¿Sueñan los trabajadores con ovejas liberales?

¿Sueñan los trabajadores con ovejas liberales?

Por Matías Feito*.

“-¿Va a hacer una prueba de empatía?
¿Dilatación capilar al sonrojarse?
Fluctuación de la pupila.
Dilatación involuntaria del iris.

– La llamamos prueba Voight-Kampff”

Blade Runner (versión 1982 y 1992)

La construcción de un partido del orden requiere de férreos grados de alineamientos entre los agrupamientos políticos de mayor caudal electoral. ¿Están las condiciones óptimas para su recreación en la Argentina? Los negocios económicos y políticos de “pelotones” de diferentes fracciones del capital financiero así lo requieren: un “orden”, su “orden”.

Llega tarde al trabajo y el semáforo está en verde, ¿cruza?

En el desenvolvimiento del movimiento de diciembre de 2001 (Argentina) se construyeron aperturas y clausuras desde las luchas políticas y sociales. Entre aquello emergente, encontramos tres formas de poder: insurrección popular, guerra social y golpe de mano-golpe de estado. Hoy ese periodo continúa abierto y sin resolución.

Su jefe maltrata y amenaza con despedir a una compañera de trabajo, ¿qué hace?

En particular aquella forma de poder que llamamos “guerra social” en el sentido de saqueo a la mayoría de la población, se presenta como un “doble yugo” (unas y otras fracciones de capital), asfixiando alianzas eficientes y políticas efectivas desde los intereses del campo del pueblo. En la imposibilidad de construir fuerza en unos, está el corazón del despliegue en otros. La fractura “arriba” es un prerrequisito para resolver las imposibilidades de “abajo”.

Encuentra a una persona que conoce siendo golpeada y detenida por un policía, ¿qué hace?

Entre-construcciones, entre-organizaciones, entre-clases. El espacio vacío donde una alianza es posible. La construcción de la posibilidad está dentro de una política de salida. Lo posible se construye a fuerza social, a alianzas políticos y sociales contra otra alianza. ¿Cuánto dura la alianza? Dar cuenta a sí mismo (a nuestro propio grado de unidad) que lograr el objetivo de una alianza nos afecta y metamorfosea como sólo lo puede hacer una primera victoria. La finitud de una alianza eficiente nos asoma al dilema en cómo y con quiénes se construye una victoria.

Llega a una cena. Se incorpora a la conversación y están comentando sobre la importancia de una “reforma laboral”…

En el otro extremo de la escala, atravesando un “momento stenterello”, sin guion entre aliado adversario, “todos son mis enemigos”. El autoengaño está a la vuelta de la esquina, no se hace otra cosa que construir debilitamiento. La convocatoria electoral todavía no sabemos qué forma puede asumir desde la perspectiva de los intereses de la clase obrera y el campo del pueblo.

En la organización en la que participa encuentra pruebas de grave corrupción y fraude, el responsable es su mejor amigo. ¿Lo encubre, lo denuncia o lo resuelve de otro modo?

No existe espacio entre alianza-enfrentamiento. La juntura entre-confrontaciones son impermeables al concepto liberal de contrato, vamos al encuentro armados-desarmados en movimiento ponemos el cuerpo realizando-difiriendo lo que hay que hacer. Lo nuevo, lo viejo y lo morboso, cada quién está convocado permanentemente a alinearse.

Su hijo está implicado en una golpiza a un compañero de colegio que lo deja al borde de la muerte. ¿Qué hace?

La operación de cierta practica revisionista en la historia y lo político: buscar lo liberal en el ojo ajeno, poner la barra entre ellos y nosotros para salvarnos el pellejo sin que nos toque lo criticado. La demarcación justifica autoridades políticas desapercibiendo lo social de la alianza que las sostiene. Una operación ideológica donde nos excluye del comportamiento que decimos criticar. Así el autoengaño nos debilita en el propio frente, no percibiendo el frente en la alianza.

¿Qué aspectos considera para evaluar un buen gobierno?

No se trata de conceptualizar cualquier hecho social desde la “criminalización” del campo del régimen, sino de hacer observable las formas de lucha del campo del pueblo. Ahí donde la rebelión se transforma en conocimiento, ahí donde la lucha devela las tecnologías políticas más sofisticadas como también la artesanía histórica que las supera.

Se siente aterrorizado, ¿en qué lugar buscaría protección?

En Blade Runner (versiones 1982 y 1992), Rick Deckard después de una larga prueba con muchas preguntas devela que Rachael es “replicante”. Ella se retira y quedan solos en la escena Deckard y el Dr. Tyrell (dueño de la Corporación y creador de replicantes). Deckard le pregunta: “- ¿Cómo puede no saber lo que es?”, el Dr. Tyrell le responde “- Comercio, es nuestro objetivo aquí”.

Y usted, ¿dónde se alinea en la convocatoria diaria que realiza el campo del régimen?

Nota del editor: Blade Runner es una franquicia de medios neo-noir y de ciencia ficción originada a partir de la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (1968) de Philip K. Dick. Ubicada en un hipotético futuro distópico, gira en torno al personaje de Rick Deckard y un tipo de androide conocido como replicante.

* Investigador del Centro de Investigaciones en Ciencias Sociales (CICSO), Argentina, colaborador del CLAE.

Síguenos en redes sociales… Mastodon: @LQSomos@nobigtech.es Diaspora*: lqsomos@wk3.org Telegram: LoQueSomosWeb Twitter: @LQSomos Facebook: LoQueSomos Instagram: LoQueSomos

LQSomos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Nos obligan a molestarte con las "galletitas informáticas". Si continuas utilizando este sitio aceptas el uso de cookies. más información

Los ajustes de cookies de esta web están configurados para "permitir cookies" y así ofrecerte la mejor experiencia de navegación posible. Si sigues utilizando esta web sin cambiar tus ajustes de cookies o haces clic en "Aceptar" estarás dando tu consentimiento a esto.

Cerrar