Los Reyes Rinconeros
Por Adolfo Pastor Monleón*
Desde Las Rinconadas, una aldea castellana y manchega, perteneciente al municipio de Santa Cruz de Moya, ubicada en la Serranía de Cuenca, regada por el río Turia, haciendo rayas entre el País Valencia y Aragón.
Unos versos muy apropiados para estos días. Recuerdos de infancia, marcados siempre en 6 de enero, que quedan fijados en nuestro mundo de sueños por encima de lo que pudo ser solo material.
Los Reyes Rinconeros
Cuando llegaban los Reyes
a nuestras humildes casas,
a los pobres Reyes Magos
pocas cosas les quedaban.
A los hijos de los ricos,
en las ciudades lejanas,
les dejaban los regalos
fabricados de oro y plata.
A cambio de un hacecillo
de juncos, bien recortados,
y el agua de un pucherillo,
me dejaban unos higos, nueces y aun una naranja.
Cuando, al hacerse de día,
me acercaba a la ventana,
qué contento me ponían
los higos, las nueces y la naranja.
Mas, mi gran satisfacción
era ver desaparecidos
el hacecillo de juncos,
y el agua del pucherillo.
Los juncos de mi hacecillo
el hambre habían saciado
de los caballos cansados,
y el agua del pucherillo
la sed de los reyes, de los pajes y de los caballos.
* Expresidente y responsable de desaparecidos en la Asociación “La Gavilla Verde”. Activista iaioflauta barcelonés. Catalá y Manchego de Cuenca, al fondo a la izquierda en Las Rinconadas. Otras notas del autor
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