Covid: Ruido en Tiempo de Silencio, Miedo y Disciplinamiento Social
Acacio Puig. LQS. Abril 2021
1.- “Sin noticias, mundo a oscuras”… Con solo estas noticias Covid: mundo ciego
Lo que aquí se cuestiona no es la enfermedad. Cuestiono la estrategia con que el capitalismo la hace frente.
Ruido (ensordecedor) el producido por el complejo político-médico-industrial de la UE; ruido amplificado por los aparatos mediáticos al servicio de esta guerra contra la enfermedad en la que todo vale y en que tod@s somos tratados como soldadit@s indefensos y sometidos a la orden de los mandos.
Silencio, porque la información de masas que se difunde carece de cualquier contrapeso; ninguna voz crítica pasa los controles mediáticos y es rápidamente denostada como incapaz, negacionista y derrotista… como ocurre en cualquier situación bélica se impone, en lo esencial, el pensamiento único.
Miedo, generalizado entre la población y parálisis de voces críticas colectivas en los ámbitos sociales, políticos, sanitarios y culturales. O bien críticas que en el mejor de los casos (entre las genéricas izquierdas) se sitúan en el respeto al campo de lo políticamente correcto, entre nosotr@s la liberalización de patentes, generalización de remedios al Sur, añoranza-exigencia de refuerzo de lo público… pero que entiendo no cuestionan con rigor la propia entidad de los remedios-vacunas, los datos que se censuran, la impunidad con que yerran las propias Agencias del Medicamento y la OMS, el deslizamiento hacia el Pensamiento Único, en definitiva la estrategia capitalista frente a la Covid 19.
Disciplinamiento social, como resultado de todo lo anterior y consiguiente imposición de la aceptación sin rechistar de las órdenes; lo habitual en situaciones reglamentadas como conflictos bélicos en los que la única alternativa parece ser… la deserción.
En definitiva: mundo ciego.
2.- Y sin embargo…
2.-A. Sobre el Ruido de crispados vendedores de remedios-Covid, evidente en todos los medios de comunicación masiva y la reiteración obsesiva de la consigna “los beneficios son muy superiores a los riesgos…” (Que debiera traducirse con más precisión como “SUS beneficios son muy superiores a NUESTROS riesgos” y que impregnará la campaña institucional “Yo me vacuno seguro”)… Poco que decir: ruido machacón, con cimientos en el miedo, en la urgencia de creer en algo y regresar a una “normalidad” sistémica brutal y depredadora.
2.-B. Silencio forzado mediante la obstrucción de toda opinión y estudio discordante con la línea oficial implementada en nuestro ámbito de vida, por la UE del capital.
Así:
1-Se obstruye cualquier debate de alcance sobre el rigor de las estadísticas que determinan los impactos e incidencia de la pandemia y sin embargo, son muchas las voces alternativas que las cuestionan; estas por ejemplo:
– Datos covid: ¿con qué razón se nos amedranta?
– ¿Qué eficacia y seguridad tiene la vacuna de AstraZeneca para la covid19?
En cualquier caso existen informes que se actualizan constantemente aquí: European Medicines Agency
2-Se descalifican voces médicas que han señalado aspectos discutibles y rechazables de las vacunas que operan sobre el ADN. Estas por ejemplo:
Puede buscarse en internet: Carta abierta a la OMS: Detengan inmediatamente todas las vacunaciones masivas de Covid-19, el autor es Geert Vanden Bossche, DMV, PhD, virólogo independiente y experto en vacunas, anteriormente empleado de GAVI y de la Fundación Bill y Melinda Gates. La carta no ha obtenido ninguna respuesta de la OMS.
O esto muy reciente y más general:
– Médicos, Biólogos por la verdad
– Carta abierta de la agrupación de Doctores por la Ética del COVID a la Agencia Europea de Medicamentos sobre las vacunas
Y en la web https://medicosporlaverdad.net/ más argumentaciones…
Y hace unos días: www.kla.tv/17506… más discutible en opinión de algún@s de mis querid@s amig@s-corresponsales y que por ello dejo a consideración colectiva, pero que no suprimo de estas referencias…. (Mejor “que se abran cien flores”, en este silencio decretado).
