Residencia de Estudiantes, renegar la historia

Cristina Calandre Hoenigsfeld. LQSomos. Enero 2015

El nuevo galardón Sello Patrimonio Europeo “cierra” la posibilidad de ilegalizar el franquismo

Que yo sepa, Madrid ha sido puesta por los historiadores como ejemplo de una ciudad asediada, defendida valientemente por los republicanos durante casi tres años (julio de 1936 hasta abril de 1939) de los ataques fascistas del dictador Francisco Franco y de sus aliados, la Alemania nazi y la Italia fascista, que no pararon de bombardearla.

Podríamos decir que tiene una categoría heroica similar al cerco de Stalingrado, pero sin su fama ni reconocimiento, pues en España no hubo ruptura con el franquismo y esto impidió que se contara la historia de una manera objetiva y no la de los vencedores, como sigue ocurriendo.

Esto lo podemos constatar, pues tanto para el Ministerio de Cultura español, como para la Comisión Europea, lo ven de una manera totalmente falsa, según señalan en sus respectivas páginas webs oficiales con motivo del galardón Sello Patrimonio Europeo, recientemente otorgado a la Residencia de Estudiantes:

Página web del Ministerio de Cultura, Deporte y Educación:
La Residencia de Estudiantes hasta su cierre por el Régimen de Franco en 1936…”

Página web de la Comisión Europea, Comisario de Cultura,
“Until its closure by Franco regime in 1936…”

La Residencia de Estudiantes, que al comienzo de la Guerra Civil en julio de 1936, se encontraba impartiendo cursos de verano para extranjeros, consigue la inmunidad diplomática de las embajadas inglesa y norteamericana y que se colgasen sus banderas, hasta que se fueran todos los estudiantes.

La familia de José Ortega y Gasset se refugia en la Residencia junto a otros residentes, como el propio maestro Ángel Llorca. Durante algunos meses se instala una escuela de niños pobres y huérfanos, hasta que en marzo de 1937 se establece el Hospital de Carabineros, dirigido por el eminente científico de la Junta para la ampliación de Estudios y antiguo médico de la Residencia, el Dr. Luis Calandre Ibáñez, que durante dos años llevó a cabo una gran labor, curando a cientos de milicianos de una epidemia de malaria.

También hizo construir un refugio antiaéreo para defender a los enfermos de las bombas nazi fascistas. Por lo bien que preservó los edificios de la Residencia fue nombrado subdelegado de la Junta para Ampliación de Estudios en octubre de 1938, por el gobierno legítimo de la Segunda República. Por ello se aseguró la continuidad de la antigua Residencia y su espíritu institucionista a través de su director, Luis Calandre Ibáñez. Algo que los encargados de la “modélica rehabilitación” de los edificios, destruyeron durante los años 1990-2000, a pesar de tener esos edificios la máxima protección como BIC.

Constatamos que en ningún momento pudo el régimen franquista “cerrar” la Residencia, que siguió funcionando bajo la legalidad republicana y amparada por su Constitución de 1931, como también lo hizo la Junta para Ampliación de Estudios (JAE) hasta el final de la guerra en abril de 1939. Decir lo contrario es dar por legal el golpe de estado del 18 de julio de 1936 y falsear descaradamente la Historia, además de no reconocer la valiente labor de mi abuelo, Luis Calandre Ibáñez, e ir contra su honor, pues defender la Residencia, convertida en Hospital de Carabineros, le costó la cárcel.

Tengo el convencimiento de que el actual Ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, fue colocado hace tres años por el actual Gobierno al frente del Ministerio, para ser el encargado de presentar a la Comisión Europea a los candidatos seleccionados para el galardón Sello Patrimonio Europeo. Con anterioridad, su hermano Carlos Wert había sido muchos años funcionario en la Residencia de Estudiantes y había participado en reuniones relacionadas con este Sello, junto a otra persona muy implicada en la Residencia, Carlos Alberdi, que luego sería funcionario también en el Ministerio de Cultura, desde donde supongo, apoyaría este galardón a la Residencia. Ambos, muy cercanos a José García Velasco, el que fuera su director tanto real como “honorario” durante casi 30 años, yerno del ministro del Opus Dei y franquista, Sánchez Bella.

Además, ¡cómo no se le iba a convalidar el Sello Patrimonio Europeo a una institución, que aunque hubiera falseado su historia republicana y destruido su patrimonio histórico, estaba presidida por Felipe VI, actual rey del Reino de España!

El Sello Patrimonio Europeo es un esfuerzo inútil por construir una identidad europea artificial, tal como hoy en día está esa institución, en franca decadencia y con un proyecto fallido, como lo es la actual España y su régimen monárquico, heredero del franquismo y también el CSIC, del que depende la Residencia de Estudiantes.

Desmontar todo este tinglado es una tarea que tenemos que llevar a cabo en el 2015, lo antes posible. Deberíamos empezar exigiendo la corrección de esas dos páginas webs, antes comentadas, pues si no lo hacemos, permitimos que tanto la UE, como el gobierno de España, legitimen “oficialmente” el golpe de Estado franquista del 18 de julio y a su heredera la Monarquía parlamentaria, junto a su Constitución de 1978. Todo ello en detrimento de la legalidad republicana y de la verdad histórica de la Defensa de Madrid, en donde el régimen franquista no pudo “cerrar“ ningún edificio, ya que se encontraban intentando conquistar el Madrid republicano desde las trincheras, algo que no conseguiría hasta abril de 1939, a pesar de todas las ayudas internacionales.

Tanto si las dos webs comentadas, utilizan metafóricamente el término “cerrar“, por el comienzo de la guerra o si lo hacen de una forma real, se puede fácilmente rebatir.
La que tendría que ser inmediatamente “cerrada“, es la actual Residencia franquista, presidida por la monarquía.

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Notas:
– European Heritage Label
– El Archivo de la Corona de Aragón, distinguido con el Sello del Patrimonio Europeo