Acuario, apoya la idea del plebiscito y sostiene que la población necesita ser informada y estar más comprometida en los procesos que involucren transformaciones en la ciudad y en el Estado.
"El plebiscito es una herramienta de democracia directa que debería ser más usada. La sociedad necesita estar involucrada e informada, pues es ella la que va a pagar los costos del Acuario y, sin embargo, está siendo excluida. El Gobierno sorprendió a la población con una idea personal, que no fue discutida correctamente, pues no hubo momentos de debate transparente”, critica.
Además de la ausencia de licitación, de un plan de negocio mostrando cómo el Estado va a saldar la deuda y de la elección sin criterios de una empresa para proyectar la obra; los gastos previstos para a construcción del Acuario se estiman en 250 millones de dólares, con un mantenimiento mensual en el orden de 1,5 millón de reales. De acuerdo con João Alfredo, sólo la maqueta de la obra costó un millón. Además, existe la inviabilidad urbanística y los problemas sociales pendientes en el Estado.
"La mitad de la población cearense no tiene acceso a la red de saneamiento. En el interior del estado, los sertanejos están sin agua. La construcción también puede llevar a la remoción de la comunidad de Poço da Draga. La obra tiene un costo muy alto y va a ser pagada con dineros públicos. Además, no es sustentable económicamente y su utilización nunca va a cubrir los gastos”, denuncia.
Para informar y llevar a la población a pensar en estos problemas, movimientos como ‘Quien diera ser un pez' están realizando actividades con la población. Además de las movilizaciones diarias en las redes sociales, todos los sábados, a las 16h, ocurre la ‘Inundación OcupePI' –frente al terreno destinado al Acuario– con debates sobre el emprendimiento, los rumbos de la ciudades y otras formas de fomentar el turismo en el Estado.
El movimiento está realizando también una campaña de recolección de firmas contra la construcción del Acuario. Los interesados/as en apoyar pueden firmar aquí: www.peticaopublica.com.br/PeticaoListaSignatarios.aspx?pi=quemdera.
También historiadores, investigadores y especialistas en patrimonio cultural están involucrados en esta lucha para alertar a la población y a los demás interesados en el asunto, para que redacten una carta técnica mostrando las deficiencias técnicas del proyecto del campo de la arqueología, del patrimonio cultural, del licenciamiento ambiental y de la probidad administrativa.
Hasta el momento, las obras están paralizadas, esperando un parecer del Instituto del Patrimonio Historial y Artístico Nacional (IPHAN), que va a ser divulgado en junio. El embargo tuvo lugar después de denuncias de irregularidades en la Licencia de Instalación del Acuario, concedida por la Secretaría Estadual de Medio Ambiente (Semace). El documento despreció la necesidad de realización de estudios arqueológicos, lo que interfiere con la posibilidad de conceder una licencia ambiental.
Acquario Ceará
De acuerdo con el proyecto del acuario, el emprendimiento va a tener 21.500 m² de área construida y 15 millones de litros de agua en sus tanques de exhibición. El área elegida ocupa toda la extensión frente a dos muelles portuarios históricos. El lugar también es identificado como parte del área donde Matias Beck se estableció el año 1649 y donde fundó la ciudad de Fortaleza. La obra es del Gobierno del Estado y está siendo realizada por medio de la Secretaría Estadual de Turismo (Setur), con financiamiento de un banco estadounidense.
