Misérrimo estado-del-arte en Israel
Por Nònimo Lustre
Aviso a los navegantes: en la siguiente nota se ofrece una selección no -exhaustiva de las obras de arte que se fabrican (sic) en Israel. Nuestro propósito es evidentemente anti-sionista. Así pues, sra. navegante, si no está conforme con él, mejor no siga leyendo. Conclusión que se materializará al final: en Israel, las actuales artes plásticas, publicitarias y cualesquiera otras, carecen del menor interés -salvo el de la Resistencia que, obviamente, está monopolizada por los palestinos y por los israelíes de pro cuyas obras están censuradas y cuyos artistas, están proscritos y amenazados de muerte
Para llegar a tan ruda conclusión, se nos puede objetar que nos apoyamos en una selección tendenciosa y escasa en cantidad. Sobre su inherente proselitismo, nada que reclamar. Excepto añadir que, bajo una escuálida apariencia de modernidad à la occidental, el Estado de Israel (teocrático, militar y arcaizante, desgraciadamente acompañado por la mayoría de su sociedad), censura todo atisbo de disidencia. En cuanto a la cantidad de ejemplos aducidos, sólo añadiremos que hemos consultado numerosas páginas web dizque ‘artísticas’ y en casi ninguna dellas apenas hemos encontrado obras iconoclastas o autónomas -léase, anti-sionistas. Sin duda que haberlas, haylas pero mucho se cuida la intelligentsia oficial sionista de esconderlas.
¿Por qué calificamos como misérrimo el actual arte sionista? Porque, pese a que el arte suele independizarse de los hegemones políticos, no lo puede hacer si el Estado es militar y rabínico. En tan desfavorables circunstancias, la estética desaparece -o se refugia en un clasicismo estéril, como ocurrió con Hitler y con Franco-, y el arte se evapora. Ejemplos: en la Polonia actual, apenitas saliendo de una dictadura ultracatólica, sigue preso el Pablo González, el periodista español cuyo delito es hablar ruso, infracción (¿) por la que fue atado de pies y manos por el CNI español -los espías- y entregado mediante con todo tipo de embustes, coacciones y censuras, precisamente a un gobierno meapilas que, además, aborrece de Rusia -con alguna razón histórica. En estos momentos, Gaza y Cisjordania sufren igual dislate jurídico pero, además, sufren aún más con el genocidio.
Desde el primero de los artículos que redactamos sobre Gaza, expresamos que los sionistas son los mejores alumnos de Hitler. Una vez elucidado en decenas de esos artículos los detalles de la vesania sionista, en el anterior poste llegábamos a la conclusión de que el Mal va más allá: hoy, el alumno ha superado a su Maestro de manera que Tel Aviv es peor que los nazis. Por varias razones entre las que, solamente a efectos de intendencia bélica, ocurre que Occidente regala casi gratuitamente armas a Israel -para que las pruebe y pase a los ‘donantes’ el informe técnico pertinente. Pero hay algo peor: los Aliados de antaño se lamentaban de los campos de exterminio -pero tuvo que ser el Ejército Rojo el que liberó a la mayoría dellos. Hoy, aquellos vanagloriados Aliados no sólo no reconocen el genocidio de los palestinos sino que lo jalean y hasta financian. Volviendo a la católica Polonia, de meapilas a inquisidora no medió ni un minuto. Menos aún se ha demorado Israel en pasar de democracia avanzada a Estado Genocida. En estas circunstancias, ¿a quien puede extrañar que el Arte sionista haya sido la primera víctima?
