Kurdistán ¡Alto a la limpieza étnica!

Por Agencia Mp3*.

La guerra en curso del Estado turco contra la población civil de las regiones de población kurda de Siria e Irak pone deliberadamente en peligro la vida de 5 millones de personas, entre ellas cientos de miles de desplazados y refugiados…

Ayer jueves 5 de octubre de 2023, el Estado turco intensificó su guerra pesada con ataques aéreos sobre el norte y el este de Siria. Al igual que en noviembre de 2022, las infraestructuras y los civiles en particular fueron blanco de los ataques.

Comunicado:

¡Alto a la limpieza étnica de los kurdos!
¡Alto a los crímenes de guerra del Estado turco!

El ministro de Asuntos Exteriores turco, Hakan Fidan, declaró públicamente que todas las infraestructuras e instalaciones energéticas en Rojava/Norte y Este de Siria (NES) y el norte de Irak/Kurdistán iraquí son «objetivos legítimos», aunque los ataques militares contra infraestructuras civiles violan claramente las leyes y convenciones humanitarias internacionales. El ministro turco de Exteriores, Fidan, ha afirmado, sin pruebas, que los responsables del atentado contra el Ministerio del Interior turco del 1 de octubre procedían de Siria. Apenas unas horas después de estas declaraciones, aviones de guerra turcos bombardearon el barrio de al-Misheirfah en la ciudad de al-Hasakah y otros 7 lugares en Amuda y Qamishlo, causando al parecer varias víctimas civiles.

Mientras las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) rechazaban las acusaciones de Fidan de que «los autores del atentado de Ankara procedían de Siria», las Fuerzas Armadas turcas lanzaron una serie de ataques aéreos contra zonas civiles del norte y el este de Siria. Las SDF han declarado: «… La búsqueda de excusas por parte de Turquía para legitimar sus continuos ataques contra nuestras regiones y lanzar una nueva ofensiva militar aumenta nuestra profunda preocupación. Atacar las infraestructuras y los recursos económicos de la región y sus ciudades pobladas es un crimen de guerra.»

Las infraestructuras civiles incluyen escuelas, hospitales, presas, centrales eléctricas, almacenes de grano y otras instalaciones vitales, y las fuerzas turcas han atacado estas estructuras en numerosas ocasiones en todas las zonas gobernadas por la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria (AANES) a lo largo de los años. La guerra en curso del Estado turco contra la población civil de las regiones de población kurda de Siria e Irak pone deliberadamente en peligro la vida de 5 millones de personas, entre ellas cientos de miles de desplazados y refugiados.

Continúan los interminables bombardeos de zonas montañosas del norte de Irak, también ilegales según el derecho internacional. El Estado turco debe rendir cuentas por sus años de ataques contra población e infraestructuras civiles y otros crímenes de guerra en el NES y en el Kurdistán iraquí. Paralelamente a esta brutal agresión militar, el Estado turco ha lanzado una nueva oleada de represión dentro de las fronteras de Turquía, deteniendo y arrestando arbitrariamente a cientos de políticos kurdos desde el 1 de octubre.

Es indignante que el gobierno turco pueda anunciar públicamente una campaña de limpieza étnica contra la población civil y que esta audaz declaración de su intención de cometer sistemáticamente crímenes de guerra reciba el silencio de todas las organizaciones internacionales pertinentes de las que Turquía es miembro, incluida la Coalición Global contra Estado Islámico (ISIS/Daesh), el Consejo de Europa, la OTAN y las Naciones Unidas; todas las cuales, con su silencio, aceptan la clara suspensión del derecho internacional y proporcionan al Estado turco la aprobación implícita para proceder según lo previsto.

Esta nueva campaña de agresión militar y limpieza étnica emprendida por el Estado turco es consecuencia de la incapacidad política para resolver un conflicto secular basado en la negación del derecho básico del pueblo kurdo a la autodeterminación. La aceptación y el apoyo internacionales al agresivo y militarista Estado turco intensifican el conflicto kurdo-turco y provocarán un aumento de la inestabilidad, los desplazamientos y la guerra en toda la región si no se produce una intervención política, jurídica y diplomática internacional. Además, los ataques contra el NES proporcionarán directamente a ISIS, que sigue contando con el apoyo del Estado turco, una oportunidad para resurgir y suponer una amenaza renovada para la seguridad regional y mundial.

El incidente de Ankara ha vuelto a atraer la atención internacional sobre la irresuelta cuestión kurda de Turquía, que ha provocado la pérdida de decenas de miles de vidas y el desplazamiento de millones de personas en varios países, ha dado forma a otras grandes crisis regionales y ha atraído a las potencias mundiales. Este conflicto debe resolverse mediante una intervención política.

Con este fin, hacemos un llamamiento a todas las organizaciones internacionales de las que Turquía es miembro para que obliguen a Turquía a cumplir el derecho internacional con el fin de impedir una nueva campaña de limpieza étnica por parte del Estado turco.

Además, hacemos un llamamiento a todos los amigos del pueblo kurdo y otros pueblos del NES para que expresen su apoyo a los pueblos de la región y su oposición intransigente a la intención del Estado turco de librar una guerra total contra los civiles de la región.

* Consejo Ejecutivo del Congreso Nacional de Kurdistán – KNK