Rehenes doblemente secuestrados
Por Nònimo Lustre
Un centenar largo de rehenes
Aunque suponemos que su reacción iría de un extremo a otro, en puridad nadie sabe cómo reaccionaría si le secuestran a un ser querido. En el caso de los rehenes en poder de Hamas, sus familiares y sus amigos, han de saber que, en mi humilde e ignorante opinión, Netanyahu prefiere que mueran. Lo ha demostrado en las innumerables ocasiones en las que, sobre su suerte, ha priorizado lo que semejante belcebú ha llamado ‘la victoria militar’ -una prueba más de que quien manda es el Tsahal y el gobierno es sólo un monigote para la foto. Dicho en plata, estamos ante un caso de rehenes doblemente secuestrados, más por el Tsahal + Netanyahu que por sus raptores -con la diferencia de que para Hamas son un activo de oro mientras que para Netanyahu son un incordio.
Además, los familiares son pocos que, por un lado, sólo cuentan con la morbosa apetencia de los medios mientras que, por otro lado, en la dura realidad -no en la que manejan los buitres del espectáculo-, se enfrentan a una opinión pública guerrerista. O, si lo prefieren, nazi, embrutecida por las armas, aherrojada, voluble y decididamente acomodaticia: ¿o ya se nos han olvidado los 350.000 reservistas que ayer protestaban cívicamente contra la eliminación del poder judicial?, ¿dónde están hoy esos protestones reservistas?: uniformados en primera línea.
Item más, es triste informarles pero, por si su dolor y su rabia les entorpecen las sinapsis, las víctimas libres de ese secuestro masivo deben saber que los gazatíes tienen miles de presos en esas mazmorras sionistas que, créannos, son de exterminio, amorales, ilegales y especialmente torturadoras. ¿Cuántos niños sionistas o sólo israelíes están presos en Gaza? Infinitamente pocos si los comparamos con los niños palestinos presos en Israel -y no hablamos de los muertos, moribundos de por vida, mutilados, huérfanos para siempre, etc. Así lo calcula el Tsahal y así lo ratifica el gobierno títere y ambos han decidido en comandita que no ha lugar para un intercambio de presos.
Pese a todo, si leemos algo de Historia contemporánea del mayor corredor de la muerte que es Gaza, Srs. Familiares de los Rehenes: no crean en la seguridad de que, antes o después, liberarán a sus deudos. Hamas y la Yihad Islámica son humanos, santos y pecadores; quizás liberarán a algunos según sus cálculos estratégicos. Pero el Tsahal es humano sólo paradójicamente: es decir, sólo cuando, desde 1986, conserva religiosamente una siniestra Directiva Aníbal que está en la raíz de toda tragedia (cf. Colofón, próxima nota 23 enero) El Tsahal es mecánico y se enorgullece de serlo, es robótico, inhumano y radicalmente jerarquizado puesto que han llegado a la aberración de establecer jerarquías ¡en las máquinas! -tanta dependencia de los suministros bélicos de los EEUU no propiciaba nada sensato.
Por ende, por mucho que les vean como su salvación eterna no confíen en el Tsahal ni, menos todavía (aunque no sea necesario decirlo pues ya se manifiestan a diario en su contra), en sus subalternos de paisano -no digo civiles porque Netanyahu & Co. no son civilizados ni tampoco son civiles. Pero, por favor, no caigan en la disparatada crueldad de exigir el cese de la (mínima) ayuda humanitaria que llega a Gaza con cuenta gotas. Y, sobre todo, conserven el sentido común para no suscribir ningún bulo. Velay:
Police block hostage families from Gaza crossing; relative laments, ‘They’ll return in 136 coffins’. Los familiares se agolpan en el cruce fronterizo con Egipto de Kerem Shalom donde intentan detener la entrada de ayuda humanitaria -que, sobre todo, incluye medicinas para los, entonces, 136 rehenes de los que se supone que no todos están vivos. La policía los detiene so pretexto de que están en una zona militar. Y los manifestantes gritan que sus deudos volverán en 136 ataúdes. (TOI, 09 enero) Días después, en Tel Aviv, Yonatan Shimriz, hermano de uno de los tres rehenes asesinados “por error” el 15 diciembre por el Tsahal (cf. infra), exclama que “Llevamos 106 días de Holocausto. Este liderazgo será recordado en la Historia como un baldón” (Haaretz, 21 enero) Pero los medios apenas recuerdan alguno de los bulos más tremendistas. Ejemplo: IDF found the Head in the freezer of a Gaza Ice cream store. David Tahar, cuyo hijo Adir fue víctima mortal del 7 octubre, declara que ‘un terrorista capturado’ le ha revelado que Adir fue decapitado y que, primero intentaron vender su cabeza por 10.000 US$, pero que luego la conservaron en una heladería dentro de Gaza (18 enero, en TOI) Comprendemos que el dolor haya llevado al padre a perder el sentido común puesto que, ¿cómo conservar un resto orgánico dentro de Gaza si la Franja carece de electricidad?