Una próxima Bienal y la exposición temporal más reciente
Reconfigured after October 7, Haifa Biennale uses art to work through trauma and lost. Video art installations are focus of Mediterranean art show at Wizo Haifa; beeswax soldiers are lined up at Artists’ House (25 enero TOI) Esta bienal destaca unos ridículos soldaditos de cera (plagiados de la famosísima la tumba de los guardianes de terracota del primer emperador de China, Qin Shi Huang, 210-209 a.n.e.) y la sandía robada a los gazatíes. En suma, un arte sin inspiración, abocado al plagio y, encima, como acostumbra Israel, sin ninguna vergüenza (cf. Desde Yemen hasta las islas del océano Pacífico. Diario Indirecto III; 25 enero 2024)
Hic et nunc. An Israeli Art Exhibit on the War That Isn’t a ‘War Exhibition’. Suppressed tension and restrained horror: The exhibition at Tel Aviv’s Inga Gallery is affected by the Gaza war, but in a broad, existential manner (08 febrero, Haaretz) ¿Por qué restrained horror si el Planeta sabe de sobra que se está perpetrando un genocidio? ¿Quizá porque, para los marchantes y los artistas sionistas las matanzas de Gaza y de Cisjordania no son tan horrorosas? Si tal fuera el caso, sólo podemos asegurar que el Horror ha sido siempre -y lo sigue siendo- un catalizador para grandes obras de arte.
Item más, ¿cómo entender eso de que la expo está afectada por la Gaza war pero solamente en una amplia y existencial manera?: ¿amplia como Asia, el Planeta o incluso la Galaxia? ¿Por qué existencial? ¿porque el genocidio -no es guerra- está asesinando las existencias de miles y miles de inocentes? Tremebundo pero cierto. Y, en cualquier caso, si los (supuestos) artistas de la cuadra Inga son de ese natural modosito al que le repugna la sangre, podrían haberse inspirado en una suavísima (¿) noticia que hemos visto al lado de la gacetilla sobre la susodicha expo: “Los [genocidados] gazatíes cocinan su pan de pita con pienso para animales” (Ibid)
En el año 2006, Netta Eshel y Revital Gal abrieron en Tel Aviv la Inga Gallery, justamente en su distrito “industrial and cultural” donde “has become a prominent part of the growing local and national art scene”. Hoy, muestra la exposición Horror Will Help Itself -título inspirado en un verso del siglo XI escrito por el rabino andalusí Solomon Ibn Gabirol- de la que, con grave daño para nuestro baqueteado sentido de la belleza, reproducimos algunas de sus mejores -es un decir- instantáneas.
¿Sansón y Dalila? Obra fotográfica escogida por la Inga Gallery para significar su expo temporal. Cuando hayamos superado la calamidad oftálmica que nos ha causado la visión de esa horrible salita (señor Lord, no quiero que me compres el mercedes pero, porfi, aparta de mí este cáliz, esa manta de sofá, esas grises cortinas) analizaremos lo sustancial: ese marido de cara desleída y expresión bovina, esa señora que, dentro de su casa, luce un sostén talla XXL y un chándal-pantalón de un rosa que fue suprimido por Pantone hace añales, para el común representa la glorificación de la ínfima burguesía. Realmente, es la apoteosis de la mediocridad -armada y ansiosa por asesinar. Es el sueño húmedo de los serial killers sionistas -los cobardes por antonomasia.
Antecedentes dizque artísticos
Después de una inmigración masiva -pero con escasos sobrevivientes del Holocausto- al recién formado Estado de Israel, cuando todavía primaba la propaganda de que sus fundadores -ateos y socialistas poco nacionalistas- estaban construyendo una eutopía, Gaza se llenó de hippies cuya inconsistencia ideológica se tradujo en una impúdica inanidad política -sus nietos son los actuales genocidas natos.
Un artista (¿) nacido en los EEUU pero de ascendencia iraní es promocionado por los municipios sionistas. Este mural nos parece un guisote seudo-feminista de heroínas persas culminado (cf. izquierda de la imagen) con una soldado sionista muerta durante el genocidio de Gaza.
