Tasio, a 40 años de una película única
Por Iñaki Alrui*
Se va a cerrar el año en esta parte del occidente, parte en la que me toca, y yo con varias cosas pendientes. Imagino que tiene que ver con la edad, en la que uno puede contar historias con la lejana visión que nos va dando el tiempo.
En este 2024, se han cumplido cuarenta años del estreno, septiembre de 1984, de Tasio, una película que me impactó por su poesía rural y entrañable de la simplicidad, cuarenta años y sigue teniendo el mismo hechizo para fascinarnos que el primer día.
Supuso el estreno en el mundo del largometraje de su director, Montxo Armendariz, quien con exquisita sensibilidad filmó la vida de un carbonero que ama tanto la naturaleza como su libertad, una combinación de vida silenciosa en el monte y de convivencia en la tradición del mundo rural, un recado vivo para el mundo de hoy, cargado de ecología y armonía con la vida.
“Suele decirse que el tiempo es el crítico más riguroso, porque termina colocando aquello que hacemos o decimos en el lugar que le corresponde”. Montxo Armendariz.
Una narración visual que tuvo como base la vida de un personaje real, Anastasio Ochoa, un carbonero que conoció Montxo Armendariz en 1981 y le inspiró para realizar un documental sobre aquel oficio a punto de desaparecer. Anastasio nos dejó en 1989, cuando falleció en el pueblo en el que nació y vivió, Zuñiga, una pequeña y preciosa localidad de Tierra Estella en Navarra. Tasio —Anastasio— construyó a los dieciséis años su primera carbonera en el monte, oficio que mantendría toda su vida, combinado con la caza y pesca, siempre como furtivo, por la supervivencia y en armonía con las normas de la vida en el entorno natural. Un resistente en pleno inicio del vacío que provocó el éxodo rural de las décadas 50 y 60 hacia las ciudades en la larga noche del franquismo.El rodaje de “Tasio” se realizó en la Sierra de Urbasa, en Navarra, a donde el director se trasladó con los actores protagonistas, Patxi Bisquert, Amaia Lasa (que ese mismo año rodaron juntos “La conquista de Albania”), Nacho Martínez, con “La idea era convivir con la gente y, lo más importante, analizar cómo hablaban, ensayar, hacer grabaciones para pillar el tono…”, adaptándose y mimetizándose sobre el terreno en la forma de hablar y de sentir de la gente del lugar, para reflejar en el largometraje ese entorno rural auténticamente vasco, sin embellecer poéticamente y al mismo descubriéndonos la gran belleza de los paisajes, de las expresiones, de las costumbres, lo real y cotidiano.
Tasio, íntegro, directo, sincero, honrado para sacar su familia adelante, solidario con la vecindad, fiel siempre a sus principios, amarrado a su tierra en medio de una naturaleza exuberante.
Armendariz nos regaló hace cuarenta años esta maravilla cinematográfica, enlazando sencillas imágenes entre el bosque y el hogar, entre la fiesta popular y la carbonera. 95 minutos de metraje llenos de emociones contenidas, cargados de expresivos silencios y cortos diálogos tan expresivos como las miradas.
“Quise contar la historia sin la verborrea con que actualmente se quiere explicar todo. Tasio nunca dice por qué hace las cosas. Preferí sugerir, mostrar situaciones que parecen cotidianas y de las que el espectador debía sacar su propia conclusión. Esto era un riesgo al hacer la película y creo que fue la razón fundamental por la que tardé tanto en encontrar productor. Pero creo que esta narrativa responde a lo que entiendo por cine: no se puede explicar con palabras lo que no se puede decir con imágenes. Ante todo, creo en la capacidad expresiva de la imagen.” Montxo Armendariz.
Cuarenta años después, Tasio sigue en el monte, contemplando desde la distancia nuestra locura de vidas frenéticas y muchas veces depresivas.
Dirección: Montxo Armendáriz.
Guion: Montxo Armendáriz, Marisa Ibarra.
Actores: Patxi Bisquert (Tasio adulto), Isidro José Solano (Tasio joven), Garikoitz Mendigutxia (Tasio niño), Amaia Lasa (Paulina), Nacho Martínez (hermano de Tasio), José María Asín (amigo de Tasio), Enrique Goicoechea, Paco Sagarzazu, Elena Uriz.
Música: Ángel Illarramendi. Fotografía: José Luis Alcaine.
Producción: Elías Querejeta P.C., RTVE.
* Miembro del Colectivo LoQueSomos. Otras notas del autor
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