Los colegios de médicos y el Opus Dei

Mientras, en la zona rebelde se va  configurando la nueva estructura colegial, comenzando con una orden del Gobierno General  de 29 de julio de 1937, desarrollando mas su estructura por otra orden  desde  Valladolid el 18 de  enero de 1938, en donde se dice en el apartado

1º:”…La organización médica  española tendrá como base el Colegio de médicos , que existirá  uno en cada provincia…al cual deberán pertenecer todos los doctores y licenciados en Medicina , domiciliados en la provincia …”

2º “…El Consejo General será el organismo superior representativo para toda España y dependerá del Gobierno General…

Posteriormente,  por orden de 21 de octubre de 1939 se dispone que la Agrupación Profesional de Médicos de Sociedades de Madrid pase a formar parte del Colegio oficial de Madrid, extendiéndolo a todas  las demás  Agrupaciones de esta clase en España.

Una orden del 30 de octubre de 1940 fija las normas para el funcionamiento  del Consejo General de los Colegios de médicos…”, para “añadir a la orden de 18 de enero de 1938 sobre la reorganización  provisional de la clase médica…”

Como podemos observar, la creación de dicha institución médica  nace desde  la ilegalidad, dado que no se puede  aplicar una legislación como la de creación de dicha estructura colegial el 18 de enero de 1938  a toda España, pues  en esas fechas todavía las grandes ciudades como Madrid, Valencia y Barcelona seguían siendo republicanas.

Pero sobre esa ilegalidad, se irá construyendo todo el entramado legislativo posterior, hasta llegar a  nuestros días.

La OrganizaciónMédicaColegial de España,  (OMC), como máxima institución que representa a los médicos colegiados de España, esta  formado por el Consejo General de los Colegios de médicos y los Colegios de médicos,  y  asume como uno de sus objetivos prioritarios la promoción  y desarrollo de la deontológica profesional y contempla en sus estatutos un Código de Ética y Deontología Médica. El incumplimiento de estos principios constituye falta disciplinaria.

Casualmente, los miembros de dicha  Comisión, van a ser  parte de los profesores que van a  impartir el curso “Experto en ética médica” organizado conjuntamente entre la Fundación Ortega-Marañón y la Fundación OMC.

Entre los objetivos resaltamos los siguientes:

Conocer los fundamentos éticos de las principales cuestiones de la práctica médica.

Desarrollar habilidades para el análisis de cuestiones éticas.

Adquirir experiencia en los procedimientos y actividades desarrolladas por las Comisiones de Deontología.

Entre los temas, creo que estos son de suma importancia:

La objeción de conciencia.

Cuestiones éticas al comienzo de la vida.

Cuestiones éticas al final de la vida.

Funciones y actividades de  la Comisión de Deontología  en  un Colegio de Médicos.

En el Código de ética y deontología médica de la OMC,  se indica en el capítulo VI sobre la reproducción humana:

“… el médico es un servidor de la vida humana. No obstante cuando  la conducta del médico respecto al aborto se lleve a cabo en los supuestos legalmente despenalizados, no será sancionado  estatutariamente…”

“…el médico tiene el derecho a negarse por razones de conciencia a  interrumpir un embarazo…” “Deberá comunicar al Colegio de Médicos su condición de objetor de conciencia…”

La cuestión, es que todos estos temas tan “delicados” y que tanto debate producen, van a  tener el enfoque del director de dicho curso  el Dr. Rogelio Altisent,  profesor de bioética de la facultad de medicina de Zaragoza y expresidentes de la Comisión Central de Deontología de la OMC y miembro del Opus Dei  que ya dejo claro sus opiniones sobre el aborto  desde su puesto en la OMC:

“…Hay que actuar con energía, pues se puede trasladar a la sociedad  de que el medico puede certificar lo que sea… La defensa de la vida  del no  nacido  no es una cuestión religiosa  ni de partidos, sino que es una cuestión de puro respeto  al orden natural  de la vida humana…”