Performance con (poco) ketchup y un policía ostentóreamente falso. Una sionista brasileña participa en una performance (nada) realista de apoyo a los rehenes. A los viejos y/o jóvenes sionistas se les da mejor matar que teatralizar los delitos de genocidio. Natural: no saben ponerse en el lugar del Otro si esos Otros son los palestinos.
Postal comercializada so pretexto de la campaña para liberar a los rehenes en poder de Hamas -fealdad manifiesta, primitivismo nulo y torpeza estética que comentamos en postes anteriores.
Tatuaje con la fecha de la razzia de Hamas contra los kibbutzim que sitiaban Gaza. ¿Tienen miedo de que se les olvide?, ¿cómo se les podría olvidar si la propaganda sionista lo recuerda al mundo entero cual si fuera una efeméride tan importante como la aparición del Cristo -enésimo mesías- o el ‘descubrimiento’ de América?
Las/os gazatíes
Collages palestinos de ayer y de hoy
Centro izqda: Leila Khaled (Haifa, 1944) In illo tempore -hablamos de finales de los años 1960’s, años del Che Guevara-, cuando el Popular Front for the Liberation of Palestine (vulgo, los entonces llamados fedayines) secuestró su primer avión, Leila estaba en la acción. Este cartel clásico la homenajea.
Hoy, un collage atemporal
El actual arte sobre los honderos palestinos no está inspirado en el fantasioso episodio de David contra Goliat -en este caso, se nota la influencia de Banksy. ¿Para qué remontarse tan atrás cuando lo observan a diario?
La piedra contra los tanques. 75 años de honderos palestinos apedreando a los blindados genocidas.
Un refusenick reacio a participar en la política genocida de Israel. Su arte es casi imposible de encontrar… pero lo hay.
Última hora
1) Israeli Border Police Killed a 4-year-old Palestinian Girl, Then Took 10 Days to Return Her Body. Border Police opened fire indiscriminately at a vehicle that tried to burst through a checkpoint, also firing 32 rounds into a taxi carrying a mother and her children. One of them, a little girl, was shot dead (10 febrero, Haaretz) La policía de Fronteras acribilla con 32 disparos a un taxi que transportaba a una madre y sus hijos. Ruqayya Jahalin, una niña de 4 años, es asesinada. Israel se demorará 10 días en devolver sus restos. ¿Diez días para devolver un cuerpecito de escasos kilos? Nos preguntamos: ¿cuánto pesará el cadáver que han devuelto? Seguramente, menos de esos escasos kilos porque lo habrán vaciado de sus órganos y vísceras para utilizarlos en futuros trasplantes para niños sionistas.
2) Bodies of Gazan girl, 6, ambulance team trapped under Israel fire, found after 12 days. (Agencias y TOI, 10 febrero) Hace algunas horas, comentábamos en “Cuatro collages para ilustrar la actualidad gazatí” el caso de la niña Hind Hamada (6 años) de la que, entonces, sólo sabíamos que había ‘desaparecido’ -ella y su parentela. Nos preguntábamos: “¿fue laminada por el tanque o logró escapar?” y, en el colmo de nuestro cretino optimismo, insinuábamos que quizá no hubiera sido laminada pero no por humanidad del Tsahal sino por aquello de los robos de órganos que hemos citado en el caso anterior. Pero el optimismo no tiene cabida en Gaza. Por el contrario, ahora se han sabido detalles del infanticidio contra Hind y del asesinato colectivo contra su familia y contra los médicos y ambulancieros que estaban cerca y les podemos asegurar que, a todos/as, les asesinaron con un odio que supera expresiones racistas tan anticuadas como odio africano, tortura china, etc. Si actualizáramos el vocabulario, hoy deberíamos registrar el lexema odio sionista como paradigma de la maldad infinita.
Comparte este artículo, tus amig@s lo leerán gratis…
Mastodon: @LQSomos@nobigtech.es Telegram: LoQueSomosWeb
Twitter: @LQSomos Facebook: LoQueSomos Instagram: LoQueSomos
