El 15M y la alternativa unitaria, democrática y de clase
Quedan pocos días para la conmemoración del 2º aniversario del nacimiento del 15M. La mejor celebración que se le podría brindar a toda la ciudadanía que se ha movilizado, y a los que lo hicieron en situaciones adversas en todo el Estado Español, sería el compromiso de crear una alternativa política unitaria, democrática y de clase, que ofreciera una alternativa política real al bipartidismo PP-PSOE, sus comparsas CIU-PNV-CC, y a sus políticas neoliberales al dictamen del FMI, el BCE y la UE.
Las movilizaciones desarrolladas durante estos dos años, en las que el impulso y experiencia del 15M ha sido fundamental, pese a sus elevadas participaciones ciudadanas, han sido insuficientes para modificar las políticas neoliberales, aunque en algunos casos se han frenado fruto de esas luchas.
La elevada participación ciudadana no nos puede cegar. La gran mayoría de la ciudadanía sigue sin movilizarse. La brutal “doctrina de shock” impuesta en estos años, con un paro superior a los 6,2 millones, con la generalizada precarización laboral, con los asfixiantes recortes sociales en la enseñanza , la sanidad, y de todo tipo, con los criminales desahucios, y los cada vez mayores recortes democráticos, dificultan seriamente la participación de un sector importante de la ciudadanía.
Esa situación ha creado también una gran desconfianza en la política en la ciudadanía, y en particular en sectores de la juventud, potenciada en gran medida desde los grandes medios de manipulación de masas con el “todos son iguales”, que dificulta la movilización de dichos sectores.
Ante esta realidad, es imprescindible crear una alternativa política unitaria, democrática y de clase, con un programa nítidamente antineoliberal, con la firme voluntad de combatir las políticas neoliberales causantes de la situación actual, y ganar a la mayoría de la sociedad para esa alternativa.
Para cambiar la actual situación política, y crear una nueva correlación de fuerzas en nuestra sociedad, solamente es posible desde la unidad, de lo contrario la frustración de amplias masas se agudizará, y se consolidará la hegemonía política de la fuerzas neoliberales.
España dispone de un sistema electoral tan desproporcional, injusto y antidemocrático, que solo desde una fuerte fuerza unitaria es posible cambiar la actual situación, de lo contrario, se seguirá permitiendo que una minoría pueda seguir gobernando con mayoría en el congreso, fruto de la ley electoral, como ocurre en la actualidad.
Además, la unidad genera un impulso multiplicador, que puede atraer a grandes masas hoy situadas en la desconfianza, y en el “a ver que pasa”.
La alternativa unitaria tiene que ser con la incorporación de todas las organizaciones, plataformas e individualidades que han hecho posible las movilizaciones, y han mostrado públicamente su rechazo a las políticas neoliberales, sin exclusiones, ni marginaciones a priori.
En las asambleas y movilizaciones previas al 15M sería importante que se acordaran resoluciones de apoyo a la alternativa unitaria, y que el acuerdo unitario de las asambleas del 15M fuera el compromiso firme de avanzar en la unidad.
Las elecciones europeas del próximo año pueden ser un inicio y una prueba importante para la unidad.