¡Hasta siempre compañero!
Isabel Cervera*. LQSomos. Abril 2017
In memoriam Carlos Slepoy
Le conocí el 1 de agosto de 2016. Quería consultar acerca de la viabilidad de sumarme a la Querella Argentina como sobrina-nieta de un Capitán Republicano fusilado en 1942 por el franquismo. Me llevó hasta él un compañero de “La Comuna” y nos recibió en el hospital donde permanecía ingresado, con una humildad solo comparable a la dignificación humana que en él habitaba en medio de la enfermedad, incluso sonriendo.
Después de saludarle se empeñó en leer los documentos que traje conmigo sobre el familiar asesinado, concluyó: “esta historia es muy importante, envíame un relato y en Septiembre presentamos la denuncia, ha de salir en prensa, hemos de convocar a los medios, tendrá repercusión…”. Y de repente, algo que para mi era un caso mas, tras su opinión experta, el aval de su trayectoria vital, esas palabras multiplicaron su relevancia.
El proceso de enfermedad le impidió acudir a la presentación de la denuncia en la Embajada Argentina finalmente en Octubre, pero el trabajo impulsor de Carlos ya había iniciado su camino: le hice llegar el comunicado y él lo corrigió, enviándolo a medios diversos. Efectivamente, el caso de mi tío-abuelo fusilado junto al caso del compañero que presentó denuncia en el mismo acto por torturas y prisión tuvo mucha repercusión en prensa.
No fui yo, no fuimos nosotros, sino la convicción y el empuje de uno de los mayores dignificadores de vidas que he conocido que le dieron un peso especifico y sustancial, sacando de lo común una historia entre miles de este crimen fascista llamado franquismo.
Comprendí que cada caso es una pieza vital de ese puzle inacabable por inmenso, de ese tramo negro y siniestro de la historia, y que no debe faltar ninguna hasta completarlo.
Con estas líneas no quiero explicar que conocí a Carlos Slepoy, sino algo muchísimo mas importante que Carlos Slepoy desde su humano discurso y razonamiento despertaba conciencias. Mi tío-abuelo estuvo en el anonimato hasta que Carlos le dio el valor de la historia. Miles de tíos, padres, madres, hermanos continúan a la espera de convertirse en memoria colectiva, llevemos sus nombres y sus vidas con la importancia que se merecen ante la Justicia Argentina.
Nos hacías mucha falta todavía.
Gracias y ¡¡hasta siempre compañero!!
* Activista País Valencià y miembro de LoQueSomos
Más artículos de la autora
– A tu memoria Carlos Slepoy: Justicia Universal
– Entrevista a Carlos Slepoy. “No hay posibilidad de justicia en España”
– Querella Argentina-LoQueSomos