Tres años ante Exteriores por los presos políticos saharauis, tres años de silencio
Por Alfonso Lafarga*
Piden al ministro de Exteriores que actúe ante Marruecos por los presos políticos saharauis, condenados en juicios sin garantías y con confesiones obtenidas bajo tortura. Primero Arancha González Laya y ahora José Manuel Albares han guardado silencio sobre los activistas saharauis encarcelados
El Movimiento por los Presos Políticos Saharauis (MPPS) lleva tres años concentrándose ante la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación para pedir que España, potencia administradora del Sáhara Occidental, intervenga ante Marruecos para conseguir la libertad de los presos políticos saharauis. El silencio ha sido la única respuesta.
Los lunes, el MPPS se manifiesta en la Plaza de la Provincia, de Madrid, a las 12.30 h, para reclamar a Exteriores que actúe por los presos políticos saharauis, condenados por defender los Derechos Humanos y reclamar el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui.
Primero fue con la ministra Arancha González Laya, la que, según se publicó, fue cesada por exigencias de Marruecos por dejar entrar en España al presidente de la República árabe Saharaui Democrática (RASD) y secretario general del Frente POLISARIO, Brahin Gali, que tiene documentación española, para ser tratado de Covid. Después llegó José Manuel Albares, el que afirma ser gran amigo del ministro de Exteriores marroquí, Nasser Bourita.
El silencio sobre el Sáhara Occidental por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de su ministro de Exteriores es permanente, salvo que sea para apoyar las propuestas del ocupante marroquí, como hizo el jefe del Ejecutivo en su reciente viaje a Rabat.
Tanto Sánchez como Albares hablan con frecuencia de la defensa de los Derechos Humanos en cualquier parte del mundo, ahora especialmente en Gaza y en Ucrania, pero nunca en el Sáhara Occidental, donde cerca de medio centenar de presos políticos saharauis cumplen severas condenas -de diez años hasta cadena perpetua- impuestas en juicios sin garantías y con confesiones obtenidas bajo tortura, según han denunciado juristas que asistieron como observadores, las principales ONG de Derechos Humanos y hasta organismos de la ONU.
A lo largo de estos tres años, en escritos dirigidos a González Laya y a Albares, se han denunciado las extremas condiciones de reclusión de los presos saharauis en cárceles marroquíes: ausencia de asistencia médica, largos periodos de aislamiento, castigos y dificultades para ser visitados por sus familiares, que se encuentran a más de 1000 kilómetros de distancia, en el Sáhara Occidental ocupado.
En el manifiesto leído hoy con motivo de los tres años de concentraciones, el MPPS reclama al ministro Albares “protección y liberación de esos presos encarcelados ilegal y arbitrariamente por Marruecos y condenados en juicios-farsa”, que “se pudren en las mazmorras de Marruecos, privados de todo cuidado y en condiciones infrahumanas”.
Afirma el MPPS que la detención y encarcelamiento de los activistas saharauis son ilegales conforme al Derecho Internacional, “y se derivan de la ilegal invasión y ocupación militar marroquí del territorio saharaui, un territorio pendiente de descolonización e incluido en la lista de Territorios No Autónomos de la ONU desde 1963”, y que los gobernantes marroquíes “los mantienen encarcelados para humillar y criminalizar al pueblo saharaui y hacerlo claudicar de su lucha por su libertad e independencia”.
Una lucha “ejemplar y heroica que lleva a cabo el pueblo saharaui, en unas condiciones durísimas, desde que España lo entregara, atado de pies y manos, a los gobiernos reaccionarios de Marruecos y Mauritania, mediante los infaustos e ilegales Acuerdos Tripartitos de Madrid, firmados en el Palacio de La Zarzuela el 14 de noviembre de 1975 y cuya anulación había prometido el PSOE de Felipe González antes de llegar a La Moncloa”.
“A pesar de dichos Acuerdos ilegales y del incumplimiento y la deriva reaccionaria del PSOE en la causa saharaui, España sigue siendo legalmente, conforme al Derecho Internacional, la potencia administradora del Sáhara Occidental. Y en consecuencia, le incumbe la obligación de proteger a su población civil, como prometió en 1975, en El Aaiún, el propio Juan Carlos I. Y en particular y con mayor razón, le incumbe proteger a los presos políticos saharauis, ilegal e injustamente encarcelados por Marruecos”, indica el manifiesto.
El MPPS no tiene constancia de que el señor Albares haya movido un solo dedo en defensa de los presos saharauis y asegura que ha sido al contrario, “se ha esmerado en hacer oídos sordos a nuestras peticiones, mirar para otro lado y bailarle el agua al rey de Marruecos”.
Al final de la concentración se han coreado eslóganes de apoyo al pueblo saharaui y su lucha, y de rechazo a la actuación del Gobierno de España.
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– Cartas al Ministerio de Asuntos Exteriores
Sáhara – LoQueSomos
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