Por otra parte, volviendo a los párrafos anteriores, nos parece demasiado optimista creer que sus 136 deudos ‘volverán en féretros’. Para Hamas y la Yihad Islámica, los cuerpos de los invasores muertos son un activo muy valioso. Hoy, en algunos lugares de Gaza, están los restos de unos 20 o 30 rehenes, ninguno dellos ejecutado por los gazatíes -nadie mata a la gallina de los huevos de oro- sino asesinados por el Tsahal, probable pero no seguramente “por error”.
El caso más escandaloso (una rareza entre los miles que el Tsahal no nos permite conocer), ocurrió el 15 diciembre 2023 pero sólo se hizo público tres días después: Israel Gaza: Hostages shot by IDF put out ‘SOS’ sign written with leftover food (BBC 18 diciembre 2023) Los soldados Y. Haim, 28, S. Talalka, 22, y A. Shamriz, 26, fueron asesinados por sus propios ‘salvadores’ en el barrio gazatí de Shejaiya cuando sus rescatistas del Tsahal se enfrentaban a una “dura resistencia”.
Según un portavoz del ejército que exigió mantener su anonimato, esos tres soldados “salieron de su refugio sin camisetas y enarbolando bandera blanca”. Pero, “uno de los rescatadores se sintió amenazado, les declaró “terroristas” y les acribilló a escasos metros de distancia. Dos murieron en el acto pero el tercero, herido, “returned to the building”. Fijémonos en la última oración: hubo un herido que huyó al refugio. Ergo, fue perseguido hasta la muerte después de que fueran asesinados sus dos compañeros de cautiverio. La torpeza de este portavoz nos ha permitido profundizar en la cruel demencia de los pelotones sionistas. Pese a lo cual, Herzi Halevi, jefe del Tsahal, afirmó con total desparpajo que “el IDF no dispara a nadie que alce las manos porque está absolutamente prohibido tirar contra los que se rinden”.
Otrosí, recuerden los deudos, miren hemerotecas, escuchen a los viejos y entonces aprenderán que, desde 2014, Hamas conserva los cadáveres de los soldados Oron Shaul y Hadar Goldin, hechos prisioneros sin que ni el Tsahal ni la sociedad civil israelí -¿eso existe?-, desde hace 20 años, se dignen reclamarlos. Y remember que también está el oscuro caso de los civiles Avera Mengistu (falasha o beta-israel, judío etíope) e Hisham al-Sayed, de los que se cree que pueden estar vivos aunque sólo se sabe que entraron en Gaza por su propia voluntad en 2014 y 2015 respectivamente.
El militarismo ¿ingenuo?
O sobre la dudosa eficacia del armamento artístico naive. Añadamos un caso en el que, la absoluta carencia de arte unida a un rudimentario pero fértil crematísticamente activismo en favor de los rehenes, fabrica unas mercancías que se difunden vía correos por todo el mundo y que, si en algo valen, es sólo para ilustrarnos sobre la deplorable estética de la clase media sionista -¿qué podíamos esperar de quienes llevan en su ADN la muerte y la guerra?
Para el consumidor sionista, los obuses que asesinan a los gazatíes son el pico de unos pájaros multicolores (¿unas aves del paraíso?) De una escalofriante serie de postales sobre la liberación de los rehenes que vende el dizque artista Z. E., @ Shoshke.
Zeev Engelmayer’s Daily Postcards bring solace with colorful realism. Desde el 7 octubre, el illustrator and humorist conocido como Shoshke se ha especializado en pergeñar una pseudo-naive versión de las historietas de cada día (TOI, 20 enero) Recordamos que una disneyana posmoderna hizo ganar a Israel un concurso de Eurovisión -léase, los maletines con cash cash que llevó su equipo- pero es más que dudoso que semejante estilo artístico (es un decir), ayude a la comprensión del problema de los rehenes. Por lo pronto, por mera defensa, tapona los ojos de los espectadores y, aún más, enajena mortalmente su estética. Item más, los medios lo calificarán como ‘colorido realismo’ pero, a nuestro juicio, es torpe, falsamente infantiloide y, simplemente feo -cambiaremos de opinión cuando Z.E. se atreva a mercadear con postales bélicas en blanco y negro.
“Nunca mais secuestrados”. Z.E. confunde lo ingenuo con lo toscamente infantiloide. La gloriosa tribu del Aduanero Rousseau , del Art Brut de Dubuffet y de Miguel Hernández -el pintor exiliado español que no tenía relación con su homónimo poeta-, saldrá de sus mausoleos para exigir venganza poética. 
