¿Contra la ley de la enseñanza?
Empieza el curso escolar y un plato fuerte de las protestas sociales será la ley Wert. Una reforma de la enseñanza nefasta, pero no peor que las anteriores. Un poco peor aún, perono es sino un paso de las anteriores leyes de educación.
Con esto no justifico esta ley, ni pongo zancadillas a las protestas, como se ha dicho, sino que trato de ver la realidad, de la apatía social y buscar salidas necesarias. Algunos han llamado a este planteamiento “nihilismo”, sin saber muy bien a qué se refiere exactamente.
Voy a poner ejemplos concretos. Cuando a los parados se les expulsó del programa de madrugadores en Castilla y León (gobernada por el PP), nadie hizo nada, ni asociaciones, sino la de un colegio, ni sindicatos ni partidos, ni el Ministerio, por cierto socialista, con lo que supone de discriminación. Por decreto se dijo que no lo necesitaban, cuando sí lo habían utilizado. El paso siguiente, al curso próximo, fue cobrar por tal servicio. Nadie, de quienes hoy se rasgan las vestiduras, hizo nada.
En la Escuela Municipal de Música, quien no paga todas las mensualidades, lo echan. Un parado que no cobra prestaciones no puede pagarla, es imposible. ¿Alguna reivindicación?. Se han restringido las becas de comedor, no hay un fondo de compensación para los alumnos que no pueden pagar las excursiones… En este ambiente ¿qué nace?. Entre otras cosas la ley Wert.
Y nadie reacciona porque sucede como aquel poema en el que alguien ve que se llevan al tendero de enfrente y nadie hizo nada, luego van a por el portero y nadie hizo nada, luego al vecino del quinto y nadie hizo nada. Luego fueron a por él y nadie hizo nada… Es lo que está pasando.
Cuando el PSOE estuvo en la oposición se hizo un simposio sobre la religión en la escuela pública. Baste como anécdota que cuando propuse que se pasara la religión a una actividad extraescolar y dejara de ser una asignatura, varios socialistas que luego fueron directores generales y otros con cargos ministeriales, lo rechazaron, uno de ellos dijo: “¡cómo a un socialista se le dice esto!, ¡ni hablar, para un socialista la religión fuera de la escuela!”. Estando ocho años en el gobierno la religión ha seguido en la escuela, presentaron el falso debate de ciudadanía que es lo que se debatió…Yo llamaba al ministerio para ver cuándo iban a quitar la asignatura de religión, escribí a los parlamentarios… La respuesta unánime fue: no es el momento. Cuando llega la derecha al gobierno entonces sí es el momento…
O partimos de esta realidad o lo que hagamos será en tierras movedizas que se tragan las protestas…
La nueva ley responde al Plan Bolonia, aplicado en tiempos de crisis. Cuestionemos la enseñanza del idioma de las multinacionales, y busquemos una mentalidad global basada en la solidaridad, por ejemplo con exigir que se enseñe el esperanto, para que los jóvenes de todo el mundo puedan comunicarse y no para hacer la selectividad y una entrevista para un puesto de trabajo….
Creo que es hora de plantear nuevos modelos pedagógicos. Una enseñanza para el presente del alumnado, no para el día de mañana. Cuestionar que todo se base en los exámenes, en estudiar contrarreloj para neurotizar a los niños y jóvenes de manera que se adapten a una sociedadceñida de horarios, de competencia contra los demás. O salimos de esta trampa o de nada servirán otras leyes de enseñanza, serán más de los mismo.
¿De qué sirve una beca para estudiar si la familia no puede vivir porque carece de lo más mínimo?. Lo cual no es nuevo. No podemos hacer de la protesta una herramienta para los partidos políticos, sino abrir un debate y una acción que surja de los estudiantes, de sus inquietudes, de la reflexión colectiva. Y permitir que haya otros caminos fuera de los estudios.
Como dicen los puntos 15 y 16 del mayo del 68 aprobados en la Sorbone: “No nos dejemos engañar por quienes quieren pensar por nosotros”; “contemos sólo con nuestra inmadurez para aclarar las ideas de los gobernantes”…