El país más martirizado del mundo

El país más martirizado del mundo

Nònimo Lustre*. LQS. Octubre 2019

Podríamos haber buceado en la enormidad de publicaciones occidentales que estudian la guerra del Yemen pero, como ninguna nos habla de que no es una guerra sino una sádica invasión…

Probablemente, Yemen es hoy el país más martirizado del mundo. Incluso más que los del Oriente Próximo y Afganistán, Cachemira y Colombia. Todos estos Estados están igualmente atacados desde fuera y, en el caso colombiano, desde dentro. Pero Yemen les gana en calamidad porque sus desdichas no aparecen en los media. ¿Y porqué no aparecen?: evidentemente porque los medios de desinformación, manipulación, tergiversación, mentira y, sobre todo, omisión están en manos de los genocidas saudíes, una monarkía decapitadora y sulfúrica que la banalidad hiper-desarrollada califica impropiamente de ‘medieval’ cuando el Medioevo oriental -y el árabe en particular-, no tuvo mucho que ver con el Medioevo europeo, dicho sea sin analizar cuál de los dos era más brutal porque no es verdad la imagen de oscurantismo que nos han inyectado de la edad media europea -de la oriental, simplemente no tenemos ni imagen ni idea.

En estos días, la Unión Europea (una parte de esa península asiática que se vanagloria de ser ‘el continente europeo’) ha abandonado su papel de mediador entre los jeques saudíes y los ayatolas iraníes para arrojarse en los brazos de los sátrapas de Riad-La Meca. En el fondo, esta degeneración sólo ha interesado a los media occidentales puesto que las partes en lucha sabían perfectamente que la UE era una fiel vasalla de los USA -i.e., voceros de Riad-. Además, lo que queda de la UE está en trance de volverse aún más vasalla de los gringos cuando se materialice el Brexit. El United Kingdom siempre fue el portaaviones gringo en la UE pero ahora lo será aún más, no porque salga de una UE en la que nunca entró sino porque el antiguo contrato especial que Londres tenía con Bruselas, con la negociación del Brexit seguirá igualmente especial. Léase, no existe el Brexit. Por mucho que los propagandeen, es un vodevil torpe y aburrido sobre la re-negociación de las cláusulas del antiguo contrato especial. En roman paladino, están peyéndose en botija pa’ que retumbe.

La última excusa para que la UE apoye a Riad con armas y bagajes -literal-, es que los rebeldes yemeníes han bombardeado con drones unas refinerías de Aramco (la mayor empresa del mundo) Pero, ¿cuántos muertos ha ocasionado ese ataque? Porque, sean los que sean, no tienen punto de comparación con los muertos civiles yemeníes que causan a diario los bombardeos saudí-occidentales. Por otra parte, Bruselas ya se ha olvidado del escándalo Kashoggi -los antifaces bituminosos son realmente impenetrables a la luz- pero Madrid no, por la simple razón de que nunca concedió ninguna importancia a que disolvieran a un ciudadano con sulfúrico y sierra ósea -Madrid es más de fusilar sin más o, en su defecto, de empapelar de por vida a los ciudadanos levantiscos, con especial saña si son vascos y/o catalanes. Además, es imposible que el reino borbónico roce con el pétalo de una rosa al reino saudí ya que los respectivos reyes/jeques son ‘hermanos’. Y el que disienta, que observe las fotos de los reyes españoles besándose con los genocidas saudíes -antes, durante y después de Kashoggi.

Por todo ello, contra la desinformación sobre las masacres en Yemen que propaga, machaca e inyecta Occidente, es inedulible reseñar la complejidad de ese genocidio: no es una lucha religiosa entre los hutíes amparados por Irán y los sunitas patrocinados por Riad -ésta es sólo una pequeña parte del problema. Ejemplo, veamos el siguiente caso de propaganda occidental apenitas encubierta ante el que deberiamos preguntarnos: si es cierto que los hutíes-chiítas dominan sólo una porción septentrional de Yemen, ¿cómo es posible que hayan llegado al mar?