Y Covid y salud, Dr. Juanjo Martinez
Opiniones que se puede y debe discutir… pero en ningún caso sancionar ni excluir del espacio mediático
Mientras tanto “la ciencia oficial” insiste en que “todas las vacunas son seguras” y que “las basadas en ARN mensajero no entran en el núcleo de la célula”. ¿Por qué evitar entonces el debate público y plural entre expertos con valoraciones diversas sobre esos asuntos?… Tenemos pleno derecho a saber para decidir con criterio propio.
Creo muy necesario considerar datos de efectos secundarios y letalidad de todas las vacunas y aquí abajo se encuentran (a falta de última actualización):
4.576 muertes y 199.213 lesiones reportadas a la base de datos europea de reacciones adversas a las vacunas COVID-19 [20/3/21]
3.- Miedo y Disciplinamiento social. El primero constituye la base material actualísima de lo segundo y las medidas coercitivas avanzan (y ya no hablamos de los casos de Polonia y Hungría) sino de la ley mordaza a la española que asume “el liberalismo” de Macron en Francia mediante Ley 15 de abril 2021 -ya denunciada por Amnistía Internacional- y que implementa la prohibición de fotografiar rostros de la policía en acción represiva por particulares y por periodistas, se implementa ante las concentraciones en tiempo de Covid, pero ley que llega para quedarse.
También en Alemania donde se introducen modificaciones por decreto en la llamada “Ley de enfermedades infecciosas” de 2001; desde mediados de 2020 hasta estos días de abril de 2021, mediante la misma se recortan aspectos constitucionales que salvaguardaban las libertades políticas individuales y que se acercan a nuestra conocida ley Corcuera (de la patada en la puerta) por motivos de causa mayor y que eliminan la inviolabilidad del domicilio : por el momento la ley solo ha merecido la crítica -entre la izquierda institucional- de Die Linke y puede ser decretada durante la última semana de abril.
Pero será muy dura para nosotr@s la posguerra del Covid porque el tele-activismo está sustituyendo la acción social y no vemos cómo remediar eso. Se “habla” en los medios, en las instituciones, pero -quizá con alguna excepción en grandes ciudades como Madrid y Barcelona- el campo de la acción social se está desertizando.
Asambleas, manifestaciones… empiezan a ser testimoniales. Y lo que se pierde cuesta mucho recuperarlo. La multitud aprendemos en la acción colectiva, en el debate colectivo, en la vindicación colectiva y eso está siendo reemplazado por las pantallas y la expresión de minorías en disidencia y “en representación de” en demasiados lugares del estado español y en toda la UE.
4.- Reforzar integralmente la sanidad pública
Se ha convertido la Agencia Europea del Medicamento en un Totem incuestionable y sin embargo los cambios sucedidos con AstraZeneca y su uso, tras la visibilización de casos de efectos secundarios y algunos letales, han llevado a la Agencia a modificar simplemente la franja de edad de las inoculaciones (de los más jóvenes antes a los mayores ahora).
Pero semejante situación alarmante no ha sido convenientemente contestada, dirimida, ni causa de desconfianza en la Agencia… Tampoco cuando se improvisa en torno a la administración de la segunda dosis con AZ u otras, a pesar de la advertencia de muchos expertos que defienden la ortodoxia de no mezclar sueros. Llaman a la confianza ciega, dócil y servil de la ciudadanía.
Las críticas a la composición de millones de mascarillas (nano-partículas/nanografeno), Prohibir cubrebocas con nanomateriales, que parecen generar daños varios incluso cánceres pulmonares – y que ya han llevado por ejemplo en Bélgica a eliminar una partida de millones de ellas y también en Canadá- tampoco parecen tenerse en cuenta a la hora de exigir responsabilidades a la Agencia Europea del Medicamento (ni a la OMS) que “dictan línea” en tanto que expertos, a las Agencias de cada país y a los gobiernos correspondientes. Y sin embargo se trata de asuntos muy graves. Por fortuna se registraron ya disidencias tempranas de Agencias como la francesa (ANSM) por ejemplo:
La Agencia francesa del Medicamento confirma que las trombosis son consecuencia de la vacuna de AstraZeneca
Entiendo que cuando Instituciones médicas como las citadas dan el visto bueno a estas apresuradas vacunas (o esperan hasta que USA tome medidas respecto a otras) o a las mascarillas sin análisis determinantes, el disparate revela que esas instituciones operan no como extensiones médico-institucionales de la investigación y sanidad públicas, si no como prolongaciones del poder: Por eso PIERDEN completamente su FIABILIDAD.
