Europa: hipocresía pura
Por Selodi Gasan Adie. LQSomos.
“No aceptaremos que Grecia vuelva a ser, como en el periodo 2015 a 2019, la puerta de entrada a Europa para migrantes ilegales” Europa habla de ayuda humanitaria, pero castiga la solidaridad. Grecia prohíbe los rescates de las ONG en el mar y los castigará con cárcel y multas
Castigar la solidaridad, penar la defensa de los Derechos Humanos parece ser el camino escogido por la Europa del bienestar ante las personas que necesitan ayuda y huyen del sufrimiento de su tierra expoliada, ya sea por colonialismo, guerras o la crisis climática. Mientras en Europa, se siguen haciendo elocuentes discursos de apoyo y protección humanitaria, la realidad nos demuestra de manera tangible el endurecimiento de las leyes en la Europa comunitaria. Ahora se suma Grecia, con nueva ley en la mano.
El Parlamento griego ha aprobado este viernes 3 de septiembre una nueva ley sobre migración, la tercera en los dos años de Gobierno conservador, que facilita las deportaciones y penaliza las operaciones de rescate de ONG en el mar.
La ley ha sido aprobada con los votos de la Nueva Democracia, que dispone de mayoría absoluta en el Parlamento. “No aceptaremos que Grecia vuelva a ser, como en el periodo 2015 a 2019, la puerta de entrada a Europa para migrantes ilegales”, ha afirmado en su discurso el ministro de Migración, Notis Mitarakis, en respuesta a las críticas de los partidos de oposición socialdemócrata e izquierdas.
Legislar para castigar la ayuda humanitaria, esa es la realidad europea, mientras patrocina y subvenciona a gobiernos que realicen de porteros y guardia fronteriza: Turquía, Marruecos, Libia… sin preocuparse por el cumplimiento de los Derechos Humanos.
La nueva ley solo permite que las ONG asistan a la guardia costera en las operaciones de rescate, pero les prohíbe actuar por su cuenta y participar en el salvamento en sí. El mar Mediterráneo seguirá siendo una inmensa fosa común.
En caso de no cumplir esta nueva norma, los tripulantes del barco de la ONG serán condenados a una pena de un año de cárcel mínimo y a una multa de entre 500 y 1.000 euros. La multa para la ONG puede oscilar entre 3.000 y 6 millones de euros.
Devoluciones en “caliente”
Otra de las disposiciones, insolidaria y punitiva, de la nueva ley es la que permite a la Policía deportar a todo migrante que sea detenido tras entrar ilegalmente en el país, si no solicita inmediatamente protección internacional o si ésta le es denegada, sin necesidad de que las autoridades competentes de asilo se pronuncien sobre ello, lo que en la práctica legaliza las devoluciones en caliente.
Desde hace varios años Grecia es denunciada públicamente por diversas organizaciones humanitarias que acusan al Gobierno de devolver a Turquía a refugiados que llegan en el país por tierra y mar, sin permitirles pedir protección internacional.
El Gobierno griego sostiene que lo que hace es proteger la frontera europea de entradas ilegales, asegura que todo eso es propaganda de Turquía y no ha respondido a las demandas del Consejo de Europa para investigar las denuncias de devoluciones en caliente.
Se restringe asimismo la posibilidad de los demandantes de protección internacional de presentar recurso contra una decisión negativa del Servicio de Asilo. Según la nueva disposición, un recurso se puede presentar solo a través de un abogado.
La Europa fraternal no existe, cada vez avanza con mas fuerza, y leyes, la jaula de oro en la que se va convirtiendo este evangelizado continente.
– Ilustración de Acacio Puig.
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