Los sionistas no se imaginan siquiera un mundo sin helicópteros. Tampoco leen en las hemerotecas que fueran los chof chof Apache los culpables de muchos de los muertos del 7 octubre (cf. próximo Colofón, 23 enero) 
Pie de foto oficial: “Una ballena en un mar de anémonas, las flores del Neguev traen a casa un barco lleno de rehenes”. El enjambre de helicópteros artillados que domina el cielo azul nos dificulta la visión del barco, de la ballena (negra) y de los hipotéticos rehenes liberados.
Diplopia interesada
Aunque volveremos en la nota de mañana 23 de enero sobre la fatídica Directiva Aníbal, por ahora, limitémonos a constatar que la voz “Hannibal Directive” asciende en la Wikipedia del día de hoy a 4.037 palabras. Por tanto, no hay ninguna excusa para no saber que “Aníbal & Co” están perpetrando un Genocidio en letras grandes. Why Israelis Don’t Want to Know What’s Really Happening in Gaza, According to Psychology Research (Haaretz, 20 enero 2024), gacetilla que continúa “¿por qué hace la gente cierra los ojos ante la Verdad?” -por desgracia, esta idiotez se refiere a quienes no ven las masacres de Hamas. Por nuestra parte, lo etiquetaríamos como una rara diplopia oftálmica: ven dos cosas, una enorme y otra minúscula, pero sólo aprecian la minúscula.
Ejemplos: IDF says remains of recovered hostages show they were not killed in strike. Traducción libérrima: el Tsahal dicta que los restos de los rehenes recuperados demuestran que no murieron durante el asalto del ‘comando salvador’. ¿Seguro?: por la censura militar no podemos certificarlo, más aún cuando, hasta la fecha, el Tsahal sufre a diario el fuego amigo y, encima, ha asesinado a más de 70 periodistas gazatíes -los considera terroristas natos- y, además, prohíbe la entrada a la Franja de los periodistas extranjeros.
Pero hay mucho más: Israel forbids doctors from speaking to UN group investigating Oct. 7 atrocities. Officials say commission of inquiry formed by UN Human Rights Council in 2021 is led by three people with antisemitic and anti-Israel views (16 enero) Y, además, Doctors unable to determine exact cause of death of Ron Sherman and Nik Bezier, families told; Dr. Maayan Sherman claims son was poisoned by IDF gas bomb, blaming government (17 enero) Si se prohíbe que los médicos hablen con la ONU porque el Tsahal dicta que algunos de sus miembros son antisemitas (¡qué aburrimiento de mote!) y el padre de un soldado, es médico y cree que su hijo fue envenenado hasta la muerte por un bombardeo con gases, sólo nos queda asegurar que Israel es una teocracia militar que odia a los periodistas no cooptados y a los médicos idem eadem idem.
No todos los familiares de los rehenes son protestones contra el Gobierno. Ni mucho menos. También hay muchos que son dóciles gobierneros de pro. Por ejemplo, los aborregados en el redil llamado Tikva Forum, son ultraderechistas furiosamente sionistas que ponen a su país delante de sus deudos; eso dicen, allá ellos con su psicopatía (Mati Wagner, 17 enero 2024, en TOI) Asimismo, son los mismos que vociferan que Israel no debe repetir el error que cometieron con el famoso Schalit deal.
No es exactamente cierto que, como reza el titular, la Directiva Aníbal fue originada por el affaire Schalit
El ahora mimado por la fama soldado Gilad Schalit (de columnista deportivo, pasó soldado y, desde su secuestro, ascendió a inversor y escritor) pasó entre los años 2006-2011 cautivo de Hamas, hasta que fue liberado a cambio de unas pocas excarcelaciones de presos palestinos -menos de mil- y de otras lisonjas que no gustaron nada en su momento a los sionistas y que, actualmente, gustan menos todavía. En concreto, desde que unos le culpan de estar en la raíz de Aníbal y otros, de sembrar la blandenguería. En todo caso, hoy asesora a los familiares de los rehenes sobre cómo aguantar los cautiverios.
Oficialmente, Aníbal fue descontinuado al poco de promulgarse pero todo demuestra que vive y que goza de buena salud -justamente, lo contrario de lo que les sucede a sus víctimas, la inmensa mayoría sionistas desinformados. 
Confirmado: el vetusto Aníbal -oficialmente anulado tiempo ha-, luchó alocadamente el día de la Razzia.
– Imagen de portada: Los rehenes, avisaron de su existencia escribiendo SOS en sus camisetas con sobras de comida -ergo, algo comían, seguramente más que los gazatíes. Foto del Tsahal
Comparte este artículo, tus amig@s lo leerán gratis…
Mastodon: @LQSomos@nobigtech.es Telegram: LoQueSomosWeb
Twitter: @LQSomos Facebook: LoQueSomos Instagram: LoQueSomos