Careciendo de medios y por tanto de instrumentos de análisis propios, careciendo de criterio independiente, Las Agencias del Medicamento se limitan a interpretar los informes y prospectos de las multinacionales farmacéuticas (que ya llegaron con censuras e imprecisiones cuando se adquirieron las vacunas). Esos análisis al dictado, que simplemente se replican en la UE y luego en cada país, ya vemos que resultan ser peligrosos (en el cortísimo plazo) entre aquell@s a quienes las vacunas les “cayeron mal”.
No digamos de los posibles efectos adversos en el medio y largo plazo que ni han tenido ocasión- ni interés- en analizar las multinacionales farmacéuticas y sobre las que no dicen nada convincente los ministerios de sanidad (el pasado viernes 16.04.21 solo se decía aquí en rueda de prensa (RNE) que “se desconoce el tiempo de inmunidad y tampoco en qué medida las inyecciones evitan el contagio”). Esa preocupación disparó hace días las alarmas de la Unión de Pacientes Alemanes, que recogía Russia Today ( RT):
Sind Geimpfte infektiös? Patientenschützer fordern rasche Aufklärung zur Aufhebung rigider Maßnahmen
Incluso en Israel, usado como banco de pruebas de Pfizer y que acordó una suerte de monocultivo vacunológico allí, la farmacéutica garantiza algo más del 90% de inmunidad solo durante los seis primeros meses y duda de su eficacia ante variantes nuevas.
Eso abre la puerta a un nuevo negocio vacunológico: la creación de “vacunas de complemento”, posibilidad que ya ha generado preocupaciones y alarmas de expertos médicos críticos con la línea sanitaria hegemónica… (Si esto fuera así, cabe preguntarse si habrá suficiente piel… para asumir tantas “inyecciones”).
Por eso, reforzar integralmente la sanidad pública va mucho más allá de reabrir consultorios de primaria y reforzar plantillas (aun siendo esas medidas muy urgentes)… exige también dotar de medios materiales a todas las redes e instituciones de investigación para que puedan tomar decisiones propias, sobre la base de SUS análisis, estudios y comprobaciones de lo que se ignora. Exige una renovación de sus miembros y el control social de los mismos y sus actividades; una renovación quizá aún más profunda que la que necesitamos aquí respecto a órganos como el GPJ y el conjunto del aparato judicial español.
Y desde luego, exige acabar con los “conciertos” entre capital público e industria farmacéutica privada como ha ocurrido con las compras unificadas desde la UE. Si la financiación –o buena parte de la misma- entregada a las farmacéuticas se hubiera derivado hacia los múltiples Enjuanes-CESIC de toda la UE, se habría avanzado en la dirección correcta y no en la vía de refuerzo de la privatización médico-farmacéutica impuesta por el capitalismo neoliberal. Y eso entra también en el necesario fortalecimiento de la sanidad pública, de la investigación sanitaria pública.
Esto engarza con una reflexión más amplia sobre los necesarios cambios en el modelo productivo que van mucho más allá de la digitalización y el pintar de verde el desarrollismo, pero no es momento de entrar en ello: en ese sentido, el camino recorrido lleva a dudar seriamente que el impacto de la Covid suponga transformaciones de calado; todo indica que no habrá cambios… sino cosmética: lo propio del sistema capitalista.
Pregunta nada banal: ¿Por qué no se recorta drásticamente el (los) Presupuestos en Gasto Militar para tener recursos con los que incentivar ya la investigación y sanidad públicas y atender necesidades perentorias de quienes se han quedado atrás con las crisis sucesivas y las generadas por la eclosión de COVID-19?
Respuesta: Sí, así es el capitalismo.
5.-Negacionismos
Los hay de diferente calibre y son todos peligrosos. El representado por el dúo Trump-Bolsonaro ha generado masivos contagios y fallecimientos en medio de un trágico descontrol. Los negacionismos filosófico-naturalistas, no parecen haber superado viejos arcaísmos procedentes del baúl de la historia, son zigzagueantes, oscuros y con frecuencia, constituyen la base social de los primeros.