En la misma sintonía respecto al aborto,  se muestran otros profesores de dicho curso  como el Dr. Enrique Villanueva, Catedrático de  medicina legal de la Universidad de Granada, y  Juan José López Ibor, catedrático de psiquiatría  de la Universidad Complutense  y de la Fundación  Ortega –  Marañón.  Otro profesor también catedrático de Historia de la Medicina de la Complutense y de la Fundación Ortega – Marañón, el Dr. Diego Gracia,  fue discípulo del profesor Laín Entralgo,(reconocido franquista) al que sustituyó en su cátedra, y que se considera un hombre muy religioso, habiendo pertenecido a la orden franciscana de los capuchinos.

En fin,   por lo que se ve, dicho curso va a tener un sesgado enfoque  conservador en los temas sobre el aborto, la eutanasia, etc., lo que hace que se disipen  las dudas que  tenía de la proximidad de la Fundación Ortega y Gasset  a los círculos del Opus Dei, como los que rodean al CSIC y la Residencia de Estudiantes, con los que mantiene estrechas relaciones.

En cambio, que la OMC  este infiltrada por personas del Opus Dei, no me extraña  en absoluto, ahí si que no tengo ninguna duda, pues  cuando en el año 1939 mi abuelo el Dr.  Luís Calandre Ibáñez, fue  depurado por el Colegio de Médicos de Madrid, el juez instructor nombrado por dicho Colegio, fue el Dr. José Luis Rodríguez Candela, miembro también del Opus Dei, y que condenó a mi abuelo por:

“haber salvado demasiado rápido a los enfermos del hospital de Carabineros” (se ve que desconocía el primer precepto del código deontológico  médico, el juramento de Hipócrates).

La condena tuvo como consecuencia la retirada del carnet de médico de dicho Colegio,  y la prohibición de ejercer la medicina durante cinco años en la provincia de Madrid, además de  no poder ejercer cargos públicos y de confianza durante el resto de su vida.

No contento el  Colegio de médicos y  dicho juez del Opus Dei, recurrieron  el 15 de abril de 1940 la sentencia absolutoria del  Consejo de Guerra permanente  del 30 de marzo de 1940, consiguiendo que la anularan y comenzara un nuevo juicio sumarísimo que acabó condenándole a 6 años de cárcel.

Actualmente  he  solicitado al Tribunal Supremo, sala de lo militar, la anulación de dicha sentencia condenatoria, por lo que en el caso bastante probable de que se anule, solicitaré a dicho Colegio de Médicos de Madrid, que presente oficialmente sus excusas y las indemnizaciones reglamentarias por todo el daño económico y moral infringido a mi abuelo .

Realmente , sería muy positivo que desaparecieran esos colegios de médicos y la  OMC franquistas, como es probable,  con  la futura nueva Ley de  de Servicios Profesionales, en donde no sería ya obligatorio  para los médicos colegiarse  (como ya ocurre en comunidades como Canarias,  Asturias,  Andalucía, Extremadura),  y que desarrolla una  resolución del Parlamento Europeo, aunque parece,  por  otro lado, que la propia Comunidad Europea  ha excluido a la Sanidad.

Por supuesto la OMC ve en esta Ley una amenaza, y por ello esta luchando contra ella con todos sus medios, como la inclusión de los contenidos de la Ética medica  y Deontología  en los planes de estudio  de las Facultades de Medicina.

Pero  con el enfoque reaccionario y obsoleto  que tiene de su código deontológico, respecto a temas como el aborto, la eutanasia, etc.,  estando sus  planteamientos  más cerca de los postulados de Ratzinger  y del Opus Dei, que de  la sociedad, es mejor que no sean ellos los que los controlen.

Bibliografía complementaria:

Documentos de sentencias del Dr. Luis Calandre

El curso  de la Fundación Ortega y la OMC (no confundir con la organización mundial del comercio