La ‘reina de Saba’ según los floridos orientales

Esta manipulación no es nueva. Al contrario, Yemen ha sido desfigurado desde hace tres mil años. La caricatura más conocida es, obviamente, la que afecta a la Reina de Saba -anónima para la Biblia y Belkis para los orientales. La famosísima visita que Belkis le hizo al playboy Salomón es uno de los primeros casos de inversión de la realidad: fuera reino o confederación de clanes, Saba era infinitamente más rica y educada que aquella banda de zagaletones que comían ovejas en Palestina. Por tanto, Belkis visitó a uno de sus vasallos y no precisamente al más importante.

Fuera porque a los amanuenses de la Biblia les costaba reconocer que habían sido visitados por “su reina”, fuera por su innata tendencia a la mentira, la amnesia y al autobombo, esto es lo que su libro sagrado NO dice de Belkis: “1) Pero el rey Salomón amó, además de la hija del Faraón, a muchas otras mujeres extranjeras: moabitas, amonitas, edomitas, sidonias y heteas. 2) de los pueblos de los que Jehovah había dicho a los hijos de Israel: “No os unáis a ellos ni ellos se unan a vosotros, no sea que hagan desviar vuestros corazones tras sus dioses.” A éstos Salomón se apegó con amor. 3) Tuvo 700 mujeres reinas y 300 concubinas. Y sus mujeres hicieron que se desviara su corazón. 4) Y sucedió que cuando Salomón era ya anciano, sus mujeres hicieron que su corazón se desviara tras otros dioses. Su corazón no fue íntegro para con Jehovah su Dios, como el corazón de su padre David. 5) Porque Salomón siguió a Astarté, diosa de los sidonios, y a Moloc, ídolo detestable de los amonitas. 6) Salomón hizo lo malo ante los ojos de Jehovah y no siguió plenamente a Jehovah como su padre David. 7) Entonces Salomón edificó un lugar alto a Quemós, ídolo detestable de Moab, en el monte que está frente a Jerusalén, y a Moloc, ídolo detestable de los hijos de Amón. 8) Y así hizo para todas sus mujeres extranjeras, las cuales quemaban incienso y ofrecían sacrificios a sus dioses” (Reyes: 11: 1-8)
Por todo ello, olvidemos el libro de Yavé -olvidemos todos los libros sagrados-, y observemos cómo los orientales antiguos y modernos
describen a Belkis.

Hoy, son las minas occidentales las que amputan
Los hutíes, fusiles contra bombarderos de última (de)generación. Obsérvense las mejillas de estos guerreros: no es coca, es kat lo que mascan (no diríamos lo mismo de los pilotos que les asesinan a distancia)

Entramos en la actualidad. Podríamos haber buceado en la enormidad de publicaciones occidentales que estudian la guerra del Yemen pero, como ninguna nos habla de que no es una guerra sino una sádica invasión, ni tampoco aluden siquiera a la descomunal asimetría que existe entre los guerrilleros hutíes y la alianza de medio mundo (petrolífero) que pretende exterminarlos, pues mejor huimos de indigestarnos con tanta propaganda todo a cien. Así pues, nos limitamos a ofrecer unas cuantas ilustraciones verdaderas que hemos espigado entre centenares de imágenes falsas.

Otras notas del autor
* LQSomos en Red

Síguenos en Facebook: LoQueSomos Twitter@LQSomos Telegram: LoQueSomosWeb Instagram: LoQueSomos

LQSomos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Nos obligan a molestarte con las "galletitas informáticas". Si continuas utilizando este sitio aceptas el uso de cookies. más información

Los ajustes de cookies de esta web están configurados para "permitir cookies" y así ofrecerte la mejor experiencia de navegación posible. Si sigues utilizando esta web sin cambiar tus ajustes de cookies o haces clic en "Aceptar" estarás dando tu consentimiento a esto.

Cerrar