Pero creo que asistimos también a un negacionismo del poder político, sus científicos oficiales y su base económica. Un negacionismo que globaliza, dicta y ordena “en democrático”; un negacionismo que se caracteriza por excluir el debate hipótesis discordantes, monocolor y decido a imponer mediante propaganda, miedo y legislaciones represivas, una información tóxica que cierra vías al debate y a cualquier mecanismo de control social de los discursos y los medios (públicos) de comunicación masiva: ese NEGACIONISMO INSTITUCIONAL es letal porque amordaza cualquier atisbo de derechos y poder popular.
En cualquier guerra se decía que la primera víctima es la información y en esta “guerra contra el Covid”… la información y el control cívico de la misma (algo a construir) ya han caído en desigual combate.
Posdata
Incluiré para terminar, junto a mi agradecimiento a l@s amig@s con que comparto informaciones y reflexión, un acertado pensamiento de Guilles Deleuze fechado en febrero de 1977. Me lo remite un amigo muy querido y en sintonía con mis preocupaciones en estos tiempos de Covid.
“Por muy actual y poderoso que sea en muchos países el viejo fascismo ya no es el problema de nuestro tiempo. Se está instalando un neofascismo en comparación con el cual el antiguo quedará reducido a una forma folklórica (…). En lugar de ser una política y una economía de guerra, el neofascismo es una alianza mundial para la seguridad, para la administración de una “paz” no menos terrible, con una organización coordinada de todos los pequeños miedos, de todas las pequeñas angustias que hacen de nosotros unos microfascistas encargados de sofocar el menor gesto, la menor cosa o la menor palabra discordante en nuestras calles, en nuestros barrios y hasta en nuestros cines.”
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Creo que fue en 2009, en Bielorrusia, la gente, el pueblo, tomó el Parlamento, sin víctimas mortales, le siguió Ucrania con su levantamiento naranja, después Wisconsin, donde también ocupan el Parlamento contra los recortes públicos, Túnez y Egipto hacen caer gobiernos inamovibles, En España el 15-M se hace internacional con ocuppy-revolution, un movimiento popular de auto concienciación social y acción.
Siria, Arabia, Bahréin, Yemen, Hong Kong, Yakarta, Guatemala, Chile, Líbano, etc. Los levantamientos de las poblaciones contra sus gestores se van extendiendo por el mundo, tumbando gobiernos, poniendo el sistema en entredicho.
La revolución ultra liberalista, va camino de monopolización capitalistas de los bancos, a lo tonto, y su objetivo es la bajada de impuestos a los ricos hasta el 20%, haciendo impuestos directos en impuestos generales. Han hecho sus cuentas de esta década de bonanza para ellos, han hecho sus restructuraciones y repartidos beneficios.
Pero el caos corrompido en que se mueve su sistema mercantil y productivo, ha quedado en demasiada evidencia. ¿Qué hubiese sido sin la Intervención del Estado y el Ejército para contener su avaricia?
Todo por hacer.
Una buena lectura sobre cómo moldean el pensamiento único: https://elsudamericano.files.wordpress.com/2020/04/208.cc393mo-nos-venden-la-moto-chomsky-y-ramonet.pdf
La hegemonía cultural capitalista se ha fortalecido aún más con la estrategia del miedo, y la covid amplificada en los medios es el gran cortinón de humo. Más reflexiones críticas del pensamiento único en http://www.ojosparalapaz.com/como-nos-venden-la-moto/
Efectivamente, la hegemonía cultural capitalista se ha fortalecido aún más con la estrategia del miedo, y han convertido la covid en el gran cortinón de humo que nos oculta todo lo que están haciendo desde hace un año, sin contestación cívica. A raíz de un artículo en esta línea crítica del pensamiento único (http://www.ojosparalapaz.com/como-nos-venden-la-moto/) he leído dos textos de Noam Chomsky e Ignacio Ramonet que, siendo de 1995, son puro reflejo de lo que el gran capital sigue haciendo hoy para mantener el poder económico: alienar y adoctrinar a la población mediante el poder mediático, asegurándose el poder político. Este es el enlace: https://elsudamericano.files.wordpress.com/2020/04/208.cc393mo-nos-venden-la-moto-chomsky-y-ramonet.pdf