El escorpión, la rana. Y el futuro de YPF…
Desde fines de febrero, en que la propia Presidenta de la nación hizo públicas las ruinosas cifras gastadas en importar combustibles (mientras los privados continúan exportando el cada vez menor extraído por ellos) – alrededor de 10.000 millones de dólares en el año 2011. Se sabía que tal como se viene desde los ´90, es imposible continuar… (Y además: Que con menos de lo que se está malgastando en un año – unos 8000 millones – se recupera la totalidad del paquete accionario de la empresa…)
Aparecieron entonces los Gobernadores de las Provincias petroleras tomando el control de explotaciones secundarias y/o en su período de baja indeclinable de sus niveles de producción (y por lo tanto de su rentabilidad). ¿La constitución menemista les dio parte para trabar la renacionalización?
Aparecieron además diversas versiones acerca de la voluntad del Gobierno nacional de tomar el control sobre la empresa: Primero presionando sobre los socios "nacionales" para que estos votasen a favor de la inversión de las enormes utilidades de la firma en el 2011… Y luego con un conjunto de versiones encontradas, que incluyeron en algún momento el lanzamiento de un Frente Nacional por la recuperación de la energía nacional, que nació coartado en su desarrollo (dicen loas malas lenguas que por "sugerencia" del propio oficialismo – amigo de la mayoría de sus miembros). La realidad, lo confirmado, es que los Esquenazi en el primer caso votaron lo que sus intereses le recomendaban: Embolsarse los dividendos (dicen, que para poder pagar lo que deben aún por la compra de acciones sin un $ que habían hecho, por expreso empuje y gestión del Ejecutivo…).
Pero a pesar de esta respuesta tan natural en un empresario (recordar, por ejemplo, cuanto invirtieron los Sirigliano en TBA en mantener en buen servicio a los ferrocarriles encargados a su administración), se continúa hablando permanentemente de incorporar o mantener capital privado dentro de la empresa a toda costa… Y hoy mismo, que se estaría comprando una parte minoritaria, dejándole a Repsol el control del principal paquete accionario, es decir, dejándole la capacidad de decisión final… ¿Incorporándose para hacer de “Estado bobo”?
Pareciera que la Presidenta no conoce la fábula del escorpión y la rana…
Se las cuento:
Durante una gran inundación en nuestro norte, un escorpión se hallaba en la última puntitas de una rama que aún sobresalía de las aguas del desbordado río… Y por allí pasó una ranita nadando alegremente…
El escorpión entre sollozos, clamando por su vida le pidió ayuda a la ranita. Y la ingenua ranita aceptó llevarlo hasta la orilla…
Cuando allí llegaron, el escorpión clavó su aguijón matando a la pobre ranita. Y mientras esta entre estertores, le preguntaba porque lo había hecho, tan luego a ella, que lo acababa de salvar. Este le dijo impasible:
"Está en mi naturaleza"…
El capital también tiene "en su naturaleza" la máxima rentabilidad. Y por lo tanto, como demuestra Alfredo Zaiat en su clarísima nota "Burguesía fallida", no es esperable que invierta a largo plazo y con alto riesgo.
Y siendo de tal carácter la inversión de la explotación petrolera… Deberían tomar nota y actuar en consecuencia. Sin esperar que ese comportamiento de sus socios preferidos los termine matando… (A ellos y/o a su "modelo")
¡Hay que dejar de "hacerse los ranas” y renacionalizar YPF sin más demoras!…
