El Frente
Compartimos el dolor por las víctimas del atentado de París, un atentado más obra de la irracionalidad humana a la que nos llevan las actuaciones de dirigentes y grupos de poder occidentales: G-20, FMI, OTAN… La desolación que se siente en París es la misma que se siente en muchos lugares del mundo, y de forma continuada.
Jesús Gómez Gutiérrez*. LQSomos. Noviembre 2015
No es lo mismo matar que no matar
No, no es lo mismo matar que no matar,
aunque se mate con la voz del que no mata,
con su voto, con su fe, con su oído en un púlpito
o su mano en el mando de un televisor,
no, no es lo mismo,
como no es lo mismo arrasar ciudades y destruir países
que limitarse a aplaudir que los arrasen y destruyan,
quizás a pedirlo incluso, frecuentemente a pedirlo
porque el poder ha dicho que la democracia
la patria
un dios
esas cosas que hacen la narcosis de la mayoría
piden sangre.
No, ni siquiera así es lo mismo,
y tampoco lo es defenderse que atacar
ni ser civil que ser soldado, general, presidente, rey,
hasta la guerra tuvo una vez sus normas,
pero ya no las tiene,
no, ya no las tiene,
y nadie puede creer que no lo sabe
cuando no hay una noche sin cientos de cadáveres
que, eso sí, no merecen indignación
aflicción
una vulgar mirada
esas cosas que nos hacen ser humanos
incluso después de elegir no serlo.
Atentados yihadistas en París: ¡Ja,ja, je,je, ji,ji!
http://11mcartasaldirector.blogspot.com.es/2015/11/atentados-yihadistas-en-paris-jaja-jeje.html
¡Qué horror, sí!
Pero acuérdate de España, aquellos años de los bombardeos fascistas sobre nuestras ciudades, mientras los gobiernos “democráticos” miraban hacia otro lado…Acuérdate del pueblo armenio, no olvides el abandono a su suerte del pueblo kurdo; no olvides el dolor de ese pueblo palestino y las masacres de Shabra y Chatila,no olvides los campamentos saharauis, no olvides los bombardeos continuados sobre Vietnam. No olvides que, aquí, no tan lejos de donde tú vives, se fabrican armas y munición que sirve para
exterminar a las gentes, de la raza y color que sea. No olvides Hiroshima, Yakarta, Chile, Grecia, Argentina, Brasil, Bolivia, Perú y Nagasaki, ni Libia, ni… No olvides, hermano, no olvides.
Nos equivocamos.
El odio no se borra con el odio, ni la guerra con la guerra.
La siembra no es buena y el fruto tampoco lo puede ser.
Diálogo, amor y respeto.
La paz no puede ser fruto de la imposición.
No hay buenos y malos. Todos somos un poco de todo.
Hemos de usar las armas de Gandi.